Premier League
Stoke City | 1 |
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Arsenal | 0 |
Ficha técnica |
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1 – Stoke City: Begovic; Pieters, Shawcross, Wilson, Cameron; Whelan, N´Zonzi, Adam (Ireland, 73); Arnautovic (Etherington, 88), Crouch, Walters. |
0 – Arsenal: Szczesny; Gibbs, Koscielny, Mertesacker, Sagna; Arteta, Rosicky (Chamberlain, 74), Wilshere (Sanogo, 81), Cazorla; Podolski (Özil, 66), Giroud. |
Goles: 1-0, m.75: Walters (p.). |
Se le escapan las opciones en Premier League al Arsenal tras caer derrotado en el Britannia Stadium, ante un Stoke City que fiel a su particular manera de jugar al fútbol, fue mejor que los Gunners. Conocedor de que era un partido de los que podían dictar sentencia, Wenger alineó un once plagado de centrocampistas de buen pié, dejando al irregular Özil en el banquillo.
El Stoke acostumbra a sembrar de minas su terreno aunque no por conocidas sus localizaciones, son fáciles de desactivar para lograr avanzar, formándose un auténtico frente de trincheras. A ello le añadió Mark Hughes una presión en bloque alto que lograba aislar a Mikel Arteta de opciones de pase. Ahogada la fuente de su juego, al Arsenal solo le quedaba la vía del robo y la contra o el balón largo a Olivier Giroud, justo lo que tipos como Ryan Shawcross desean.
El resultado fue obvio: un duelo muy físico y directo, de constantes choques y pierna fuerte y del que tanto gustan los Potters de Mark Hughes. Cegados todos los espacios por el permanente achique local, el Arsenal perdía también a Cazorla, exiliado de inicio en el costado diestro. Solo el brío de Thomas Rosicky ayudaba a los londinenses a calentarse el cuerpo.
Cuando el asturiano mutó de banda, llegó la primera ocasión para el Arsenal, en un disparo que se marchó alto del propio Cazorla. Pero el cuadro cañonero era incapaz de abatir líneas mediante sus habituales progresiones en corto, topándose siempre con Whelan y N´Zonzi. Agresivo como siempre, el Stoke también gozó de una buena tentativa en los pies de un gran Peter Crouch, pero su disparo se fue al lateral de la red de Szczesny.
El Arsenal nunca estuvo cómodo, aunque Podolski pudo anotar en un contraataque, atado en todo momento por unos Potters que en ocasiones traspasaban el límite entre la agresividad y la dureza, como un feo pisotón de Whelan a Giroud que le pudo haber costado la expulsión. Solo el trencilla Michael Jones sabrá cómo mediocentro irlandés pudo terminar el partido sin tan siquiera ser amonestado.
Poco después, el autor del pisotón obligó a Szczesny a estirarse en un gran disparo lejano. Cuando el primer tiempo estaba pronto a expirar, en otro contragolpe se pudo adelantar el Arsenal, pero un egoísta Cazorla obvió la soledad de Podolski para chutar a las manos de Begovic.
Arrancó el segundo acto y el Stoke redobló tambores, acuciando el arco gunner a base fundamentalmente de centros laterales, especialidad de la casa y para lo que contaron con la colaboración inestimable de los centímetros de Peter Crouch, un dolor de cabeza para Koscielny y Mertesacker. El larguirucho ariete se quedó a un palmo de contactar de lleno con el esférico y de marcar en la enésima falta lateral a favor del Stoke, botada por Charlie Adam. El Arsenal sufría viendo como la marea alta local inundaba su orilla.
Sin embargo, tal desgaste hizo mella en los de Hughes, que comenzaron a ceder metros a las espaldas de sus tres centrocampistas, por donde se colaba Jack Wilshere, aunque las amenazas del Stoke no cesaron, como en el rechace de un córner que Cameron no atinó entre palos. Ya con Özil y Chamberlain en el césped, llegó la tragedia para el Arsenal, con un mano involuntaria pero claramente separada del cuerpo de Laurent Koscielny dentro del área que Michael Jones no dudó un segundo en pitar.
Jonathan Walters lo transformó a falta de diez minutos para el final y la histeria sacudió al Arsenal, quien sin embargo muy cerca estuvo de empatar a continuación en un zurdazo de Mesut Özil ligeramente desviado. No es buen augurio para los Gunners ver jugar al joven Sanogo y los peores presagios se confirmaron: en el tiempo de descuento, el delantero mandó al cielo de Stoke-on-Trent una suave dejada de Chamberlain que era gol o gol.
Sin tiempo para más, el Stoke cosechó una merecida e importantísima victoria para asegurar la permanencia. Despreciado por puristas, los de Hughes no renuncian a su idiosincrasia, que de momento les hace mantenerse en la máxima categoría del fútbol inglés. Para el Arsenal, la derrota en el Britannia supone un adiós casi definitivo a sus opciones de coronar la Premier League. La temporada se está haciendo larga en Highbury-Islington.