Ander Iturralde

Los 50 mejores sub-21 en Inglaterra en 2017 (II)

Aquí está la segunda parte de nuestra lista anual de los 50 mejores jugadores sub-21 jugando en Inglaterra. Estos son los veinticinco futbolistas jóvenes más prometedores entre los que juegan en el país.

25. Enes Unal (Manchester City, 1997)

«Los cedidos del Chelsea», es ya un concepto en sí mismo. Pues el Manchester City va camino de lo mismo. Aspira indirectamente a ello. Aunque quizás, sólo quizás, con mejores resultados. Enes Unal llegó al Manchester City del Bursaspor con 18 años. No esperaron. Queriendo tener en él a una de sus futuras estrellas, hace un año le enviaron a la Eredivisie, una de las mejores ligas del mundo en cuanto al desarrollo de jóvenes promesas. Le encomendaron su cuidado al Twente. Y ha terminado siendo el Twente el que se ha encomendado a Unal. Un delantero enorme, de casi dos metros, pero con una técnica asombrosa, buena lectura, capaz de combinar y jugar de espaldas. Este verano, el Manchester City le ha traspasado al Villarreal. Con opción de recompra, claro.

24. Ademola Lookman (Everton, 1997)

Se veía venir que Lookman daría el salto más pronto que tarde. Despuntaba a unos niveles insostenibles para un equipo de tercera división. Irrumpió con el Charlton en segunda, bajaron, y mantenerle no era más que un regalo del cielo; de las altas esféras que pronto le reclamarían. El Everton lo acabó haciendo el pasado mes de enero. Lookman surgió en unos tiempos de zozobra, en la tormenta que todavía vive el Charlton. Fue alguien que les hizo mantener la esperanza de no descender a tercera. Aquello no fue posible, pero sí que él aumentase la brillantez de sus actuaciones al bajar una categoría. Veloz, explosivo, con gran regate y una enorme determinación. Su evolución invita a todo tipo de optimismo después de un año en que marcó un gol al Manchester City en una victoria por 4-0 en Goodison Park y se proclamó campeón del mundo sub-20.

23. Cameron Carter-Vickers (Tottenham, 1997)

Tan cierto es que cumplió en sus tres primeras titularidades de la temporada con el primer equipo del Tottenham como que no lo hizo en su cuarta y última. Tan cierto es todo esto como que se le visiona un futuro colosal. La reencarnación futbolística de Rio Ferdinand. O al menos en esa dirección. Con un físico imponente, sólido al choque y por alto al igual que ágil para defender cuando más metros tiene que cubrir por su cuenta. Evoluciona, crece mientras el Tottenham ha confeccionado una de las mejores defensas de su historia. Dispone de unas condiciones que deberían condicionar positivamente su carrera; y al Tottenham a tenerle en cuenta. El mejor central de la cantera desde Ledley King.

22. Reece Oxford (West Ham, 1998)

En agosto de 2015, Reece Oxford fue titular en el debut del West Ham en la Premier League 2015-16. Con dieciséis años. En el Emirates ante el Arsenal. Y como medio centro, que no es su posición natural. Sin embargo, Oxford fue uno de los mejores del partido en la victoria de los Hammers aquel día. Aquel partido parecía destinado a convertirse en la tarjeta de visita del siguiente gran defensa inglés. Casi dos años más tarde, Oxford no ha logrado dar el paso definitivo para integrarse en la élite. La temporada pasada no llegó a jugar ningún partido con el primer equipo de Slaven Bilic más allá de un par de rondas clasificatorias de la Europa League. La segunda mitad de temporada se fue cedido al Reading de Championship, donde solo disputó cinco partidos. El próximo curso jugará cedido en el Borussia Moenchengladbach de la Bundesliga. Una apuesta arriesgada que parece destinada a acabar como la de Adnan Januzaj en Dortmund. O sea, mal.

21. Toni Martínez (West Ham, 1997)

La mejor prueba de la irrupción fulgurante del delantero español Toni Martínez en el fútbol inglés es que el clamor entre los aficionados del West Ham para que formara parte del primer equipo fue atronador a final de temporada. El exjuvenil del Valencia causó tal impresión en la Premier League 2 (donde marcó 12 goles en 12 partidos) que acabó marchándose cedido a League One de la mano del Oxford United, una experiencia muy valiosa para su formación. Considerando las bajas de Gokhan Tore y, sobre todo, Jonathan Calleri para la próxima temporada, es posible que Bilic dé más oportunidades al joven internacional español sub-19.

20. Robert Kenedy (Chelsea, 1996)

Este zurdo brasileño de gran zancada que puede ocupar cualquier posición en su costado natural fue una de las pocas buenas noticias del Chelsea en la turbulenta temporada 2015-16. Tras llegar procedente del Fluminense, dispuso de muchas oportunidades en el primer equipo pero no fue suficiente como para que Antonio Conte confiara en él este curso. Así que en verano hizo las maletas para irse a Watford (es un decir, claro) cedido. Sin embargo, la cosa no salió bien y tuvo que regresar en Navidad al Chelsea después de ver sus oportunidades muy limitadas con Walter Mazzarri. Su más probable destino esta temporada es otro equipo de la Premier League, de nuevo cedido.

19. Ramadan Sobhi (Stoke City, 1997)

El egipcio llegó este verano al Stoke con la aureola de la nueva gran sensación del norte de África. Sin embargo, su rendimiento ha sido decepcionante. El exjugador del Ahly de su país ha disputado 17 partidos de Premier League en los que tan solo ha dado dos asistencias. Diestro que juega preferentemente por derecha, es la viva imagen del estereotipo de futbolista egipcio: talentoso, inconstante, genial. Encadena momentos de brillantez con largas fases desaparecido. Quizás Stoke-on-Trent no es el mejor rincón del mundo para alimentar un talento bruto de este tipo.


ramadan_sobhi
Ramadan Sobhi supera a Nicolás Otamendi durante el partido de liga entre Manchester City y Stoke City en el Etihad Stadium (Shaun Botterill/Getty Images).


18. Demarai Gray (Leicester City, 1996)

A mitad de la temporada pasada, cuando muchos todavía pensaban que el Leicester acabaría sufriendo de mal de altura y tropezando en la recta final, el Leicester cerró dos fichajes sorprendentes. En lugar de apostar por jugadores contrastados que le ayudaran a cruzar la meta en primera posición, los Foxes ficharon a dos jóvenes como Daniel Amartey y Demarai Gray. Sobre todo Gray, procedente del Birmingham, fue clave como jugador número doce para dar descanso a los titulares y acabó proclamándose campeón de la Premier League a sus 19 años. Esta temporada ha sido uno de los mejores del equipo y se ha ganado un lugar en el once. Este verano se ha clasificado para las semifinales de la Euro sub-21 con la selección inglesa. Su progresión va viento en popa.

17. Kasey Palmer (Chelsea, 1996)

Iba camino de liderar al Huddersfield a la Premier League. Pero él cayó por el camino; no así el equipo, que en Wembley se alzó con el ascenso a la tierra prometida. Tuvo que darle el relevo a su compañero del Chelsea, Izzy Brown, que llegó y completó el trabajo. Pero Palmer había logrado que fuera un éxito su transición de ganar la Champions League juvenil con el Chelsea marcando diferencias a hacerlo, nada más llegar, con el Huddersfield. Llegaba a un sitio en el que había un camino trazado. Un plan. Podía salir mal, pero tenían claro lo que querían y cómo querían hacerlo. Con una sensacional capacidad de regate, último pase y una excelente lectura de juego sólo pudo llegar a cuatro goles y tres asistencias. Apenas pudo jugar tras navidades, pero la transición estaba hecha. Palmer está preparado para dar el salto a la Premier League.

16. Ryan Sessegnon (Fulham, 2000)

Estamos en presencia, sin duda, de la gran irrupción de la temporada en Championship. Con 16 años, Ryan Sessegnon forzó su entrada en el once de Slavisa Jokanovic en el Fulham a base de desparpajo, talento y un inusitado ojo para el gol en un supuesto lateral izquierdo. El técnico le incorporó al primer equipo en verano para que entrenara con los mayores pero poco podía imaginar que acabaría jugando 25 partidos de liga, marcando cinco goles y dando tres asistencias. A su edad, todavía hay mucho tiempo para que las cosas se tuerzan pero Sessegnon guarda similitudes con el joven Gareth Bale. Su nombre ha sonado ya para varios equipos de Premier League, incluyendo el Liverpool.


ryan_sessegnon
Ryan Sessegnon durante el partido de Copa contra el Cardiff City (Stu Forster/Getty Images).


15. Sergi Canós (Brentford, 1997)

Parecía que esta iba a ser su temporada. Era uno de los grandes atractivos de la segunda división; era el flamante fichaje del Norwich. Todo el potencial del mundo, nutrido en las prestigiosas academias del Barcelona y del Liverpool. Se le veían cualidades con las que muy pocos pueden siquiera soñar. Una vez le dejaron correr, el resultado no pudo ser mejor. Cedido en el Brentford, fue un torbellino que dejó asombrado a todo aquel que le prestó atención. Había dado el salto y sólo pedía dar otro. El Norwich le fichó pero no gozó de ninguna oportunidad. Lejos de truncarse todo, no perdió el tiempo y en cuanto pudo (enero) volvió al Brentford, donde ha vuelto a ser incontenible, con su despampanante habilidad con el balón, velocidad y visión de juego. A su edad, ya no puede perder más el tiempo: la Premier League le llama.

14. Ben Chilwell (Leicester City, 1996)

Ben Chilwell, uno de los más prometedores futbolistas de la cantera del Leicester, poco podía imaginar hace dos años que un descarte del Schalke 04 iba a llegar al equipo y convertirse, probablemente, en el mejor lateral izquierdo de la Premier League en su primera temporada en ella. Christian Fuchs conserva todavía su titularidad pero Chilwell acecha. En la segunda parte del partido vuelta contra el Atlético de Madrid firmó una completa exhibición. Demostró, para aquellos que dudaron de su capacidad para dar el salto al gran escenario, que tiene un potencial desorbitado. Rápido y técnico, cuando aprenda a tomar las decisiones correctas nada le separará del estrellato. Quién le iba a decir a Ben Chilwell que el campeón de la Premier League en el que jugaría sería el Leicester y no el Liverpool o el Arsenal.

13. Izzy Brown (Chelsea, 1997)

Para Izzy Brown todo cambíó como si no hubiese un mañana. Aunque precisamente ese mañana ahora es mucho vibrante e intenso. Tras maravillar en las categorías inferiores del Chelsea fue cedido al Vitesse, ese extraño universo al que van a parar distintas promesas del club. A Brown le frenó en cierta medida su ímpetu. Volvió y dio la impresión de que el club no sabía qué hacer con él. Quizás no fue la mejor pero le encontraron salida. Le enviaron a un club en caída libre, el Rotherham. Fue probablemente el mejor del equipo… pero qué equipo, último, encadenando derrotas semana tras otra. Pero entonces le llamó el Huddersfield. Y todo ha cambiado. Seis meses, sus fulgurantes conducciones, su último pase, su velocidad y desparpajo… y finalmente un ascenso. Todo ha cambiado y él estará en la Premier League.

12. Patrick Roberts (Manchester City, 1997)

Así como Sobhi fue alguna vez considerado como «el Messi egipcio», algunos quisieron ver en Roberts al futuro «Messi inglés». Sus cualidades y sus destellos enviaron, vaga o intensamente, a algunos a pensar en esa dirección. Nadie suele contar con el Fulham, pero su generación dorada, la cual lideraba Roberts, dejó al equipo a un paso de la gloria en la FA Cup juvenil ante el Chelsea. Fue el Manchester City quien no tardó en atarle. Fue cedido a un Celtic de Glasgow donde ha dejado magníficas actuaciones y muy buenos números (9 goles y 14 asistencias) a pesar de no ser fijo en el once titular de Brendan Rodgers. Se acaba su cesión un año y medio después y ser importante en el Manchester City sigue tenienedo tintes utópicos para él, pero su progresión tampoco lo necesita; lo que necesita es no parar. Seguro que más de un equipo de la Premier League deseará que lo haga en su seno.


patrick_roberts
Patrick Roberts celebra su gol contra el Aberdeen en Celtic Park (Ian MacNicol/Getty Images).


11. Tammy Abraham (Chelsea, 1997)

Contando solamente esta última temporada, ningún canterano cedido del Chelsea lo ha hecho tan bien como él. Dirigió su rumbo al Bristol City. Por momentos fue un tornado contra rivales de su misma edad. La pregunta, la de siempre, era si sería capaz de replicar ese mismo dominio contra gente más física y experimentada. Desplegaron en Bristol un arranque intachable, rindiendo Abraham desde el primer instante. Pero el Bristol acabó en la lucha por no descender. Abraham jamás se dejó intimidar y a él deben en buena medida su salvación, con sus 23 goles y 3 asistencias en 40 encuentros. Ha demostrado una gran madurez, una indudable capacidad aérea y de combinar con el balón, además de una habilidad desmesurada para estar en el sitio idóneo en el momento idóneo. Las miras, propias y ajenas, le sitúan en la Premier League esta temporada.

10. Harry Winks (Tottenham, 1996)

Hasta la llegada de Mauricio Pochettino, la estrategia de formación del Tottenham se basaba en las cesiones. Futbolistas como Andros Townsend se han recorrido la geografía inglesa jugando en equipos de distinto pelaje y condición. Pero Pochettino tiene otra idea. El argentino considera que la mejor forma de formar a un futbolista es que entrene y juegue con los mayores. El técnico ha descubierto esta temporada a su última perla de la cantera de los Spurs en Harry Winks. Titularidades no han abundado, es cierto, pero no hay que perder de vista que Winks estaba jugando en un contendiente a ganar la Premier League. Con su chispa y frescura ha sido capaz sostenidamente de insuflar un nuevo aire a los partidos o incluso de mostrar una inusitada disciplina táctica para estabilizar el objetivo. Dispone de un exquisito toque balón, con visión de juego, un nivel de precisión desorbitado y un gran carácter para brillar ante tales escenarios.

9. Kelechi Iheanacho (Manchester City, 1996)

La temporada pasada supuso la irrupción en el Manchester City de Kelechi Iheanacho. Parecía destinado a ser el tercer delantero tras Sergio Agüero y Wilfred Bony pero acabó condenando al segundo al ostracismo y amenazando la titularidad del primero a base de goles. En esta temporada 2015-16, Iheanacho marcó 8 goles en Premier League, nada menos que uno cada 94 minutos, el mejor ratio de la competición. Este curso, a pesar de la falta de oportunidades con Pep Guardiola, ha sumado cuatro goles y tres asistencias a su cuenta. Varios clubes de Premier League están batallando por su fichaje este verano, con el West Ham a la cabeza.

8. Tom Davies (Everton, 1998)

El jugador del Everton se ha convertido, con permiso de Gabriel Jesus y Leroy Sané, en la irrupción de la temporada en la Premier League. Con su inconfundible melena rubia al viento y sus calcetines a media asta, Davies se ha erigido en un fijo en el once de Ronald Koeman. Sus dos goles y tres asistencias en 24 partidos de Premier League son solo la punta del iceberg. Con su incansable despliegue físico, Davies se multiplica para tapar agujeros en defensa y pisar el área rival. Aficionado del club desde la infancia y familiar de exjugador, Koeman tiene en Davies a un jugador sobre el que cimentar todo su equipo.


everton_v_leicester_city_-_premier_league
Tom Davies celebra su gol contra el Leicester City en Goodison Park (Michael Regan/Getty Images).


7. Alex Iwobi (Arsenal, 1997)

El sobrino del legendario Jay-Jay Okocha, quizás el mejor jugador africano de la historia, ha protagonizado su temporada de confirmación en la élite. Junto a dos estrellas mundiales como Mesut Özil y Alexis Sánchez, ha conformado la línea de media puntas del Arsenal. En total, Iwobi ha disputado 26 partidos de liga, en los que ha marcado tres goles y dado cuatro asistencias. Su eléctrico regate, su velocidad y su despliegue en la presión le auguran un brillante futuro en el Arsenal por delante de otras promesas del club a las que ha ido dejando en el camino.

6. Andreas Christensen (Chelsea, 1996)

Quizás lo mejor para Christensen no ha sido lo que ha pasado. Quizás lo mejor para él hubiese sido que el Chelsea se mantuviese hundido; que no hubiese llegado Antonio Conte o que éste jamás hubiese encontrado la llave al nuevo Chelsea que supuso el cambio al identificable sistema de tres centrales. Aunque, en cambio, quizás esa tercera plaza pueda ser clave para el hipotético éxito de Christensen. Su confianza, a nivel individual, es ideal para afrontar el reto de su carrera. Ha sido uno de los pilares en sus dos años como cedido en el Borussia Mönchengladbach, hasta el punto de que club y jugador deseaban mantener su relación a largo plazo, aunque el Chelsea se ha negado. Es cierto que en este último curso el club alemán y Christensen se han caído como se cayó el Chelsea el año anterior pero el defensa ha seguido brillando, con su fluida salida de balón, agilidad y capacidad para ir al cruce o anticipar.

5. Leroy Sané (Manchester City, 1996)

Entre todos los fichajes millonarios del Manchester City del verano pasado, Sané pasó casi desaparecibido. Los focos cegadores que se posaron sobre Ilkay Gundogan, John Stones o incluso Nolito o Gabriel Jesus provocaron que pocos repararan en este alemán de pelo revoltoso. Su arranque tampoco contribuyó a apartarle de las sombras pero a la que halló su lugar en el equipo se convirtió en una de las sensaciones de la liga. Titular indiscutible en la segunda mitad de temporada, ha acabado marcando cinco goles y dando otras cinco asistencias en liga. Junto con Gabriel Jesus, Raheem Sterling y Kevin De Bruyne, parece uno de los pilares ofensivos del City durante el próximo lustro.

4. Wilfred Ndidi (Leicester City, 1996)

Un buen día de enero apareció en Leicester un chico llamado Wilfred Ndidi. El vacío existencial que sufrió el Leicester obedecía a la marcha de N’Golo Kanté. Mantuvieron a todos menos a su “Diablo de Tasmania” particular, presente allá donde estuviese el balón, listo para recuperlarlo si estaba en posesión del rival. Tras probar (y fracasar) con Papy Mendy, Daniel Amartey o Andy King, el Leicester acabó fijándose en Ndidi y parece que él sí es “el nuevo N’Golo Kanté”. Su rendimiento ha sido superlativo. Si bien pagaron al Genk un precio (casi 15 millones de libras) de estrella emergente, lo que ha hecho Ndidi con tan sólo 20 años es algo asombroso. No está aún a ese nivel de Kanté, pero su constante presencia, intensidad, capacidad de robo y colocación, poderío aéreo y gran ida y vuelta han reavivado al Leicester en la segunda mitad de temporada. Su futuro es más que deslumbrante.

3. Marcus Rashford (Manchester United, 1997)

Ese jugador del que muchos no pudieron evitar dudar al llegar el eclipse llamado Zlatan Ibrahimovic ha vuelto a irrumpir. Su tramo final de temporada ha sido para enmarcar. Rashford apareció un buen día que el United no tenía con quién jugar en la Europa League. Louis van Gaal le dio una oportunidad que pocos jugadores han exprimido como Rashford. Pero con la llegada de José Mourinho aterrizó Zlatan. Y durante buena parte de la temporada, el sueco mantuvo a Rashford confinado en la banda izquierdo, demasiado alejado de la portería para marcar diferencias. Pero la lesión de Zlatan acabó por abrirle la puerta a la titularidad en su posición preferida, la punta de ataque. Aunque la temporada de Zlatan ha sido también para enmarcar, su lesión le terminó costando una renovación. Lo cual deja a Rashford como el único delantero del Manchester United ahora mismo. Quizás esa sea la única forma de que siga jugando como delantero centro.

2. Gabriel Jesus (Manchester City, 1997)

Hay jugadores que requieren un periodo de adaptación a una nueva liga, una nueva cultura, un nuevo idioma. Gabriel Jesus no es de esos. El tradicional desparpajo brasileño le ha ayudado a asumir un reto mayúsculo como este con naturalidad. En su debut vio cómo le anulaban un gol en el descuento que le habría valido al City la victoria ante el Tottenham. Pero el exdelantero del Palmeiras no estaba disputado a permitir que nadie detuviera su fiesta. Ha acabado marcando siete goles y dando cuatro asistencias en los diez partidos de liga que ha podido disputar. Una inoportuna lesión no le ha impedido dejar a Sergio Agüero, toda una leyenda del club, en el banquillo en repetidas ocasiones. Es el delantero centro titular de un equipo destinado a marcar una época en el fútbol inglés.

1. Dele Alli (Tottenham, 1996)

El mejor sub-21 en Inglaterra. Y quizás el mejor jugador inglés del presente. Algo especialmente asombroso considerando que no era un futbolista sobre el que existiera unanimidad respecto a su proyección futura. No por falta de calidad, sino por irrumpir en un equipo de tercera división como el MK Dons. Él, a lo suyo, cautivó semana tras semana hasta que el Tottenham acabó fichándole por cinco millones de libras, una cifra que se antoja irrisoria a día de hoy. Mauricio Pochettino confió ciegamente en él. Sabía que Dele tenía algo especial. Y cuando nos quisimos dar cuenta, Dele Alli era la nueva estrella de los Spurs. Tuvo un primer año espectacular y un segundo en el que se ha superado, en el que no dado ni la más mínima tregua. Ha seguido madurando, su juego es cada vez más completo, con sus constantes destellos, su liderazgo, su chispa para activar al equipo, su simple calidad para ser el mejor en su posición de la liga esta temporada. Y todo entre caño y caño con una sonrisa en la boca.


fbl-eng-pr-tottenham-watford_justin_tallis
Dele Alli celebra su gol contra el Watford en White Hart Lane (Dan Mullan/Getty Images).

Sobre el autor

Ander Iturralde