Por fin empezó la Premier League, después de un larguísimo verano sin Copa del Mundo ni de Europa, solo una Copa América algo descafeinada por la pésima actuación de Argentina y Brasil y la participación de algunas selecciones francamente débiles.
Durante el verano hemos tenido ocasión de hacer miles de conjeturas y elucubraciones sobre lo que nos depararía la Premier League este año, sobre los fichajes, sobre las novedades en los banquillos. Pero hasta que el balón no empieza a rodar no cae el talón y descubrimos qué porcentaje de verdad había detrás de cada una de esas premoniciones. Estas son las cinco conclusiones que podemos extraer de este primer fin de semana (con lunes incluido) de la liga más importante del mundo (junto con la biliga Barça-Madrid):
1. El Manchester United se renueva pero sigue igual
Este es un año vital para los «red devils». Se ha retirado el núcleo duro de la vieja guardia, Scholes, Van der Sar, Neville, además de Hargreaves (bueno, él sigue buscando equipo y colgando vídeos en youtube en mallas para demostrar que todavía puede andar), con la retirada de Giggs perfilándose en el horizonte. Pero Ferguson lo ha vuelto a hacer: ha renovado el equipo en prácticamente un mes a base de fichajes y de jóvenes de la casa. El United ya tiene en sus filas a los jugadores que formarán la siguiente generación: Welbeck, Cleverley, Jones y Smalling (todos titulares en la sub-21 inglesa). A eso ha sumado a De Gea y Young. Total, en un año hablaremos de la liga número 20 del United.
2. Atasco en el centro del campo de Anfield
Todos los analistas de mofaron durante el verano de la cantidad de centrocampistas que abarrotan Anfield: Gerrard, Leiva, Aquillani, Meireles, Poulsen, Henderson, Adam…Al final, jugaron Adam y Henderson y el Liverpool dio una imagen nefasta y no pudo ganar de local al Sunderland. Dalglish da la impresión de ser un correcto estratega defensivo pero el ataque lo fía al carácter de Luis Suárez y a la conexión Downing-Carroll. Demasiado poco para ganar algo.
3. Villas-Boas no aprendió de Mourinho
Mourinho tiene una cosa clara: a los dirigentes hay que presionarles para que te traigan más y mejores jugadores. Sea por vía interna o a través de la prensa. Así fue como consiguió que Abramovich le comprara todo jugador internacional que pasaba a menos de 5 km de Stamford Bridge. Pero Villas-Boas es un buen chico. No quiere que papá gaste dinero a lo tonto, así que está dispuesto a apañarse con lo que tiene. El problema es que con lo que tiene no le basta, y menos cuando Essien estará de baja hasta el año que viene. Además, la edad de sus jugadores no hace presumir nada bueno en cuanto a lesiones. Lampard difícilmente podrá jugar más de 25 partidos, igual que Drogba o Anelka. Y Kalou, Obi Mikel y compañía no tienen capacidad suficiente. Tema aparte es el de Torres: después de que Drogba se ganara la titularidad en pretemporada, Villas-Boas apostó por el español, que sigue sin marcar. Veremos cuánto tarda el marfileño en empezar a apretar.
4. A QPR, Wigan, Norwich, Blackburn y Swansea les espera una larga y ardua temporada
Como se presumía, este quinteto sufrirá por el descenso. El QPR empezó perdiendo 0-4 en casa ante el Bolton con una situación fuera del terreno muy lamentable. Los dirigentes (Ecclestone y Briatore) pusieron los precios de las entradas por las nubes, se han negado a invertir una libra porque quieren vender el club, y los aficionados ya hicieron sonar música de viento en el primer partido. Pinta negro para Warnock y el QPR.
Igual de negro que para Kean y el Blackburn. Los dueños indios prometieron a Ronaldinho, a Raúl y el bueno de Kean sigue con los mismos. Por algo era el número uno en las apuestas a que sería el primer técnico despedido.
Wigan, Norwich y Swansea parecen un escalón por encima, pero pelearán por no descender junto a los otros dos.
5. Agüero será un éxito
Era previsible. El Atlético se le había quedado pequeño, estaba ya para empresas más exigentes. El City es un equipo a su medida, un grande en construcción, que puede crecer junto a Agüero.
El City, que transmitió señales negativas en la Community Shield, dio un giro radical en el partido contra el Swansea. Mancini dejó sin jugar a Balotelli y se decantó por Johnson. Con 1-0 cambió a De Jong por Agüero. El resultado, 4-0. Si Tévez se acaba quedando, este equipo puede formar un ataque demoledor con Johnson y Silva por bandas, Tévez de media punta y Agüero de delantero centro.
Mención aparte merece lo de Wenger, que vende estrellas y ficha adolescentes de tercera división, y de lo de McLeish (si es usted abonado del Villa, ya puede tomárselo con filosofía, porque le espera una temporada aburrida, aburrida, aburrida). Ah, y se confirma que Pardew ha fichado este verano a media docena de franceses para el Newcastle con la esperanza de que no entiendan los tuits de Barton. Al menos una parte de la plantilla estará a salvo de las bombas cibernáuticas del amigo Joey.