Brighton & Hove Albion 5-Fulham 0
Con las buenas sensaciones dejadas en sus últimos partidos, el Fulham se presentó en el Amex Stadium con mucha confianza. La cual reflejó durante la primera parte. Ante un Brighton algo dormido, los visitantes movieron muy bien la pelota. Estaban siendo mejores pero no lo materializaron. Y lo pagaron caro cuando Tomer Hemed no falló desde los once metros un penalti quizás discutible. Una buena puesta en escena del Fulham sobre la que caía una jarra de agua fría que llevaría a que, tras un preciso centro de Anthony Knockaert, Hemed doblara la ventaja al saltar e imponer su dominio del juego aéreo. El Fulham no quiso tirar la toalla, pero sus lagunas a la hora de defender les volvieron a pasar factura. En otra jugada a balón parado, en esta ocasión un córner, el checo Jiri Skalak (que suma 4 asistencias en sus últimos 3 partidos) encontró a un Bruno Saltor desmarcado para el tercero. Con Ross McCormack, su gran líder en cuanto a calidad y al aspecto anímico, ciertamente apagado, el Fulham prácticamente sólo pudo inquietar a su exportero David Stockdale por medio de un zapatazo del danés Lasse Vigen Christensen. Parecía avocado el encuentro a un tranquilo final hasta que Hemed y Knockaert terminaron de aniquilar al Fulham en un marcador que podría haber pasado de la media docena de no ser por los postreros fallos de LuaLua y Sidwell.
Bolton Wanderers 1-Middlesbrough 2
El semejante golpe sobre la mesa de las “gaviotas” enviaba la presión hacia sus dos rivales. La lógica invitaba a pensar que dicha presión no afectaría al Middlesbrough, pues tenía que jugar en campo del ya descendido Bolton. Si bien el Boro dispuso de la iniciativa, se encontraron con un Bolton resolutivo atrás que incluía alguna variación táctica como el español Derik Osede, normalmente en defensa, situado de medio centro. Stewart Downing pudo abrir la lata al poco de empezar con un disparo que colisionó con el larguero. Por su parte, el Bolton libre de cualquier presión inquietó a la zaga visitante. Y dieron con la recompensa en la segunda mitad. Una falta de comunicación entre Ben Gibson y Adam Clayton, hizo caer el balón en los pies del ilustre Emile Heskey que le dejó el gol en bandeja al joven Josh Vela. De repente el Boro estaba en su posición más comprometida: por detrás en el marcador. Siendo un equipo al que le cuesta remontar, siguieron jugando sin volcarse sobre la portería contraria, yendo la tensión en aumento. Hasta que Jordan Rhodes, con ese instinto goleador tan desarrollado que tiene, cazó un balón suelto para empatar. Las salidas de Gastón y Nugent, más Downing pasando a la banda derecha, mejoraron al Boro y Rhodes volvió a hacer aquello para lo que se le fichó. Marcó de nuevo diferencias al cazar otro esférico y convertirlo en la remontada. Una remontada llena de épica y que engrandece el espíritu de lucha de un equipo más unido que nunca.
Birmingham City 1-Burnley 2
Las actuaciones dispares que ha efectuado el Birmingham City en las últimas semanas hacían dudar sobre si saldría a relucir su mejor versión ante un Burnley sobre el que caía toda la presión tras las victorias ya relatadas. Y los Blues exprimieron este hecho al máximo. Se mostraron mejores desde el pitido inicial. Moviendo la pelota con mucha fluidez, criterio y calidad y yendo con gran determinación a los balones divididos, estaban superando claramente a su oponente. Sin embargo, el Burnley es un conjunto que cuenta con una enorme capacidad de resistencia y lograron denegar las ocasiones de los locales para que en un contraataque George Boyd, libre de marca, la mandase para dentro. Esto no frenó al Birmingham que siguió pico y pala hasta encontrar al comienzo del segundo periodo la igualada, obra de un muy atento Jacques Maghoma al disparo rebotado de Jon Toral. La tónica general, pese a algunas intentonas del Burnley, prosiguió por la misma línea. Los locales continuaron generando oportunidades para llevarse el triunfo, incluso un remate al travesaño de Jonathan Grounds. Pero el Burnley aguantó y aguantó hasta en otra aparición en campo rival surgió Andre Gray, un poco a la Rhodes, para capturar el gol de una victoria más que crucial. A pesar de ello los aficionados del Birmingham también celebraron y es que antes de acabar su partido se confirmó el descenso del Aston Villa.
Resto de la jornada
Buscando retener el cuarto puesto más que otra cosa, el Hull City volvió a no convencer del todo, pues tras adelantarse, el Wolverhampton igualó. Sin embargo, Robert Snodgrass hizo acto de presencia para marcar un golazo y darle la victoria (2-1) a los “tigres” sobre los “lobos”. Habiendo viajado a Barcelona esta última semana a modo preparación para el sprint final de temporada, el Derby County generó dudas pero acabó sumando su tercera victoria consecutiva a costa del peleón (aunque al borde del precipicio) Charlton gracias al solitario gol de Johnny Russell. En el duelo que medía a los dos últimos clubes de Jordan Rhodes, el Blackburn no fue capaz de mejorar su desastrosa racha tras ser superado de manera solvente (0-2) por el Huddersfield. En camino ambos de sellar ambos sus respectivas permanencias pese a sus opuestas rachas, un Rotherham lanzado no logró castigar al Nottingham Forest, hundido, lo suficiente como para alzarse con otro triunfo e imperó el reparto de puntos (0-0). No teniendo ninguno de los dos la presión ni del ascenso y del descenso, Leeds y Reading desplegaron un buen espectáculo, adelantándose los segundos, remontando los locales, que fueron igualados, y que al final ganaron por 3-2 gracias al gol final de Chris Wood. Tanto Cardiff City (que se descuelga del play-off) como QPR tuvieron ocasiones para romper el candado en su partido, pero los guardametas terminaron decretando empate (0-0). En su visita al Brentford, el Bristol City golpeó primero con un Lee Tomlin que cosechó su 5º gol desde su llegada en enero. Sin embargo, 595 días después de lesionarse de gravedad la rodilla, el delantero Scott Hogan (en el que era su cuarto partido desde su reaparición) marcó el empate (1-1); su primer gol con el Brentford. Teniendo claro su posición de inferioridad, el Ipswich causó dificultades para marcar al Sheffield Wednesday. Los “búhos” finalmente dieron con el gol, pero el joven de 16 años y 350 días Andre Dozzell marcó en el día de su debut (como ya hiciera su padre, Jason, con la misma camiseta hace 32 años con 16 y 57 días) para rescatar el empate a uno. Hace casi un año el MK Dons le quitó sobre la bocina el ascenso directo al Preston y ahora reza por salvarse mientras que los Lilywhites están cómodamente en mitad de tabla. Camino del empate, el delantero Alex Revell se convirtió en el héroe de los Dons. Pero no por marcar un gol sino por pararlo: tras la expulsión del portero Cody Cropper se enfundó los guantes y paró un penalti para alzarse con un empate (1-1) que quizás les dé un impulso final.