1. Arsenal toca fondo, capítulo 4852
En el último mes, el Arsenal ha perdido el derbi del norte de Londres contra el Tottenham, dos veces contra el Manchester City, en casa contra un equipo sueco que en 2010 estaba en cuarta división y contra el Brighton, un recién ascendido a la Premier League, este domingo. “El Arsenal ha tocado fondo” es una frase que hemos oído un buen puñado de veces durante los últimos dos años pero el equipo siempre encuentra una forma de caer todavía más bajo. Los Gunners se disponen a encadenar su segunda temporada consecutiva sin Champions a menos que se produzca un milagro en la Europa League, quedaron eliminados de la Copa tras ser goleados por el Nottingham Forest de segunda división y ni siquiera los fichajes millonarios de Alexandre Lacazette y Pierre-Emerick Aubameyang han servido para frenar su imparable declive. Ante el Brighton, dio la impresión de que algunos jugadores han dejado de luchar por Arsène Wenger. Es la primera vez que eso sucede. Es el principio del fin.
2. La incomprensión de Big Sam
El Everton sumó en Burnley su quinta derrota consecutiva fuera de casa. Los Clarets no ganaban un partido desde el 12 de diciembre pero los Toffees son, a día de hoy, el visitante más asequible de la liga. Esta semana, Sam Allardyce mostró su estupefacción por los rumores de despido que corren por la parte azul de Liverpool. Pero una ojeada a los números basta para comprender el origen de esos rumores. Desde que Big Sam llegó a Goodison Park, el Everton es el equipo de la liga que menos dispara contra la portería rival y el que menos oportunidades crea. La estrategia favorita del veterano entrenador inglés consiste en aparcar el autobús y confiar en que sus jugadores de más talento encuentren el camino hacia el gol. La inversión millonaria de los Toffees y la ambición de su dueño iraní Farhad Moshiri reclaman algo más de imaginación y espíritu ofensivo. Y esos no son los fuertes de Big Sam.
3. Son vs Lamela vs Moura
El Tottenham venció con comodidad al Huddersfield por 2-0 en Wembley con un doblete de Heung-min Son. El surcoreano ya había anotado un doblete tres días antes en la goleada por 6-1 ante el Rochdale en el replay de Copa de octavos de final. Mauricio Pochettino afronta una decisión complicada antes del partido de vuelta de octavos de final de la Champions League ante la Juventus. Christian Eriksen y Dele Alli son fijos en la alineación pero ¿quién les acompañará en la media punta? Erik Lamela fue el elegido en el partido de ida pero, desde entonces, Lucas Moura ha progresado en su adaptación al equipo y Son ha demostrado ser el más decisivo de los tres. Si Pochettino opta por el que conozca mejor a los juventinos, debería optar por Lamela, que estuvo un par de temporadas en la Roma. Si lo que busca es velocidad y regate, Moura tiene muchas oportunidades de estar en el once. Si lo que quiere es gol, el elegido debe ser Son.
4. Southampton y Stoke se abrazan para caer juntos
En St. Mary’s se disputó un duelo directo por la salvación entre Southampton y Stoke, dos clubes históricos que encadenan ya varias temporadas en la Premier League y que han realizado una inversión considerable en fichajes en los últimos años. Ninguno de los dos esperaba encontrarse en esta tesitura a principio de temporada. Los Potters finalizaron en novena posición en las primeras tres temporadas de Mark Hughes a cargo del equipo, mientras que los Saints acabaron en octava posición el curso pasado con Claude Puel. Pero ninguno de los dos estuvo el sábado en la costa sur. A mitad de temporada, Paul Lambert sustituyó a Hughes en los Potters pero el equipo sigue en descenso. En verano, Mauricio Pellegrino reemplazó a Puel en los Saints y no solo no ha logrado superar a su predecesor sino que mantiene al equipo al borde del precipicio. Como era previsible, el partido acabó sin goles y ese solitario punto mantiene a ambos conjuntos en grave riesgo de descenso.
5. Se aclara el descenso… y la Champions
Esta temporada hemos asistido a la fractura de la liga en dos: por un lado, los seis grandes; y, por el otro, el resto. Pero, dentro de esos bloques, ha imperado la igualdad. Al menos hasta ahora. A falta de nueve jornadas para el final, el horizonte comienza a clarear. Por arriba, el Manchester City ganó la liga hace ya varios meses pero parecía que la pelea por los tres restantes puestos de Champions League sería encarnizada. La debacle del Arsenal y la mala racha del Chelsea, ambos derrotados el fin de semana, han abierto la puerta de par en par para que Liverpool, Manchester United y Tottenham sean los representantes ingleses en Champions la próxima temporada. Por abajo, las victorias de Brighton y Watford les han acercado a la salvación, mientras que el West Brom parece condenado tras su última derrota. Así que los dos puestos restantes de descenso parecen cosa de siete equipos: Swansea, West Ham, Huddersfield, Newcastle, Southampton, Crystal Palace y Stoke. Solo el Swansea parece encarar esta recta final en racha (los galeses han sumado 13 puntos de los últimos 18) y si mantienen su forma, deberían estar a salvo. El West Ham tiene plantilla y experiencia suficientes como para salir de este aprieto. Respecto a los otros cinco… que se salven los mejores.
6. Antonio Conte quiere ser despedido
Para rendir visita al Manchester City, Antonio Conte optó por replicar la estrategia utilizada ante el Barcelona en Champions League. Es decir, el 3-4-3 de la temporada pasada con Eden Hazard de falso nueve. Sobre el papel, parecía una decisión no especialmente valiente pero sí lógica. Ese planteamiento funcionó durante la primera mitad, en la que el City controló el balón pero apenas dispuso de ocasiones. Pero una vez que Bernardo Silva anotó el 1-0 nada más comenzar la segunda parte, Conte no reaccionó. Eden Hazard continuó desesperándose solo en punta y el Chelsea vivió hasta los últimos diez minutos sin salir de su propio terreno de juego. Hasta el 78, Conte no dio entrada a Olivier Giroud pero su decisión más extraña se produjo cuando dio entrada a Álvaro Morata en el minuto 89. El delantero que quiso fichar a toda costa en verano y por el que el Chelsea pagó 80 millones de libras solo dispuso de un minuto más el descuento para marcar el gol del empate. La paciencia con Conte se está agotando en Stamford Bridge pero, visto lo visto, quizás la de Conte con su entorno se agotó ya.
7. El Liverpool actual quiere repetir la gesta de Benítez
Rafa Benítez regresó el sábado a Anfield, el escenario donde se convirtió en uno de los entrenadores más prestigiosos del mundo. Su Newcastle cayó por 2-0 ante el Liverpool de Jürgen Klopp, que encara la recta final de la temporada en plena forma. La titularidad de Loris Karius y el fichaje de Virgil van Dijk han aportado solidez a la línea más frágil del equipo mientras que Alex Oxlade-Chamberlain sigue creciendo semana tras semana. Arriba, el tridente ofensivo tiene argumentos para erigirse como el más letal en Europa esta temporada. Los Reds han anotado 105 goles esta temporada en todas las competiciones y 68 de ellos los han marcado entre Roberto Firmino, Mohamed Salah y Sadio Mané. Los dos últimos fueron precisamente los autores de los goles ante las urracas. En los últimos seis partidos, el Liverpool ha marcado 18 goles, 16 de los cuales han sido obra de sus tres jugadores ofensivos. Benítez logró lo impensable en 2005 al conquistar una Copa de Europa que parecía perdida con un 3-0 en contra al descanso. Si un equipo es capaz de romper todos los pronósticos y reeditar aquella gesta, ese es el actual Liverpool.
8. Ayew & Ayew
Solo dos equipos (Manchester City y Tottenham) han sumado más puntos que el Swansea en las últimas seis jornadas. La transformación del equipo con Carlos Carvalhal ha sido radical. Y eso que la fortuna no ha estado de su lado. Hace algunas semanas, Wilfried Bony y Leroy Fer cayeron lesionados de gravedad. Pero el entrenador portugués ha sabido encontrar pequeñas perlas en el mercado invernal. En enero, Carvalhal incorporó a Andy King cedido del Leicester y a André Ayew, que regresó a Gales para reunirse con su hermano Jordan. En la victoria por 4-1 ante el West Ham, King se estrenó como goleador pero los titulares se los llevaron los hermanos Ayew, que compartieron la punta de ataque y torturaron a la frágil defensa de los Hammers. Cuando le preguntaron por los fichajes que esperaba hacer en enero, el aficionado a las metáforas Carvalhal respondió que “el problema es que yo quiero langostas y el club me da dinero para sardinas”. El portugués ha sido capaz de encontrar langostas a precio de sardinas.
9. Tópicos
El fútbol es un deporte de tópicos. Uno de los más repetidos es “no se puede retener a un jugador contra su voluntad”. La teoría es que no conviene mantener a un jugador en un club en el que no quiere estar porque su rendimiento decae. Una falacia que los casos de Luis Suárez, Philippe Coutinho o Riyad Mahrez ha dejado en evidencia. El argelino anotó un hermoso gol de falta que permitió al Leicester empatar ante el Bournemouth en el descuento. A pesar de haberse autodeclarado en huelga después de que los Foxes le negaran su traspaso al Manchester City este enero, Claude Puel le ha reinstaurado en el equipo con mano izquierda y el argelino está rindiendo al mismo nivel de siempre. El entrenador francés ha actuado con sutileza para convencer a Mahrez de que lo mejor era que volviera a jugar y al resto de la plantilla para que le recibieran con los brazos abiertos tras dejarles en la estacada. Y el beneficiado es el equipo, que sigue en liza por la séptima plaza y Europa, y soñando con la Copa (recibirá al Chelsea en cuartos).
10. Si alguien merece bajar, es el West Brom
La frase más repetida en la zona de prensa de Vicarage Road tras el triunfo por 1-0 del Watford fue “el West Brom no mereció perder esta vez”. Es cierto que el Watford no hizo muchos más méritos para llevarse la victoria pero el partido podría haber caído de cualquiera de los dos bandos. El problema es que los Baggies han llegado aquí con el agua al cuello y solo le vale sumar de tres en tres. El dueño chino del club se precipitó despidiendo a Tony Pulis y erró contratando en su lugar a Alan Pardew. El equipo no ha mejorado con el inglés y se metió en un buen embrollo con su escapada a Barcelona. Quizás el West Brom no mereció perder en Watford. Pero si alguien merece bajar, son ellos.