Aaron Cabado

Cinco cosas que podrían pasar este fin de semana en la Premier League

Decimotercera jornada. Anfield y Salah se preparan para recibir a un Chelsea al alza, United y City se enfrentan a dos recién ascendidos, Dyche y Wenger confrontan sus idearios futbolísticos y Paul Clement se juega el puesto.

Reds and Blues

Liverpool y Chelsea se enfrentarán este sábado en el partido estrella de la jornada, un duelo personificado en las figuras de Mohamed Salah y Eden Hazard, dos futbolistas que se encuentran en un excelso estado de forma. El egipcio, máximo goleador de la competición con nueve tantos, se reencuentra con el equipo en el que no pudo triunfar tres años atrás, con el propósito de demostrar que se equivocaron al deshacerse de él. Por su parte, el belga se ha reconciliado con su mejor versión y vive un momento dulce de cara al gol gracias al matiz añadido por Conte a su sistema, que permite a Eden jugar con mayor libertad. A priori podríamos señalar al Liverpool como favorito, teniendo en cuenta el factor Anfield, que acostumbra a ser desequilibrante en este tipo de partidos. Sin embargo, el rendimiento de los Reds es una incógnita después de su ridícula segunda parte en Sevilla, por lo que se espera un encuentro abierto entre dos de los equipos que mejoran contragolpean de Inglaterra.

Dos recién llegados contra Mánchester

Este fin de semana, Manchester City y Manchester United tienen, sobre el papel, dos encuentros relativamente sencillos: los Sky Blues visitan al Huddersfield y los Red Devils reciben al Brighton. A pesar de ser dos recién ascendidos, Terriers y Seagulls han realizado un primer tercio de competición realmente digno y ocupan dos cómodas posiciones en mitad de la tabla, pero lo tendrán complicado para sumar en esta jornada. No obstante, cualquier relajación que se concedan los mancunianos les puede deparar un tropezón inesperado, como le sucedió a los de José Mourinho en el entrañable Kirklees Stadium hace un mes. El City, que busca su undécima victoria consecutiva en su imparable escalada hacia el trono de la Premier League, no podrá contar con John Stones hasta enero, por lo que presumiblemente Vincent Kompany volverá a ser titular. En el caso del United, el regreso imperial de Paul Pogba ha levantado los ánimos de los suyos, un tanto decepcionados tras los puntos perdidos recientemente, que le han dejado a ocho unidades de sus rivales conciudadanos.

El balón para ti, que a mí no me hace falta

Hasta la fecha, el Burnley se ha erigido como el conjunto revelación de la Premier League. Los de Sean Dyche, enganchados al séptimo puesto, son los únicos que todavía no han perdido contacto con el Big-Six, y este fin de semana se enfrentan al Arsenal, equipo que les precede en la clasificación, en un partido que se presenta como un clásico choque de estilos. Los Gunners vienen de vencer al Tottenham en la que ha sido, probablemente, su mejor actuación de la temporada, y si Alexis, Özil, Lacazette y compañía están inspirados deberían llevarse los tres puntos de Turf Moor. Pocas dudas hay de que el Arsenal serán quien lleve la iniciativa, pero eso no es algo que le resulte incómodo a los Clarets, sino todo lo contrario: el Burnley ganó en Stamford Bridge con un 38% de posesión, en Goodison Park con un 37%, y empató en Wembley con un 33% y en Anfield con un 29%. Así que no, no necesitan tener demasiado el balón para sorprender a equipos teóricamente superiores.

Cuando el Swansea fue lo que el Bournemouth es

El fútbol, contaminado por esa tendencia global en la que manda el cortoplacismo, es un deporte en el que la paciencia es una excepción. Pero, por lo general, da resultados. El Bournemouth es un club en el que impera la serenidad, y de hecho, esa ha sido unos de las claves de su éxito. Eddie Howe es uno de los técnicos más interesante del país británico, el prócer de la nueva hornada de entrenadores ingleses que poseen una idea futbolística más próxima al balompié continental. No solo llevó al Bournemouth de Ligue One a la Premier League, sino que ha logrado asentar a los sureños en la máxima categoría. Ha habido momentos de dudas y malas rachas, pero la confianza en Howe fue ciega y el de Amersham siempre ha encontrado el modo de reconducir el rumbo del equipo. El Swansea, que recibe este fin de semana a los Cherries, fue en su momento lo que estos son ahora: un proyecto con las ideas claras. Pero en los últimos años ha perdido esa solidez y sus escarceos con el descenso son cada vez más frecuentes. Si no recuperan una identidad, será complicado que logren perpetuar su estadía en la Premier League.

Moyes conoce su nuevo hogar

La memoria es efímera, y en el fútbol más: los éxitos pretéritos quedan fácilmente sepultados por la fuerza del presente. Por eso mismo, David Moyes ya no goza de una gran reputación como entrenador. Es cierto que sus últimas tres experiencias (Manchester United, Real Sociedad y Sunderland) han sido muy decepcionantes, pero no hay que olvidar que su rendimiento durante más de una década en Goodison Park fue muy positivo. El escocés y su nuevo equipo tienen algo en común: necesitan estabilidad. El primer objetivo pasa por establecer un vínculo entre el técnico y la afición de los Hammers. Así, este viernes, Moyes conocerá el Olímpico de Londres, un estadio en el que el West Ham no termina de sentirse cómodo. Por suerte para él, tras Slaven Bilic el listón está bastante bajo. Por plantilla y presupuesto, no debería tener demasiados problemas para sacar al equipo del pozo y sentar las bases para construir un proyecto destinado a estar en la mitad alta de la tabla. Ante el Leicester deberíamos ver las primeras pinceladas del futuro West Ham.

Sobre el autor

Aaron Cabado