Ilie Oleart

Clough-Derby County, segunda parte

El Derby County alcanzó los mayores logros de su historia a principios de los años 70, cuando un tal Brian Clough se encontraba al frente del club. Casi cuarenta años más tarde, otro Clough ha tomado las riendas del club y lo ha situado a un punto del líder en el Championship. Un breve paseo por la relación entre los Clough y el Derby County.

 
Tras la disputa de cinco jornadas del nPower Championship, uno de los equipos revelación ha sido el Derby County, que ha logrado cuatro victorias que le han permitido situarse en tercera posición a un punto del líder. El técnico del club no es otro que Nigel Clough. Quizás, a muchos de nuestros lectores este nombre no les diga nada, pero la última vez que un entrenador de apellido Clough tomó las riendas del Derby County en el segundo escalón del fútbol inglés, no solo ascendió al club a la primera división sino que lo llevó a la consecución del título de liga.
 
Era mayo de 1967. Brian Clough, con su hasta entonces inseparable Peter Taylor, tomó las riendas del Derby County, que llevaba una década en segunda división. Por aquel entonces, su hijo Nigel tenía poco más de un año.
 
En su primera temporada, la 1967-68, el club quedó un puesto más abajo que en el curso anterior, pero Clough ya había comenzado a asentar los cimientos de un equipo que acabaría alcanzando la gloria, con la incorporación de jugadores como Roy McFarland, John O’Hare o John McGovern. Además, Clough despidió a once jugadores y a la mitad del personal, entre ellos a dos mujeres a las que cazó riendo por los pasillos tras una derrota.
 
En 1968, Clough fichó a Dave Mackay y al final de esa temporada, el club se coronaría campeón de la segunda división, logrando un récord de 22 partidos imbatido.
 
En su primera temporada de vuelta en la élite, el Derby finalizó en cuarta posición, su mejor puesto en más de 20 años. Sin embargo, a causa de unas irregularidades financieras, el club no pudo competir en Europa la siguiente temporada.
 
En la temporada 1970–71, el club finalizó noveno, pero en el siguiente curso, el Derby luchó contra Liverpool, Leeds y Manchester City por el título hasta el final en una de las campañas más reñidas y legendarias que recuerda el fútbol inglés.
 
Ya sin Mackay, que se marchó como jugador-entrenador al Swindon Town, el Derby se mantuvo invicto los primeros doce partidos de liga y se colocó tercero. A pesar de un bajón en Navidad, para Semana Santa el club ascendió a la segunda plaza. En el último partido, los “rams” vencieron por 1-0 al Liverpool y se colocaron en cabeza. Sin embargo, sus posibilidades de coronarse campeones eran mínimas, teniendo en cuenta que el Leeds solo necesitaba un punto en su último partido ante los Wolves para llevarse el título. El Leeds tuvo que disputar aquel partido solo 48 horas después de su mítica victoria ante el Arsenal en la final de la FA Cup. Convencidos de que el Leeds vencería en su último partido y se llevaría el título, Peter Taylor se llevó a todos los jugadores a Mallorca, mientras Clough se fue con su familia a Sicilia.
 
Fue allí donde se enteraron que un Leeds exhausto tras tres partidos durísimos en siete días, había perdido por 2-1 ante los Wolves y de que el Liverpool, que también tenía el título a su alcance, no había podido ganar al Arsenal en Highbury. El Derby había logrado su primer título de liga en sus 88 años de historia.
 
Pero las cosas se torcerían rápidamente. La relación entre Brian Clough y los dirigentes del club se enturbió con la misma rapidez con la que el técnico había llevado al club al título.
 
En agosto de 1972, Clough se negó a emprender una gira de pretemporada por Holanda y Alemania a menos que pudiera llevarse a su familia con él. El presidente, Sam Longson, le respondió que no era un viaje de vacaciones, así que Clough le cedió las riendas a Taylor, que se ocupó de la gira y él se negó a ir.
 
Ese mismo mes, Clough y Taylor ficharon a David Nish del Leicester City, por 225.000 libras, un record para el club en aquel momento, sin avisar a la directiva. Uno de sus miembros, Jack Kirkland, les advirtió que sería el último fichaje que hacían sin avisarles.
 
En septiembre, Clough atacó a los aficionados del Derby, diciendo que “solo empezaron a animar cuando nos pusimos por delante. Quiero oírles cuando perdemos. Su conducta es vergonzosa”. En la misma entrevista, Clough también atacó a la directiva por sus políticas. El presidente Longson se disculpó con los aficionados y se distanció de los comentarios de Clough.
 
Esa temporada, el Derby no pudo retener el título y finalizó séptimo, pero alcanzó las semifinales de la Copa de Europa, donde fue apeado por la Juventus, en una derrota que Clough nunca fue capaz de aceptar. En la ida en Turín, los locales vencieron por 3-1. Peter Taylor vio salir del vestuario de los árbitros al alemán Helmut Haller, de la Juventus, compatriota del árbitro, en el descanso. Durante el partido, el árbitro mostró tarjeta amarilla a Roy McFarland y Archie Gemmill, que no pudieron jugar la vuelta. Tras la vuelta, que finalizó con empate a cero, el árbitro declaró a la UEFA que le habían ofrecido 3.000 libras y un coche si los italianos ganaban la eliminatoria. Sin embargo, la UEFA exculpó a la Juve y culpó a un refugiado húngaro, Dezso Solti.
 
Tras el partido, Clough declaró a los medios italianos que “no hablaré con ningún maldito tramposo” y luego cuestionó el valor de los italianos en la Segunda Guerra Mundial.
 
En el verano del 73, Clough escribió un artículo incendiario en el Sunday Express contra el Leeds United. En él afirmaba que Don Revie, su técnico, debía ser sancionado por animar a sus jugadores a comportarse de forma antideportiva y el Leeds debía ser descendido a la segunda división. Clough también dijo que “los hombres que gestionan el fútbol han perdido una excelente ocasión para limpiar el juego de una tacada”. Finalmente, atacó al comité de disciplina de la federación afirmando que “el problema es que los que juzgan son dirigentes de otros clubes, por lo que tienen intereses personales”.
 
Fueron este tipo de comentarios fuera de lugar (en especial, contra dirigentes de la Federación y de su propio club, así como contra leyendas del deporte como Sir Matt Busby o Sir Alf Ramsey, o jugadores como Billy Bremner, Norman Hunter y Peter Lorimer) junto con su presencia cada vez más habitual en los medios, lo que llevó a la ruptura entre el presidente Longson y Clough.
 
El 11 de octubre de 1973, Longson pidió el despido de Clough y Taylor en una reunión del consejo, pero no obtuvo el respaldo necesario. El presidente había pedido que Clough dejara de escribir artículos en la prensa y de aparecer en televisión, y cerraron el bar para impedir que Clough y Talyor bebieran alcohol.
 
Ante la creciente presión y convencidos de que no sería aceptada, ambos presentaron su renuncia el 15 de octubre de 1973. A pesar de las protestas de los aficionados, que exigieron la reinstauración de los técnicos y la renuncia del consejo, ya nunca volverían a sentarse en el banquillo local.
 
Aquella fue una decisión que Clough lamentaría el resto de su vida. Estaba convencido de que había confeccionado un equipo que podría haber dominado el fútbol inglés y europeo durante los próximos años, como demuestra el título de liga logrado por su sucesor, Dave MacKay en 1975. Sería el segundo y último título de liga en la historia del club.
 
Tras un breve paso por el Brighton & Hove Albion y el Leeds United al que tanto había criticado, en enero de 1975, Brian Clough se hizo cargo del Nottingham Forest, donde permanecería durante 18 temporadas.
 
En la segunda mitad de su período al frente del club, uno de los mejores jugadores que tuvo bajo sus órdenes fue su propio hijo Nigel, un delantero goleador que fue internacional 14 veces con Inglaterra a principios de los años 90.
 
Clough jugó más de 400 partidos en el Nottingham Forest en dos etapas diferentes, la mayor parte bajo las órdenes de su padre. Marcó 131 goles, lo que lo convierte en el segundo máximo goleador de la historia del club.
 
Brian Clough, para evitar las acusaciones de nepotismo por alinear a su hijo, solía referirse a él en público como “el número 9” o “el delantero centro”. Al principio, no le dejaba hablar con la prensa y firmó con el club como amateur (el único en la primera división). Y se aseguró de que continuara jugando como amateur en el equipo de su hermano Simon. Toda la familia se juntaba los domingos en el parque para ver los partidos y se dice que Brian solía ser visto en la banda gritando “Run, you bloody clown” (“corre, maldito payaso”).
 
Cuando el Nottingham Evening Post publicó una fotografía de Nigel rematando de cabeza a gol en plancha, Brian pidió varias copas para sus amigos. “¿Qué tiene de especial esa foto?”, preguntó un día en su oficina, que estaba llena de personas. Los presentes negaron con la cabeza. “Mirad fijamente”. Cada uno dijo alguna razón pero nadie acertó. “Estáis ciegos. Son sus ojos. Los tiene completamente abiertos. Es asombrosa la cantidad de jugadores que rematan de cabeza con los ojos cerrados. Pero no nuestro Nige. Él no tiene miedo, es valiente”.
 
Nigel Clough se incorporó al Forest en 1982, pero no se convirtió en miembro del primer equipo hasta la temporada 1986-87, cuando se erigió en máximo goleador del equipo con 14 goles en liga. Ayudó al Forest a ganar dos Copas de Liga consecutivas (1989 y 1990). Fue muy halagado por los analistas por su inteligencia y fue considerado como un posible sucesor de Gary Lineker, cuando éste dejó la selección en 1992.
 
Sin embargo, su carrera comenzó a declinar prematuramente, en parte a causa de los escándalos que afectaron a la marcha de su padre. Además, fue uno de los jugadores del Forest que estuvo presente en el desastre de Hillsborough, cuando fallecieron 96 personas en el estadio del mismo nombre, en Sheffield, en una semifinal de la FA Cup entre Liverpool y Forest.
Temp.
Club
P.J.
G.
1984–1993
Nottingham Forest
311
101
1993–1996
Liverpool
39
7
1996–1998
Manchester City
39
4
1996–1997
Nottingham Forest (ced.)
13
1
1997
Sheffield Wednesday (ced.)
1
0
1998–2006
Burton Albion
227
16
Total
 
630
131
 
Nigel fue el máximo goleador del Forest en la temporada inaugural de la Premier League (1992-93), con 10 tantos, pero el club acabó último y descendió después de 16 años en la élite. Su padre abandonó el cargo y Nigel fue vendido al Liverpool por 2,75 millones.
 
A partir de ahí, Nigel pasó sin pena ni gloria por Liverpool, Manchester City y Sheffield Wednesday, antes de convertirse en jugador-entrenador del Burton Albion en 1998 a la edad de 32 años. Curiosamente, Peter Taylor había sido entrenador del club entre 1962 y 1965.
 
Durante la siguiente década, Clough llevó al Burton desde la séptima división hasta la League Two (cuarta división), antes de abandonar el club a mitad de la temporada 2008-2009 para seguir los pasos de su padre en el Derby County, que había fallecido el 20 de septiembre de 2004.
 
El 6 de enero de 2009, Nigel Clough fue nombrado técnico del Derby County en sustitución de Paul Jewell.
 
Los resultados mejoraron inmediatamente tras la llegada de Clough, con cuatro victorias consecutivas. Sin embargo, las lesiones de varios jugadores clave provocaron un declive de forma que provocó que los “rams” no sellaran su permanencia hasta el penúltimo partido de la temporada.
 
La primera temporada completa de Clough al frente del Derby, la 2009-10, supuso una revolución, con la incorporación de nueve jugadores y la baja de otros catorce. Pero de nuevo el club sufrió un rosario de lesiones que provocó que el equipo solo fuera capaz de mejorar en dos puntos y cuatro posiciones su posición del año anterior.
 
Clough, fiel a su padre, protagonizó algunos incidentes durante la temporada. Durante la victoria del Derby en el derbi local ante el Nottingham Forest, fue acusado por su homólogo Billy Davies de propinarle una patada en la rodilla durante una tangana. Clough lo negó y finalmente la liga archivó el caso.
 
La reestructuración del equipo continuó en la temporada pasada, con 37 transacciones en los nueve meses que transcurrieron entre la apertura del mercado estival y la clausura del mercado de invierno.
 
El equipo comenzó titubeante pero logró colocarse cuarto el 20 de noviembre tras 8 victorias en 11 partidos. Sin embargo, la partida de dos jugadores clave, los cedidos Shefki Kuqi y Frank Fielding, provocó que el club solo fuera capaz de ganar un partido en los 11 siguientes, cayendo hasta la decimoséptima posición en febrero. Además, el club fue eliminado de la FA Cup por el Crawley Town.
 
Clough pidió disculpas a los aficionados, que respondieron exigiendo su destitución. Sin embargo, el director general del club, Tom Glick, respondió a los aficionados afirmando: “Nigel es nuestro hombre. Siempre lo hemos dejado claro”.
 
Durante la mala racha entre noviembre y febrero, Clough criticó públicamente a varios jugadores, pero fue especialmente duro con Tomasz Cywka, después de que su error permitiera el empate del Portsmouth en Fratton Park. Clough afirmó que “es un jugador con muy poca experiencia y no especialmente brillante…ya puede volver a Wigan o a allá de donde fuera que viene hasta que aprenda a jugar”. Estas declaraciones, junto con la prolongación de la mala racha del club (solo 2 victorias en 16 partidos entre diciembre de 2010 y marzo de 2011) provocaron que los aficionados le dirigieran cánticos de “You don’t know what you’re doing” (“No sabes lo que haces”) durante una derrota por 1-3 ante el Doncaster.
 
Finalmente, el Derby salvó la categoría pero no lograron igualar los puntos logrados las dos temporadas anteriores. De hecho, solo logró ganar 4 de los últimos 28 partidos de la temporada.
 
A pesar de las especulaciones que apuntaban a su regreso al Burton, Nigel Clough decidió seguir una temporada más y, de momento, las cosas han comenzado bien. ¿Será el inicio de una nueva era de éxitos para el Derby County con un Clough al frente?
 

 

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Ilie Oleart