1. Wenger quiere apagarle la luz a Moyes
Resulta ciertamente paradójico que el feudo del Sunderland reciba la denominación de Stadium of Light, teniendo en cuenta que precisamente eso, luz, es lo que cuesta vislumbrar en el futuro del equipo. El conjunto dirigido por David Moyes abrirá la décima jornada de la Premier League recibiendo al Arsenal de Arséne Wenger. Los londinenses, que vieron como su impecable racha de victorias tocó a su fin tras empatar ante el Middlesbrough el pasado fin de semana, recuperan a Olivier Giroud, aunque no se espera que el galo irrumpa en el once inicial. A pesar de que el partido enfrenta al último clasificado con uno de los líderes, es difícil pensar que vaya a ser un encuentro sencillo para el Arsenal. De los siete partidos perdidos por el Sunderland en lo que va de Premier, en cinco de ellos la derrota se produjo por un gol de diferencia. Nadie pone en duda la intensidad y la lucha de los norteños. Lo que sí genera más inquietud es su falta de juego, calidad y goles.
2. La antítesis futbolística se reúne en The Hawthorns
La última victoria del Manchester City se remonta al pasado 24 de septiembre —hace ya más de un mes—. Desde entonces, los Sky Blues suman seis partidos sin vencer. La necesidad de sumar tres puntos resulta acuciante, no tanto por términos clasificatorios sino para acallar las críticas y la rumorología que se ha desplegado en el sector celeste de la ciudad. Este fin de semana, los de Pep Guardiola visitan The Hawthorns. Hay que admitir que hay estadios menos incómodos para jugar bajo presión. Los de Tony Pulis tampoco están pasando por una dinámica excesivamente boyante (cuatro partidos consecutivos sin ganar), pero las dotes del técnico inglés para diseñar partidos rocosos no son lo que mejor le viene ahora mismo al City, que necesitará mejorar en precisión, clarividencia y definición para solventar positivamente el envite. De no conseguirlo, aumentarán las opciones de un eventual naufragio en el particular Triángulo de las Bermudas del West Brom, conformado por Jonny Evans, Gareth McAuley y Claudio Yacob. Un tridente no apto para ligamentos sensibles.
3. Cuentas pendientes y reminiscencias de fracaso
El mejor Liverpool desde la temporada 2013-14 llega al inicio de la décima jornada de esta Premier League como colíder del campeonato. Este fin de semana, los de Jürgen Klopp tendrán una nueva oportunidad de anunciar su candidatura al título en Selhurst Park, precisamente el estadio en el que aquel equipo dirigido por Brendan Rodgers se despidió de la liga en la penúltima jornada, tras desaprovechar un 0-3 a favor a falta de quince minutos. El partido de este sábado no ostenta la misma relevancia, pero resarcirse con una victoria ante el Crystal Palace permitiría a los Reds mantenerse en la cabeza de la clasificación. También es un encuentro con cuentas pendientes para Benteke, que abandonó el Liverpool en el periodo estival después de que Klopp dejase claro que no iba a ser una pieza importante en su esquema. Los londinenses buscarán un resultado positivo que les permita volver a sumar, pues comienza a emerger el riesgo de quedarse en tierra de nadie.
4. Prueba de nivel para la resurrección blue
Así como los tres líderes de la Premier League actúan como visitantes en esta jornada, lo mismo sucede con el cuarto clasificado: el Chelsea de Antonio Conte, que tras sumar nueve puntos de nueve en lo que va de mes de octubre se ha reenganchado a la parte alta de la tabla. El golpe de timón hacia el 3-4-2-1 ha supuesto una mejoría inmediata, tanto en resultados como en sensaciones: Matic ha dejado de ser un caos con patas, Victor Moses se ha destapado como un carrilero muy competente e incluso David Luiz parece buen futbolista. Todo es optimismo y bonanza en Stamford Bridge, a pesar de la reciente eliminación en EFL Cup ante el West Ham. No obstante, con sólo un cuarto de la temporada disputada, toca seguir remando. Así, esta semana el Chelsea viajará a la zona meridional de la isla para enfrentarse al Southampton, que año tras año se erige como uno de los proyectos más estables de la Premier. Claude Puel ha recogido el testigo de Mauricio Pochettino y Ronald Koeman y tiene ubicados a los Saints en la octava posición. Un verdadero éxito para los sureños.
5. Diferentes pero parecidos
Aitor Karanka y Eddie Howe son los dos entrenadores más jóvenes de la primera división de la liga inglesa. El fútbol que promueven es claramente opuesto: mientras el técnico vasco dirige a un club que opta por defender de forma sólida y salir al contragolpe, el inglés se ha ganado su reputación gracias a un estilo predominantemente asociativo. Por eso mismo, se espera que el encuentro entre Middlesbrough y Bournemouth de este fin de semana sea un choque entre dos formas diferentes de ver el fútbol. Sin embargo, ambos comparten ciertas similitudes: representan a localidades relativamente pequeñas, a equipos llamados a estar en la zona baja, y tienen ciertos problemas para ver portería. Los Cherries han marcado tantos goles ante el Hull (seis) como en los otros ocho partidos juntos, pero pese a su deficiencia anotadora, transitan por la zona cómoda de la tabla. Mucha más urgencia tiene el Middlesbrough, que no gana desde la segunda jornada y está al borde del descenso, aunque la buena actuación realizada en el Emirates la semana pasada les permite mirar al futuro con cierto optimismo.