Steven Fletcher, con sus dos goles en su debut con el Sunderland, evitó una más que previsible victoria del Swansea, que le habría colocado líder de la Premier League diez años después de ser colista de la League Two.

 

Fletcher comenzó a justificar los 12 millones de libras que pagó Martin O’Neill a los Wolves este verano con dos goles en la recta final de la primera parte. Aunque los Swans se repusieron del golpe por dos veces, el equipo se partió por la defensa, primero con la grave lesión del lateral izquierdo Neil Taylor, que se fracturó un tobillo. Y luego con la absurda expulsión del español Chico por una entrada a destiempo sobre Louis Saha.

 

Laudrup optó por el mismo once que ha asombrado en este arranque de liga, considerando además que Pablo Hernández, el fichaje más caro de la historia del club (5,5 millones de libras) no pudo ser registrado a tiempo. O’Neill, por su parte, hizo debutar a Fletcher, el encargado de remediar la falta de gol que sufrieron los Black Cats en la recta final de la temporada pasada, cuando ganar solo uno de sus últimos diez partidos. Su máximo goleador fue Nicklas Bendtner con ocho goles. Con eso queda todo dicho.

 

La peor noticia para los locales fue la lesión de Taylor a los 15 minutos tras un choque con Craig Gardner. El joven Ben Davies fue el encargado de sustituirle.

 

El Sunderland se adelantó a los 40 minutos tras un error de Ashley Williams. Fletcher se plantó solo ante Vorm y cruzó su disparo con la pierna izquierda ajustado al palo.

 

A causa de la lesión de Taylor, el árbitro añadió seis minutos suplementarios a la primera parte. Tiempo suficiente para que el Swansea empatara a través de Wayne Routledge tras un pase inteligente de Nathan Dyer. Posiblemente, los dos jugadores más en forma de este arranque de campeonato para los Swans.

 

El Sunderland se adelantó de nuevo al borde de los 50 minutos. Fletcher aprovechó una serie de despejes fallidos tras un golpe franco lanzado por Seb Larsson para marcar su segundo gol de la tarde.

 

Los Swans estuvieron cerca del empate después de que Simon Mignolet no pudiera retener el disparo de falta de Jonathan de Guzmán. Danny Graham recogió el rechazo pero su disparo lo repelió Carlos Cuéllar sobre la línea. Chico también tuvo una clara ocasión de cabeza. Los galeses estrechaban el cerco y se mascaba el gol del empate.

 

Este llegaría gracias a un remate de cabeza de Michu tras un centro diagonal de De Guzmán. Pero cuando parecía que los Swans estaban abocados a la victoria, llegaría la absurda expulsión de Chico tras colocar su bota sobre la cara de Saha sobre la línea de banda. La expulsión frenó el ímpetu local y el encuentro se emparejó, aunque los Swans, a través de la entrada del surcoreano Ki, recuperaron el control del balón a pesar de su inferioridad numérica. En las postrimerías, los locales apretaron en busca de la victoria pero este no era su día.