1. Otro duro derbi para el West Ham
En cuestión de cuatro días, el West Ham disputará dos derbis en el London Stadium. El primero se saldó con una providencial victoria ante el vigente campeón, el Chelsea, por 1-0. Parece que David Moyes ha encontrado ya el sistema y los hombres adecuados, aunque sea por casualidad. El escocés no pudo alinear a Joe Hart ante el Manchester City por contrato y descubrió que tenía en el banquillo a un gran portero en Adrián San Miguel. Lo mismo se puede decir de las lesiones de Andy Carroll y Javier Hernández, que le obligaron a alinear a Michail Antonio en punta, Marko Arnautovic en banda y Arthur Masuaku como carrilero. El Arsenal llega herido tras el empate en Southampton y con la baja de Aaron Ramsey, un lugar que podría ocupar Jack Wilshere, que no es quizás la mente más fría cuando de disputar un derbi se trata.
2. Puel regresa a Southampton
Claude Puel regresa a Southampton al frente de su renacido Leicester. Los Saints decidieron deshacerse del técnico francés en verano tras una sola temporada a pesar de haber conducido al equipo a una cómoda posición en la mitad alta de la tabla y a la final de la Copa de la Liga. Un despido quizás algo riguroso pero que el técnico ha aprovechado para recalar en un equipo que ahora transita por zonas más altas a las de los Saints. El equipo de la costa sur andaba buscando a un nuevo Pochettino en la figura de Mauricio Pellegrino pero lo cierto es que, ahora mismo, el exasistente de Rafa Benítez parece más cerca de seguir los pasos de Puel que los de Pochettino. Es decir, un despedido veraniego antes que un fichaje por un grande inglés.
3. Una noche en Champions
El martes, la revelación Burnley recibirá a un Stoke en horas bajas. Si ganan, los Clarets dormirán una noche en cuarta posición, solo por detrás de los clubes de Mánchester y el Chelsea. No está mal para un equipo formado a base de jugadores de segunda división y que no enlaza (ni intención tiene de hacerlo) dos pases seguidos en campo rival. Sean Dyche se ha convertido en el técnico inglés de moda, en el máximo (¿único?) exponente de la nueva generación de entrenadores locales que siguen apostando por el fútbol directo. Al Mourinho pelirrojo no le inquita lo más mínimo la posesión, su único interés cuando tiene el balón es llegar lo más rápido posible a la meta ajena. Dyche deberá afrontar los próximos meses sin el zurdo Robbie Brady, un jugador fundamental en el equipo por su habilidad a balón parado. Scott Arfield, su sustituto el fin de semana, marcó el gol de la victoria ante el Watford porque ese es otro de los méritos de este equipo. No importa quién juegue, siempre lo hacen igual.
4. El Chelsea visita un escenario difícil
Tras su derrota en el London Stadium, el Chelsea se despidió de la liga. Así que, ahora, el objetivo de los muchachos de Antonio Conte debe ser garantizar cuanto antes un puesto entre los cuatro primeros y apostarlo todo a la Champions League (aunque el sorteo no ha sido muy benévolo con los Blues, que se enfrentarán al Barcelona). El primer escollo será la visita al recién ascendido Huddersfield, que ya se las hizo pasar canutas a los equipos de Mánchester. El United sucumbió por 2-1 tras irse al descanso perdiendo por dos goles, mientras que el City remontó en la segunda parte la ventaja inicial de los Terriers. Si quiere ganar, el Chelsea deberá sudar la gota gorda. Lo que no sabemos es si lo hará Tiémoué Bakayoko, señalado el fin de semana tras ser sustituido al descanso en los Blues, que podría arrancar el partido en el banquillo.
5. ¿Pagará el pato Benteke?
En el descuento encuentro entre Crystal Palace y Bournemouth del sábado, los locales dispusieron de una oportunidad de oro para romper el 2-2 y llevarse tres puntos vitales para abandonar la cola de la clasificación. El árbitro señaló un penalti a favor del Palace y Luka Milivojevic, el lanzador designado por Roy Hodgson, agarró el balón para realizar el disparo desde los once metros. Pero en su camino se interpuso Christian Benteke, un delantero necesitado de goles, que mostró firmemente su intención de lanzar. Y así lo hizo. Pero falló. Y se ganó la reprimenda pública de Hodgson y de buena parte de sus aficionados. El martes, el Palace recibe al Watford. ¿Le costará su desacato la titularidad a Benteke? Y, en caso de acabar saltando al césped, ¿cómo le recibirán sus aficionados?