Es cierto que el Arsenal todavía tiene opciones de lograr el titulo de la Premier League pero ganar este partido es de una importancia crucial. Mientras que el Reading, con todavía una mínima opción de descender a tercera, buscará obrar una de las mayores gestas de su historia para salvar una temporada que ha sido más que tormentosa.
88 años han sido los que han pasado desde que el Reading disputó por última vez una semifinal de FA Cup. En aquella ocasión, los Royals perdieron por 3-0 ante el Cardiff City (equipo al que precisamente han eliminado esta temporada) tras ganar en anteriores rondas a equipos de la talla de Portsmouth y Manchester United.
Los Royals descendieron de la Premier League hace ya dos años. La pasada temporada se quedaron a las puertas de disputar el play-off de ascenso a la élite en la última jornada. Tras ello se inició un proceso de venta del club por parte del oligarca ruso Anton Zingarevich, quien desistía así en su objetivo de asentar al Reading en la Premier League. Por la parte adquiriente, un consorcio tailandés.

La venta finalmente se completó y en la recta final de mercado de traspasos llegaron los atacantes Simon Cox, Jamie Mackie y Glenn Murray. Estos dos últimos cedidos. Que desde luego incrementaban el nivel de la delantera pero no enmendaban las carencias de la débil y escasa defensa de los Royals. A la que sólo se había unido el ya mencionado Anton Ferdinand, tras un periplo por Turquía y Tailandia. El prometedor medio centro, ex del Manchester United, Oliver Norwood, completaba la lista de fichajes del equipo.
A pesar del paso de las jornadas (y de que Glenn Murray se había puesto a marcar goles desde el primer momento) el Reading no terminaba de despegar. Algo previsible pero que al mismo tiempo no era suficiente para los nuevos mandatarios. Tras una racha irregular en la que predominaban las derrotas, el Reading viajó a St. Andrews el 15 de diciembre para enfrentarse al Birmingham City. Los Blues, bajo el mandato de su nuevo entrenador Gary Rowett, destrozaron al Reading con un Demarai Gray estelar, el cual marcó un hat-trick que contribuyó de gran manera al 6-1. Dolorosísima derrota y despido fulminante de Nigel Adkins como técnico del Reading.
Banquillo vacante y a la búsqueda de un nuevo entrenador. Ahí apareció el ex asistente de José Mourinho y ex entrenador del West Brom, Steve Clarke. Con éste la dinámica y los resultados mejoraron a lo largo de las fechas navideñas y del mes de enero. Sin embargo, el equipo volvió a perder fuelle y decayó de nuevo. Para dar un impulso en el tramo final de temporada llegó el experimentado goleador nigeriano Yakubu Aiyegbeni, quien ocupaba el hueco dejado por Murray.
Los resultados continuaron siendo bastante pobres pero continuaban avanzando rondas en FA Cup. Después de haber eliminado a Huddersfield Town y Cardiff City se trasladaban a Derby para medirse a los Rams. Parecía que ahí podía llegar el fin del trayecto en la competición de Copa para el Reading ya que el Derby era uno de los equipo potentes de la categoría. Pero no, el Reading venció por 1-2, gol de Yakubu incluido, y se metía en cuartos de final.
Ahí aguardaba el Bradford City, una de las sensaciones de esta edición de la FA Cup. Encuentro duro y aguerrido en Valley Parade que finalizó 0-0 y que obligaba a la disputa de un duelo de replay en el Madejski. En su propio feudo, el Reading demostró su mayor nivel futbolístico y venció con autoridad a los Bantams por un marcador final de 3-0. Esto, si no fuera porque encadenan 6 partidos sin ganar en liga, sería un gran resultado para enfrentarse al Arsenal.

Y es que el Arsenal está en una situación muy parecida a la del año pasado. Eliminado de la Champions League en los octavos de final, en la parte alta de la Premier League y con la temporada (o el nivel de éxito que se consiga en ella) en juego en una semifinal de FA Cup contra un equipo de la segunda categoría del fútbol inglés.
El Arsenal llega, a diferencia del Reading, con una dinámica en liga muy positiva. Tras una primera mitad de temporada algo dubitativa, el Arsenal se ha erigido como el mejor equipo de la Premier League desde el comienzo del año 2015. Lo que le ha catapultado hasta la segunda plaza en la tabla clasificatoria.
Las bajas por parte del Reading serán principalmente las de los cedidos Nathan Ake (Chelsea) y Kwesi Appiah (Crystal Palace). Mientras que los otros dos cedidos, Nathaniel Chalobah y Jamie Mackie sí que estarán disponibles para Steve Clarke. También el delantero ruso Pavel Pogrebnyak se espera que sea de la partida tras haber tenido unas molestias físicas. Mientras que el Arsenal no podrá contar con Mikel Arteta ni Alex Oxlade-Chamberlain. En lo que respecta a Mathieu Debuchy y a Jack Wilshere, cabe la posibilidad de que entren en la convocatoria tras recuperarse de sus respectivas lesiones. Por su parte, se espera que Wojciech Szczesny ocupe el puesto de guardameta titular.
Una semifinal que, pese a la desigualdad que hay sobre el papel entre ambos equipos, se presenta apasionante. El Reading busca meterse en la primera final de FA Cup de su historia para tratar de convertir una temporada para el olvido en una de las más exitosas de su existencia. El Arsenal, que ya sufrió ante otro equipo de Championship como el Wigan hace un año, tratará de vencer al conjunto Royal para acceder a la final y ahí alzarse por primera vez en su historia como campeón de manera consecutiva de la FA Cup.