¿Dónde está José? pic.twitter.com/c37HbaAPAM
— La media inglesa (@LaMediaInglesa) octubre 24, 2015
3. El caos engulle a Sherwood
Desde que en agosto de 2010 Martin O’Neill abandonó intempestivamente Villa Park, el caos se adueñó del club. Al norirlandés le han sucedido Gérard Houllier, Alex McLeish, Paul Lambert y Tim Sherwood. A excepción de Lambert, que logró aguantar casi tres años, ninguno cumplió un año en el cargo. El nombramiento de Sherwood, un técnico excéntrico con una solo experiencia al máximo nivel en los Spurs, fue posiblemente un error. Pero ni Pep Guardiola habría logrado enderezar el rumbo de un club que lleva meses en venta, con un dueño estadounidense que no tiene ni los conocimientos ni el interés ni la ambición para sacarlo adelante y un porvenir de sufrimiento.
Claudio Ranieri se ofreció a pagar las pizzas para sus jugadores si lograban mantener su portería a cero. Y finalmente, tras diez jornadas, lo lograron. Un hito que permitió a los Foxes llevarse los tres puntos ante el Crystal Palace y seguir encaramados a la zona alta de la clasificación. El equipo de Ranieri ha perdido un solo partido de liga esta temporada (2-5 ante el Arsenal) y de la mano de Riyad Mahrez y Jamie Vardy (asistente y goleador respectivamente en el gol ante el Palace) se ha convertido en la revelación de la temporada con permiso del West Ham. No eran pocos los que estaban convencidos de que Ranieri fracasaría estrepitosamente en su regreso a la Premier League. Pero no solo no lo ha hecho, sino que está disfrutando esta nueva etapa como un niño con zapatos nuevos.
La debacle del Chelsea (15º) ha abierto la lucha por un puesto de Champions League. Presumiblemente, los dos equipos de Manchester y Arsenal competirán por el título de liga, así que la pelea por el billete restante a la máxima competición europea promete ser apasionante. Además del Chelsea, que tarde o temprano comenzará a escalar posiciones, los equipos mejor equipados para el trayecto parecen ser Tottenham y Liverpool. Los Spurs llevan invictos desde su derrota en la primera jornada y el Liverpool de Jürgen Klopp no tardará en ponerse en marcha. Pero algunos “outsiders” prometen dar guerra, con West Ham, Leicester y Crystal Palace a la cabeza, además de Southampton y Everton. Vamos, que la cosa promete.
Harry Kane se convirtió en la revelación de la temporada pasada gracias a sus 21 goles en liga. Pero su rendimiento en el presente curso está lejos de ser comparable. Hasta su hat-trick ante el Bournemouth, Kane había marcado solo un gol en sus trece encuentros con los Spurs esta temporada. El triplete en la costa sur puede lanzar la temporada de Kane. Mauricio Pochettino y los Spurs se lo agradecerán, sobre todo considerando la lesión de Son Heung-min, y las dificultades de Clinton N’Jie y Christian Eriksen para ver puerta.
El Sunderland conquistó su sexto derbi consecutivo, un nuevo récord. Los Black Cats de Sam Allardyce ganaron su primer partido de liga tras derrotar por 3-0 al eterno rival. A pesar de la victoria, el futuro del equipo de Big Sam sigue estando en el aire. El domingo, el azar se alió con el técnico inglés. Su equipo tuvo menos el balón, lo gestionó peor y se benefició de una dudosa decisión arbitral que rompió el partido con la expulsión de Fabricio Coloccini. Además, Lee Cattermole tuvo suerte de acabar el partido. Lo cierto es que la plantilla del Sunderland se antoja algo escasa para lograr la salvación. Younes Kaboul y John O’Shea son más lentos que una película china, Lee Cattermole es una bomba a punto de detonar, Adam Johnson tiene un juicio pendiente por acostarse con una menor y Steven Fletcher no es precisamente una garantía de gol.
La temporada pasada, Alexis Sánchez sostuvo sobre sus hombros al Arsenal con escasa ayuda de sus compañeros. Pero Mesut Özil ya está aquí. El alemán, considerado normalmente como un fichaje fallido, es el máximo asistente en la Premier League, con siete asistencias de gol. A ellos hay que sumar al consolidado Francis Coquelin, un muro infranqueable en el medio centro, y Santi Cazorla, posiblemente en el mejor momento de su carrera en Inglaterra. Si Arsène Wenger logra alternar a Theo Walcott y Olivier Giroud para que produzcan goles, el Arsenal podría competir por la liga por primera vez desde que se fue Thierry Henry.