1. La decisión más importante de Klopp
Más allá del estado de forma de Mohamed Salah, el principal quebradero de cabeza para Jürgen Klopp es sustituir al sancionado Jordan Henderson. Su reemplazo natural, Emre Can, lleva semanas lesionado, lo cual obligará al entrenador alemán a improvisar una solución. De su decisión dependerá en buena medida el desenlace del choque. En el 4-3-3 de Klopp, el rol del pivote es fundamental: es el encargado de proteger a los centrales y, sobre todo, tiene un rol clave en la fase ofensiva de su equipo, incrustándose entre centrales para hacer una salida lavolpiana o cayendo a la posición del lateral derecho. Ante el Everton, Klopp probó con Giorginio Wijnaldum en esa posición. El holandés, que llegó a Inglaterra de la mano del Newcastle como extremo, se ha convertido con éxito en un interior, normalmente izquierdo. Pero las exigencias de la posición de pivote no son las mismas que las del interior. Si sustituye a Henderson, deberá mostrar una disciplina defensiva y una madurez sobresalientes en un escenario adverso como el Etihad, con la presión de unos cuartos de final de Champions League y, sobre todo, contra un equipo que vive de presionar la salida de balón del rival y recuperar el balón cerca de la portería contraria. La otra opción sería colocar a James Milner, un futbolista multiusos con más experiencia en estas lides y un abanico de recursos suficientemente amplio para ofrecer un rendimiento correcto en media docena de posiciones. A ellos se sumará en el medio Alex Oxlade-Chamberlain, notable en las victorias en liga (4-3) y Champions (3-0) ante el Manchester City. Milner, Wijnaldum y Oxlade-Chamberlain afrontan uno de los partidos más exigentes de sus carreras.
2. El lateral izquierdo de Guardiola
Tras la debacle de la ida, la prensa criticó duramente las decisiones de Pep Guardiola, comenzando por la suplencia de Raheem Sterling y acabando por la titularidad de Aymeric Laporte en el lateral izquierdo. El experimento de colocar al central zurdo en el lateral resultó un desastre. El propósito del entrenador catalán era frenar al mejor jugador de la temporada en el fútbol inglés, Mohamed Salah, colocándole delante un especialista defensivo. El egipcio, sin embargo, marcó el primer gol, generó el espacio suficiente como para que Oxlade-Chamberlain marcara el segundo y asistió a Sadio Mané en el tercero. Le bastaron 52 minutos sobre el césped para ser elegido mejor jugador del partido. Ante el Manchester United el sábado, Guardiola dejó fuera a Laporte y devolvió el lateral izquierdo a Fabian Delph, un centrocampista reconvertido en lateral por culpa de la grave lesión de Benjamin Mendy a principio de temporada. Guardiola deberá decidir si vuelve a darle la confianza a Laporte u opta por Delph. Si elige al primero, significará que su prioridad es frenar a Salah. Si se decide por el segundo, implicará que Guardiola da prioridad a la salida de balón y al control del partido. Delph suele integrarse en el centro del campo para ceder la banda a Leroy Sané, pegado a la línea de cal. Eso podría dar superioridad al City en la medular pero ceder un espacio providencial a Salah.
3. ¿Dos delanteros o uno?
Ante el Manchester United, Guardiola dejó a sus dos delanteros centro, Gabriel Jesus y Sergio Agüero, en el banquillo y dio la titularidad en punta a Sterling. Jesus, desaparecido en la ida, afronta un difícil combate para mantener la titularidad en la vuelta ante el regreso de Agüero. El argentino ya jugó un cuarto de hora ante el Manchester United y, aunque todavía está lejos de su mejor forma, sus 21 goles en liga avalan su titularidad. Con Agüero fuera del once, el City ha perdido contra Basilea, Liverpool y Manchester City en sus últimos cinco partidos. Jesus, tan prometedor el curso pasado, se ha estancado en este, mermado una vez más por las lesiones. Una posibilidad remota es que Guardiola junte a Jesus y a Agüero. El catalán lo ha hecho en alguna ocasión pero con Jesus cayendo a la banda, lo cual repercute negativamente sobre las prestaciones de Leroy Sané. Además, para dar entrada a dos delanteros, Guardiola debería renunciar a un defensa en un 3-5-2 o a un centrocampista en un 4-4-2. Ninguna de las dos opciones parece especialmente adaptada para enfrentarse al Liverpool. Salah podría aprovechar la estrechez de la defensa de tres en el primer caso y el Liverpool tendría superioridad en la medular en el segundo.
4. Pendientes de Salah
En la rueda de prensa previa al partido, Jürgen Klopp no quiso dar pistas sobre la disponibilidad de Andy Robertson, Alberto Moreno y Mohamed Salah pero todo indica a que estarán a disposición del alemán. La ausencia del egipcio pondría de manifiesto la principal carencia del Liverpool esta temporada: la falta de banquillo. Ante el Everton, Klopp tuvo que solventar las ausencias por lesión de Emre Can, Adam Lallana, Joe Gomez, Alberto Moreno (se lesionó en el calentamiento), Andy Robertson, Joel Matip y Mohamed Salah, y decidió dar descanso a Roberto Firmino, Alex Oxlade-Chamberlain y Trent Alexander-Arnold. Y el Liverpool que vimos en Goodison Park fue más inofensivo que un Teletubbie. Danny Ings y Dominic Solanke acompañaron a Sadio Mané en ataque pero demostraron que todavía no están preparados para suplir a los titulares y quizás no lo estén nunca. Si Salah no se recupera a tiempo, Klopp debería dar entrada a Alberto Moreno como extremo o bien a Danny Ings o Dominic Solanke. En cualquiera de los dos casos, el Manchester City estaría un poquito más cerca de la remontada.