El Arsenal se dejó dos puntos en el Emirates frente al Olympique de Marsella en un encuentro que terminó 0-0, un marcador que no hace justicia al despliegue ofensivo que vimos sobre el terreno de juego por parte de ambos equipos. Con este resultado, el equipo de Wenger sigue primero de grupo, un punto por encima de sus rivales de hoy, aunque el Borussia Dortmund se acerca a ambos tras vencer al Olympiakos en el otro choque del grupo.

 

El once que dispuso Wenger incluyó algunas sorpresas. El técnico alsaciano dejó en el banquillo a su jugador más en forma y con mejor promedio goleador, Robin Van Persie y alineó en el once a Park Ju-Young como referencia atacante. El entrenador vistante Didier Deschamps también realizó algunas variaciones, dejando en el banquillo al español César Azpilicueta y al argentino Lucho González. Los hermanos André Ayew y Jordan Ayew, que estan completando una gran temporada en la Ligue 1, fueron titulares.

 

El equipo francés salió con mucho ímpetu en los primeros compases del encuentro y el propio Ayew en el minuto 5 disparó desde dentro del área rozando el palo izquierdo de la portería de Wojciech Szczęsny. El Arsenal respondió mediante Theo Walcott con un tiro escorado que obligó al meta Steve Mandanda a enviar el balón a córner.

 

Hacia el ecuador de la primera parte, los «gunners» tomaron la iniciativa. Ramsey desperdició una buena ocasión al rematar desviado desde dentro del área cuando lo tenía todo a favor para romper el empate y a punto estuvieron de pagarlo los locales cuando, en la jugada siguiente, Loïc Rémy casi sorprende a Szczęsny con un disparo lejano. Cuatro minutos después, Gervinho fue el que buscó el gol pero su cañonazo lo desvió de nuevo Mandanda, que estuvo muy inspirado durante todo el encuentro, con una gran estirada.

 

Pese a las grandes oportunidades de los dos equipos, el partido se marchó al descanso sin que el balón entrase en ninguna de las dos porterias.

 

La segunda mitad, al igual que la primera, también empezó con un ritmo trepidante, pero el Arsenal seguía sin poder definir sus acciones. Por ello, Wenger decidió en el minuto 62 dar entrada al goleador Van Persie sustituyendo a un desaparecido Park Ju-Young, que desvaneció las excelentes sensaciones que transmitió en su primer encuentro con el Arsenal en la Carling Cup la semana pasada. A diez minutos del final, con el encuentro languideciendo, Morgan Amalfitano buscó sorprender a los locales con un disparo desde la frontal que se marchó desviado.

 

En los últimos compases del partido, el Arsenal fue el que más buscó la portería, pero finalmente el marcador no se movió. El próximo compromiso para los de Wenger será el 23 de noviembre frente al Borussia Dormunt en el Emirates Stadium, donde los «gunners» no se pueden permitir un tropiezo.