Ilie Oleart

El Arsenal sigue sin arrancar (2-1)

El Arsenal logró su tercera victoria consecutiva ante un débil Olympiakos que pudo empatar el partido. Lo mejor para los «gunners» fue la confirmación de la irrupción del joven Alex Oxlade-Chamberlain, que volvió a marcar, como ya hizo en la Carling.

 

Champions League

Arsenal 2
Olympiakos 1
Ficha técnica
2 – Arsenal: Wojciech Szczesny, Per Mertesacker, André Santos, Bacary Sagna, Alex Oxlade-Chamberlain (Aaron Ramsey, 67), Andrey Arshavin (Kieran Gibbs, 83), Emmanuel Frimpong, Alexandre Song, Mikel Arteta, Tomas Rosicky, Marouane Chamakh (Robin van Persie, 71).
1 – Olympiakos: Franco Costanzo, Jose Holebas, Vassilas Torosidis, Olof Mellberg, Iván Marcano, Ariel Ibagaza, Pablo Orbaiz (Francois Modesto, 75), David Fuster (Marko Pantelic, 80), Lubomir Fejsa, Rafik Djebbour, Kevin Mirallas (Djamel Abdoun, 75).
Goles: 1-0, m.8: Oxlade-Chamberlain. 2-0, m.20: Santos. 2-1, m.27: Fuster.
Los griegos no son actualmente las personas más populares en Europa. Sin embargo, Arsène Wenger les estará agradecido por haberle permitido mantener las críticas alejadas durante unos días. El Arsenal logró una victoria imprescindible ante el equipo más débil del grupo.
 
Los «gunners» sufrieron hasta el pitido final, incapaces de convertir su posesión en goles. Los aficionados del Arsenal deben temer, y con razón, su duelo ante el Tottenham Hotspur del domingo.
 
Las múltiples bajas en defensa provocaron que Wenger tuviera que colocar al centrocampista Alex Song como defensa central. Como era previsible, Song no estuvo bien y el Olympiakos se debe estar preguntando qué habría pasado si hubiera aprovechado sus ocasiones.
 
Pero también hubo noticias positivas para el Arsenal: primero, la excelente forma de Szczesny bajo palos, siguiendo por los goles de Alex Oxlade-Chamberlain y André Santos. Pero, sobre todo, el resultado. Esta fue la tercera victoria consecutiva, tras las logradas ante el Shrewsbury Town en la Carling Cup y ante el Bolton Wanderers en la Premier League.
 
Wenger vio el partido desde la grada por la sanción de la UEFA con sufrimiento pero seguro que él y sus jugadores se sintieron aliviados al echar un vistazo a la clasificación del grupo F. La distancia crece entre los «gunners», segundos, y el Borussia Dortmund, tercero. Los choques ante el Olympique de Marsella resultarán cruciales.
 
El Olympiakos llegó con una estadística en Inglaterra realmente lamentable: nueve partidos perdidos sobre nueve jugados, con un gol a favor y 29 en contra. Los griegos jugaron bien, aunque también es cierto que el Arsenal tiene la capacidad de mejorar cualquier equipo que tenga enfrente.
 
Los «gunners» no comenzaron con buen pie. David Fuster desaprovechó una ocasión interesante para los visitantes y Rafik Djebbour vio cómo Mikel Arteta evitaba el gol sobre la línea de gol a los 14 minutos. Djebbour envió el rechazo al lateral de la red.
 
Pero entonces apareció un adolescente, Alex Oxlade-Chamberlain, en su debut en la Champions League, para poner las cosas en su sitio. El inglés de 18 años aprovechó un pase de Song para controlar dentro del área escabulléndose de Iván Marcano. Envió un disparo pegado al palo a través de las piernas de Olof Mellberg que significó el 1-0.
 
Wenger, que recurrió a Robin van Persie y Aaron Ramsey en la segunda parte, se puso en pie cuando Santos marcó su primer gol para el club. Rosicky profundizó para el lateral izquierdo brasileño, que centró para Marouane Chamakh, que no pudo llegar. No importó. Cuando el balón regresó a Santos, se deshizo de Marcano y dejó en evidencia la portero, Franco Costanzo, marcando el 2-0 por el palo corto.
 
En otras épocas, ese 2-0 habría sellado el partido, pero este Arsenal no es el de otras épocas. Los «gunners» fueron cazados en frío en un córner en corto sacado por Ariel Ibagaza que David Fuster cabeceó a placer ante la pasividad de la defensa del Arsenal.
 
Momentos antes, Chamakh había desperdiciado una ocasión clara, tras pase de Andrey Arshavin. Pero el Arsenal fue a remolque el resto del primer acto. Su defensa sufrió de lo lindo y Szczesny tuvo que mostrar sus mejores reflejos para impedir el empate.
 
La defensa del Olympiakos tampoco fue para tirar cohetes. Oxlade-Chamberlain podría haber marcado de nuevo tras una ocasión generada por el decepcionante Chamakh, pero Costanzo evitó la ocasión. Arshavin también estuvo cerca de marcar.
 
A los 64 minutos llegó la ocasión más clara de los griegos. El lateral derecho Vassilis Torosidis desde lejos pero, ya con Szczesny batido, su disparo acabó en el larguero. El Arsenal logró la victoria por el más estrecho de los márgenes.
 

 

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