¿Era Phil Neville el mejor candidato para ocupar el puesto vacante en la selección absoluta femenina? Es la pregunta que muchos se han planteado tras su nombramiento como seleccionador, firmando un contrato hasta 2021 y sustituyendo al polémico Mark Sampson, destituido a finales del año pasado tras dedicar unos comentarios raciales hacia un par de sus futbolistas.

Phil Neville es una figura importante del fútbol inglés. Exjugador del Manchester United, de la famosa quinta del 1992 junto a su hermano, y del Everton, se podría decir que tuvo una buena carrera como futbolista. Desde que colgó sus botas, Neville estuvo siempre interesado en convertirse en entrenador. Sin embargo, su falta de experiencia no ha pasado desapercibida.
Sus veteranía es escasa y sus cargos han sido escuetos y con poco protagonismo: en 2012 entró a formar parte del cuerpo técnico de la selección sub-21 inglesa; del año 2013 al 2014 fue segundo entrenador del United de David Moyes y Ryan Giggs, y en 2015 fichó por el Valencia como asistente junto a Nuno Espiritu Santo y, más tarde, ayudando a su hermano Gary Neville. Si a esto le sumas una entrevista fallida para convertirse en entrenador del Everton en 2014, puesto que acabó en manos de Roberto Martínez, y un par de partidos del Salford City que ha dirigido, su experiencia es más bien nula.
A pesar de tener la licencia Pro de la UEFA, la más alta de todas las existentes, se cuestionan sus capacidades como entrenador. Muchos critican el hecho de que la federación inglesa no haya contratado a un candidato que se adapte mejor a los requisitos del puesto, porque haberlos, los habrá. Al fin y al cabo, Neville nunca ha sido primer entrenador y tiene cero experiencia con el fútbol femenino. Que Phil nunca estuviera interesado en el puesto ha sido otro factor determinante de la polémica surgida ante su nombramiento. Según los medios ingleses, no se presentó a la candidatura hasta que ciertas cabezas gordas le insistieron en que lo hiciera.
Phil Neville, más conocido por su carrera en los medios como comentarista que por la de seleccionador, ha trabajado en la cadena Sky Sports con su hermano Gary y fue comentarista en la Copa del Mundo de 2014 con la BBC. Parece que la federación inglesa prefiere contratar a figuras afianzadas en la esfera más mediática del deporte que a verdaderos profesionales de éste. Una vez más, una máxima figura representante del fútbol inglés se sitúa en el ojo del huracán. ¿Es la federación machista? ¿Por qué no una mujer para ocupar el cargo? ¿Por qué los candidatos elegidos son siempre del mismo perfil?
La última mujer que ocupó el cargo de seleccionadora de las Lionesses fue Hope Powell, que llegó en 1998 y fue destituida en 2013 tras una polémica con Keith Boanas. Éste ultimo, que también se presentó al cargo de seleccionador con Powell en el 98, acusó a la seleccionadora de apartar a su mujer del equipo, y puso en cuestión sus técnicas y prácticas. Powell fue la primera mujer en conseguir la licencia Pro de la UEFA, en 2003. Tras su destitución, las cosas han ido de mal en peor para la Leonas, ya que Mark Sampson no cumplió con las expectativas e hizo comentarios racistas a dos de sus jugadoras: Eni Aluko y Drew Spence.
La llegada de Phil Neville no ha mejorado las cosas, sobre todo después de que salieran a la luz una serie de tweets que el exfutbolista publicó hace un par de años y en los que no dejaba en muy buen lugar a las mujeres. En julio de 2011 twitteó: «Relax, ya vuelvo a estar tranquilo, acabo de pegar a mi mujer!!!». En diciembre de 2012 respondió a su hermana: «Vosotras las mujeres siempre queréis igualdad hasta que llega el momento de pagar las facturas #hipócritas».
Tras el aluvión de críticas recibidas, Phil Neville ha pedido disculpas, recalcando que esas no son, en ningún momento, sus verdaderas creencias, y ha cerrado su perfil en la red social. Según el periódico The Guardian, altos cargos de la asociación inglesa conocían la existencia de dichos comentarios en redes, pero decidieron no darle más importancia de la que debían.
Roisin Wood, la portavoz de la campaña Kick It Out, cuyo objetivo es acabar con el racismo y promover la igualdad en el fútbol, no tardó en dar su opinión sobre el polémico nombramiento, así como pedir a la federación responsabilidades por los comentarios de Phil: “Kick It out se cuestiona el proceso de reclutamiento que ha resultado en el nombramiento de una persona que no tiene experiencia en el fútbol femenino. Neville ha hecho comentarios misóginos y sexistas, ¿castigará la federación a Neville por sus comentarios discriminatorios en redes sociales?”. Pues no, a sorpresa de pocos, la asociación de fútbol inglés no ha llevado a cabo ningún tipo de acción que castigue su comportamiento.
Por su parte, el Women’s Sport Trust (Consejo Deportivo de Mujeres) declaró en un comunicado la falta de cargos ocupados por mujeres en las altas esferas del deporte, sobre todo cuando son desempeñados por gente menos cualificada para ellos.
Si hay algo claro es que Phil Neville no ha empezado con buen pie su carrera como seleccionador femenino. Su falta de experiencia y sus comentarios misóginos no ayudan a la causa y van más allá: lastran la idea de progreso por la que muchos luchan en el mundo del deporte. Las hipótesis de por qué ha aceptado el trabajo se podrían explicar de una forma: puede ser una manera de ir escalando posiciones para llegar a puestos “más prestigiosos”, algo que daña la imagen e importancia del fútbol femenino. No sabemos como le irá a Neville, pero tendrá que poner mucho de su parte para empeorar la situación actual.