Guardiola y Mourinho a través de Ibrahimovic

Esta Premier League 2016-17 es la liga de los entrenadores. Y, sin duda, sus dos máximos exponentes son José Mourinho y Pep Guardiola. Ellos son seguramente los dos entrenadores más importantes de la última época futbolística, tanto por títulos logrados, innovaciones aportadas al juego y al entrenamiento, carisma personal y grado de influencia sobre sus jugadores y homólogos. Para bien o para mal, ningún jugador vuelve a ser el mismo tras trabajar con cualquiera de estos dos preparadores. Imaginemos los que han tenido la fortuna de hacerlo con ambos (no son demasiados, pero podemos preguntar a Maxwell, Cesc Fàbregas, Pedro Rodríguez…) cómo han cambiado sus carreras y su manera de entender el juego… incluso la vida en algunos casos. Pero podemos doblar la apuesta y buscar ya no un gran jugador, sino una estrella planetaria, con un talento tan gigante como su propio ego, y pensar qué sacó de sus años con ambos… Todo nos lleva al final del alfabeto: Zlatan Ibrahimovic.

Queremos repasar, ayudándonos de su magnífica (y muy recomendable) biografía «Yo soy Zlatan», los dos años que pasó el sueco con Mourinho y Guardiola, en Inter y Barcelona respectivamente. Una auténtica experiencia la vivida por el genial delantero, ya que no sólo estuvo bajo las órdenes de ambos sino que además lo hizo de manera consecutiva (2008-09 con los neroazzurri y 2009-10 con los culés), viviendo así en sólo dos temporadas dos culturas tan diferentes en lo futbolístico como son la italiana y la española, y además dos concepciones diametralmente opuestas de este deporte… y seguramente, de nuevo, dos posiciones muy dispares en cuanto a la manera en que entienden la propia vida.