1. El inesperado renacimiento del niño prodigio
Gracias a su sufrida victoria por 3-2 ante el Swansea del debutante Bob Bradley, el Arsenal igualó a puntos con el Manchester City en la cima de la tabla. Una posición con la que pocos soñaban tras haber sumado solo un punto en sus dos primeras jornadas (derrota 3-4 en casa ante el Liverpool y empate sin goles en Leicester). Los Gunners son estadísticamente el equipo más en forma del país tras sumar el sábado su sexta victoria consecutiva en liga. El protagonista de este triunfo fue un jugador que hace apenas un par de meses fue relacionado con clubes de media tabla como su Southampton de origen. Theo Walcott está viviendo un inesperado renacimiento a sus 27 años. La ausencia en la convocatoria inglesa para la Euro de este verano supuso el punto más bajo en la carrera de un jugador que sí estuvo en el Mundial de 2006 con 17 años recién cumplidos. Pero Walcott ha vuelto por sus fueros, como demuestran sus siete goles en nueve partidos con el Arsenal esta temporada, que contrastan con los nueve que sumó en 42 partidos la temporada pasada. Una racha que le ha permitido regresar a la selección y consolidarse en el once de Arsène Wenger. Cuando esté recuperado, Aaron Ramsey afronta una complicada misión para sentar de nuevo a Walcott.
2. Un escenario propicio
En los últimos años, Selhurst Park se ha convertido en terreno abonado por el West Ham. Los Hammers se presentaron en el sur de Londres como inquilinos de los puestos de descenso y entre rumores sobre la continuidad de Slaven Bilic pero salieron reforzados tras su tercer triunfo consecutivo al estadio del Crystal Palace. El partido se decidió en dos acciones puntuales: el gol de Manuel Lanzini tras una excelente combinación entre Aaron Cresswell y Dimitri Payet en la izquierda, y el error desde el punto de penalti de Christian Benteke. Antes, en medio y después, un fútbol soporífero rematado por un arbitraje caótico. El Palace queda anclado en la octava posición, la primera de la liga de la media tabla, a la que también aspira el West Ham. Sobre todo si consigue que alguna vez un delantero marque un gol. André Ayew (solo pudo jugar los primeros 35 minutos de liga), Andy Carroll (un partido), Ashley Fletcher, Simone Zaza y Jonathan Calleri suman… cero.
3. Una hermosa escopeta… que no dispara
El Manchester City es el equipo que acumula más posesión en la Premier League esta temporada (60,3%), muy por delante de clubes como Arsenal (55,3%) o Manchester United (54,8%). Sin embargo, el City es solo el quinto equipo en disparos por partido. A pesar de tener menos el balón, Liverpool, Tottenham, Manchester United y Chelsea disparan con más frecuencia sobre la portería rival. Es cierto que las cifras se igualan si examinamos los disparos entre los tres palos, una clasificación que domina el Liverpool (7) por delante de Tottenham, Manchester City (6,3 ambos), Chelsea y Manchester United (6 por cabeza). Pero la realidad es que el equipo de Pep Guardiola no está logrando exprimir su superioridad sobre el terreno de juego. Venció al colista Sunderland con un gol en propia puerta, ante Swansea y West Ham solo pudo sentenciar en la recta final, se asfixió con el pressing de ataque de Celtic de Glasgow y Tottenham, y este fin de semana fue incapaz de tumbar al Everton a pesar de gozar de dos penaltis (errados por Kevin De Bruyne y Sergio Agüero). Si no logran afinar la puntería, los Citizens pueden salir escaldados del Camp Nou este miércoles.
4. Los horrores a balón parado del Leicester
El Leicester ha disputado tres partidos de liga antes de semana europea. Su balance es de tres derrotas. La última, este sábado ante el Chelsea. Con la mente puesta en el duelo clave ante el Copenhague de Champions League, Claudio Ranieri reservó a los argelinos Islam Slimani y Riyad Mahrez tras sus actividades internacionales y recuperó del ostracismo a Ahmed Musa y Jeffrey Schlupp. El plan del italiano se mantuvo en pie ocho minutos, que fue lo que tardaron los Foxes en encajar el primer gol, una vez más tras un saque de esquina. El Leicester salió goleado 4-1 de Old Trafford tras encajar tres goles de córner. En esta ocasión, el resultado fue de 3-0 y de nuevo el equipo fracasó en su defensa a balón parado. Ranieri debe hacer algo para frenar esta sangría o puede acabar sufriendo en la liga.
5. El matagigantes Pulis
Tony Pulis tomó las riendas del West Brom el 1 de enero de 2015. Desde entonces se ha enfrentado en siete ocasiones a los seis nuevos grandes (Manchester City, Manchester United, Arsenal, Tottenham, Chelsea, Liverpool), con un balance de una victoria, cuatro empates y solo dos derrotas (en casa de Manchester City y Arsenal). El técnico galés parece haber encontrado la fórmula para contener a los grandes a base de atrincherarse cerca de su portería y lanzar misiles tierra-aire cuando su equipo recupera la posesión. Unas cifras que sin duda animarán al entrenador del West Bromwich ahora que se avecinan dos duelos consecutivos ante Liverpool y Manchester City…
6. Mejor te quedabas como estabas, Mike
Tras toda una vida a la sombra de Sir Alex Ferguson en el Manchester United, Mike Phelan se topó de bruces con la oportunidad de su vida cuando, el 22 de julio, apenas semanas antes de la temporada, Steve Bruce presentó su dimisión. El club, sumido en un complejo proceso de venta, decidió darle las riendas provisionalmente a la espera de la contratación de un técnico definitivo. Dos victorias en las dos primeras jornadas permitieron a Phelan ser nombrado mejor técnico de la liga en el mes de agosto. Finalmente, casi tres meses después de tomar las riendas, el club le ha nombrado técnico permanente del equipo, que ha sumado un punto de los últimos dieciocho y ya se encuentra al borde del precipicio. Considerando cómo las gastan en Hull, es posible que el club tarde menos en despedir a Phelan de lo que tardó en confirmar su posición.
7. El Xavi galés
En estas ocho jornadas de liga, Joe Allen ha marcado cuatro de los siete goles del Stoke. Son los mismos goles que logró en sus cuatro temporadas en el Liverpool. El pequeño Allen despuntó en el Swansea bajo las órdenes de Brendan Rodgers, que se lo quiso llevar con él a Liverpool y le hizo un flaco favor cuando, en un intento de elogio, le bautizó como “el Xavi galés”. Esa etiqueta le persiguió durante su estancia en Anfield donde, a pesar de cumplir siempre con creces, no pudo hacerse con un hueco en el once. Este verano, finalmente, Allen decidió abandonar Liverpool para asumir mayor responsabilidad en Stoke. Aunque el equipo está protagonizando un inicio decepcionante (está en puestos de descenso a pesar de vencer al Sunderland el fin de semana), Allen parece haber recuperado su mejor versión, la que ofreció en el sur de Gales.
8. La pena máxima
Esta temporada, se han señalado 29 penaltis, de los cuales se han transformado solo 20. Eso equivale a un índice de éxito del 69%. Este fin de semana ha resultado especialmente dramático en lo que lanzamientos desde los once metros se refiere. El Manchester City erró dos en su partido ante el Everton, el primero a botas de Kevin De Bruyne y el segundo de Sergio Agüero. Sus errores acabaron costándole a su equipo dos valiosos puntos en casa. Otro tanto se puede decir de Christian Benteke, cuyo error permitió al West Ham marcharse de Selhurst Park con los tres puntos. Tras los dos errores de su equipo, Pep Guardiola esgrimió dos motivos: primero, el poco tiempo que había tenido para entrenar con sus jugadores tras el parón de selecciones y, en segundo lugar, que resulta imposible entrenar los lanzamientos de penalti porque no se puede reproducir la presión de un partido real en una sesión de entrenamiento. Aun asumiendo la veracidad de ambos argumentos, De Bruyne y Agüero enviaron sus penaltis a media altura, centrados y con escasa potencia. Benteke directamente lo envío a la fila Z. Quizás un poco de práctica no les sentaría mal.
9. ¿Una moda pasajera o una tendencia de fondo?
En estas ocho jornadas de Premier League, al menos seis equipos han utilizado en algún momento la defensa de tres centrales: Manchester City, Swansea, Everton, West Ham, Watford y Chelsea. La influencia italiana es más que evidente: Francesco Guidolin, Walter Mazzarri y Antonio Conte dirigían (el primero ya fue despedido) a tres de esos seis equipos. El Mundial de Brasil de 2014 puso de nuevo en boga la defensa de tres (amén del rol del portero como líbero) a nivel internacional aunque algunos técnicos aislados ya lo hicieron en el pasado en Inglaterra. Poco antes del Mundial, Roberto Martínez utilizó este sistema en Wigan, mientras que Steve Bruce lo hizo en Hull con el añadido de utilizar dos delanteros. Ahora parece que, bajo el impulso italiano, vuelve a ponerse de moda la defensa de tres. Los resultados, sin embargo, distan de ser esperanzadores: Guardiola, Koeman y Bilic lo han usado esporádicamente y no parece que vayan a insistir, Guidolin fue despedido y solo Conte y Mazzarri parecen dispuestos a seguir apostando por este sistema. Sus resultados dictarán sentencia.
10. Karanka necesita hallar soluciones
Solo el Sunderland (6) y el Burnley (5) han marcado menos goles en esta Premier League que el Middlesbrough (7). El uruguayo Christian Stuani, que ni siquiera juega como delantero, ha marcado casi la mitad de esos goles (3), mientras que los jugadores rivales han marcado los mismos tantos que su delantero centro (Álvaro Negredo, 1). Aitor Karanka está demostrando una fe inquebrantable en Negredo, que ha sido titular en siete de los ocho partidos de liga a pesar de sus mediocres cifras goleadoras. El técnico español tan solo le ha dado 101 minutos a Jordan Rhodes y 40 a David Nugent. Tampoco le ha dado oportunidades en punta a jugadores como Stuani, Viktor Fischer o Adama Traoré que, sin ser delanteros centros natos, podrían ocupar esa posición. O logra resolver ese problema, o Karanka puede acabar con las maletas en la puerta.