public://video_embed_field_thumbnails/youtube/WLnlCmFteuI.jpg
a:1:{s:7:»handler»;s:7:»youtube»;}
1. Juventud al poder
Ha sido un fin de semana prolífico para los jóvenes británicos. El sábado debutó con el Liverpool el extremo izquierdo Ben Woodburn, de 17 años, que aprovechó la ausencia de última hora por lesión de Daniel Sturridge. Aunque Jürgen Klopp no le hizo debutar hasta el descuento, fue suficiente para convertirse en el tercer jugador más joven en estrenarse con los Reds en toda su historia (17 años y 42 días, solo por detrás de Jack Robinson y Jerome Sinclair). También el sábado, Josh Tymon disputó su segundo partido de Premier League con el Hull City, también al salir en el descuento del partido. Tymon es un lateral izquierdo de 17 años que ha sido internacional con la selección inglesa sub-17. Pero quizás el debut más espectacular fue el de Josh Sims, el extremo izquierdo del Southampton, que debutó en Premier League el domingo y tardó solo 41 segundos en dar su primera asistencia para que Charlie Austin marcara el que sería el gol de la victoria. No será la última vez que oigamos hablar de él.
2. Los elogios de Guardiola
Tras unos años en que el fútbol directo ha sido sometido a un profundo proceso de demonización y el fútbol asociativo se ha convertido en norma, las palabras de Pep Guardiola tras el sufrido triunfo del Manchester City en Burnley suponen un justo reconocimiento al “otro fútbol”. El técnico catalán elogió el fútbol de su rival, a pesar de estar en las antípodas de sus propias creencias. Guardiola alabó la capacidad del equipo de Sean Dyche en las segundas jugadas, los centros laterales y el juego aéreo. Desde la diferencia, el catalán reivindicó que todos los estilos son admisibles siempre que se hagan con propiedad. Y si alguien practica y bien el juego directo, ese es el Burnley.
3. El partido del año
Stan Collymore afirmó después del 5-4 entre Swansea y Crystal Palace que las defensas habían protagonizado una actuación digna de un equipo alevín. Cuando se producen muchos goles en un partido, se ha convertido en costumbre entre los comentaristas y exprofesionales dilapidar a las defensas. Pero lo cierto es que esos errores fueron los que nos regalaron el partido más apasionante del año. El Swansea parecía tener la victoria encarrilada a falta de un cuarto de hora con 3-1 pero en cuestión de diez minutos, el Palace marcó tres goles para poner el 3-4 que parecía abocar a los galeses al precipicio. Pero entonces apareció Fernando Llorente para anotar un doblete en tiempo añadido para poner el 5-4 final. Ojalá más defensas así.
4. Este coche no arranca
Claudio Ranieri advirtió antes del encuentro ante el Middlesbrough de la importancia de cosechar los tres puntos para reconducir la trayectoria del equipo en liga, una vez sellada la primera posición en su grupo de Champions League. Pero no hay forma. El recién ascendido Boro estuvo a segundos de llevarse la victoria del King Power pero un penalti de Islam Slimani permitió al todavía vigente campeón salvar un punto. Los próximos tres meses serán claves para los Foxes. Sin la Champions estorbando, el equipo de Ranieri debe remontar el vuelo para poder centrarse solamente en la máxima competición continental cuando vuelva en febrero. Máxime considerando que Riyad Mahrez e Islam Slimani se marcharán casi un mes en enero para competir con Argelia en la Copa de África.
5. El Liverpool nota las ausencias
La visita del Sunderland parecía un partido idóneo para que el Liverpool se mantuviera una semana más en la cima de la tabla de la Premier League. Pero la lesión de Philippe Coutinho en la primera parte, sumada a la ya sabida baja de Adam Lallana, provocó que a los Reds se les apagaran todas las luces cada vez que pisaban el área rival. Finalmente fue Divock Origi, el sustituto de Coutinho, quien marcó el tanto que derribó la barrera del equipo de David Moyes. Jürgen Klopp debe tener los dedos cruzados a la espera del diagnóstico sobre la lesión de Coutinho, que podría perderse el próximo mes. Por fortuna, Lallana debería estar a punto para la próxima semana. Los Reds afrontan la época más difícil del año, con la maratón navideña y la semifinal a ida y vuelta de la Copa de la Liga… si ganan esta semana al Leeds en Anfield.
6. Semana negra
Mauricio Pochettino es considerado en Inglaterra como un entrenador de primer nivel mundial, prácticamente al mismo nivel de Jürgen Klopp, por ejemplo. Sin embargo, el argentino está viviendo la época más aciaga de su etapa en White Hart Lane. El martes, su equipo cayó eliminado de la Champions League tras sumar tres derrotas en cuatro partidos. Y el sábado perdió su imbatibilidad en liga tras sucumbir en el derbi londinense contra el Chelsea. Los Spurs se han quedado descolgados de los cuatro primeros puestos (están a cuatro puntos del Arsenal) pero, al menos, ya no tendrán la distracción de las semanas europeas. La Europa League no es una distracción ni es europea.
7. El Stoke remonta el vuelo
En Watford se encontraban dos equipos históricamente modestos pero que, bajo el mando de dueños ambiciosos, aspiran a convertirse en una versión local del Tottenham. Los Hornets de Walter Mazzarri han protagonizado un arranque notable con su defensa de tres y una victoria aquí les habría colocado en sexta posición. Enfrente, el Stoke de Mark Hughes, que comenzó titubeante pero sumó este fin de semana su cuarta victoria en los últimos seis partidos y escaló hasta el undécimo lugar. Una racha especialmente positiva considerando que el Stoke no ganó ninguno de sus siete primeros partidos. Dos buenos equipos que no sufrirán por mantenerse en la élite esta temporada pero que difícilmente podrán superar el octavo lugar.
8. El maestro gana al discípulo
En el Emirates se encontraban los dos entrenadores de la Premier League que llevan más tiempo al frente de sus respectivos equipos. Arsène Wenger es el decano del fútbol profesional inglés con sus más de veinte años al frente del Arsenal. Eddie Howe es su inmediato seguidor. El joven entrenador inglés lleva algo más de cuatro años al frente del Bournemouth. Los medios llevan tiempo especulando con la posibilidad de que sea precisamente Howe quien sustituya a Wenger al frente del Arsenal cuando finalmente el alsaciano decida colgar la chaqueta (y la cremallera, claro). Y el magnífico partido de los Cherries no hizo otra cosa que reforzar la candidatura de Howe. El Bournemouth fue superior al Arsenal en la primera parte y solo encajó el 3-1 definitivo en el descuento. A pesar de no poder contar con Jack Wilshere, el equipo de Howe demostró que sabe a qué juega y no le tiemblan las piernas al hacerlo. Pero Alexis es demasiado Alexis.
9. “You are not special anymore”
Ese se ha convertido en el cántico recurrente entre los aficionados de los equipos rivales del Manchester United. Y uno comienza a pensar que la frase puede encerrar algo de verdad. El domingo, el West Ham se hizo acreedor al empate y, en los instantes finales, pudo haberse llevado la victoria de un estadio que, históricamente, le ha dado la espalda. José Mourinho ha tocado y retocado su equipo una y otra vez esta temporada pero sigue sin dar con la solución. Comenzó apostando por Marouane Fellaini como medio centro y Wayne Rooney en la media punta. Ambos arrancaron aquí en el banquillo. Condenó a Henrikh Mkhitaryan y Bastian Schweinsteiger al ostracismo pero los ha acabado recuperando para la causa. Juan Mata y Ander Herrera no parecían ser el prototipo de jugador que premia el portugués pero sus actuaciones les han permitido ganarse un puesto en el once. El último condenado ha sido Anthony Martial, no convocado este domingo tras las críticas públicas de su entrenador. Matteo Darmian, Phil Jones, Chris Smalling, Luke Shaw, Daley Blind, Michael Carrick o Marcus Rashford también han entrado y salido del equipo, que parece vivir en un estado constante de tensión. Lo único que no cambia es Memphis Depay: nadie cuenta con él.
10. Amargo retorno
Ronald Koeman fue recibido en Southampton con cánticos agresivos por parte de los que fueran sus aficionados. El holandés no solo abandonó el equipo en verano para fichar por el Everton sino que esta semana echó más leña al fuego afirmando que decidió cambiar de aires porque quería “fichar por un equipo grande”. El que fuera su equipo se encargó de que se tragara sus palabras tras vencer por 1-0, un resultado que coloca al Southampton en décima posición, a solo dos puntos de los Toffees. Charlie Austin marcó su sexto gol en liga y permitió a Claude Puel lograr una victoria balsámica tras caer en Europa League entre semana.