Llega algo de tranquilidad al club de Londres con la clasificación para la fase de grupos de la Champions League. Wenger y sus jugadores eran conscientes de que una eliminación habría resultado fatídica tal y como se encuentra el club en estos momentos y mostraron que, aunque no pasan ni mucho menos por sus mejores momentos, aún tienen recursos para sacar partidos importantes adelante.
La primera parte del choque nos deparó un sinfín de ocasiones en ambas porterías. Gervinho fue el jugador más incisivo de los “gunners” y dio la impresión de que la ascendencia del marfileño sobre el grupo está aumentando rápidamente. Una internada del marfileño que Van Persie resolvió con un disparo demasiado centrado que detuvo Handanovic fue una de las mejores ocasiones para los visitantes. Pero el principal problema del Arsenal en el partido tenía nombre y apellidos: Antonio Di Natale.
El veterano delantero demostró porqué, a sus casi 34 años, sigue siendo un referente en el club de Udine. Fue un peligro constante para la portería de Szczesny y todas las ocasiones de los italianos pasaron por sus botas: un gol de semivolea anulado por un fuera de juego milimétrico o un uno contra uno que Szczesny consiguió detener fueron algunas de las ocasiones de las que gozó el delantero antes de conseguir empatar la eliminatoria.
En el minuto 39, Mauricio Isla colgó un centro con fuerte parábola que Di Natale recogió dentro del área y, libre de marca, conectó un colocado cabezazo que paso por encima de Szczesny sin que el arquero pudiese hacer nada para evitar el gol.
Era el 1-0, que suponía el empate en la eliminatoria. El Arsenal quedó bastante tocado con el gol y hasta la segunda mitad no mostró síntomas evidentes de reacción.
La segunda mitad decayó en ocasiones respecto a la primera, pero no en emoción e intensidad. El Arsenal adelantó sus líneas y puso cerco a la portería de los italianos, que finalmente, en el minuto 55 consiguió perforar.
Gervinho recogió un balón en el área y dejó atrás a su par, haciendo gala de su explosividad y su rapidez, para poner el pase de la muerte a Van Persie. El holandés solo tuvo que empujar el balón para colocar el 1-1 en el marcador.
Con este resultado, el Arsenal parecía haber encarrilado la eliminatoria ya que los italianos estaban obligados a conseguir dos goles más para poder pasar. Pero el equipo de Wenger parece abonado a las emociones fuertes.
Una mano en el área de Vermalen fue cazada por el asistente de la línea de fondo, que avisó al árbitro principal, que no dudó en señalar el punto de penalti. Era casi el minuto 60 y un gol del Udinese nos hubiese deparado media hora de infarto con el equipo local volcado sobre la portería de los “gunners”. Pero Szczesny no permitió que eso pasase. Suele decirse que los penaltis los fallan los delanteros. No fue éste el caso. Di Natale conectó fuerte y con el empeine apuntando a la escuadra, pero Szczesny hizo una estirada monumental y, a pesar de estar ya cayendo, atinó a sacar la mano izquierda para repeler el lanzamiento del italiano, que salió por encima del larguero. Szczesny está empezando a devolver la confianza que Wenger ha depositado en él.
A partir de ahí, el Udinese sintió que su mejor oportunidad seguramente ya había pasado. Intentaron buscar un gol rápido que les metiese en el partido pero solo consiguieron dejar espacios atrás, que Walcott aprovechó gracias a su velocidad. El dorsal 14 recibió un pase al espacio de Sagna y demostró que con metros por delante es un jugador letal. Encaró a Handanovic y cuando parecía que buscaría el palo largo, colocó el balón en el corto y dejó la eliminatoria lista para sentencia.
Finalmente el Arsenal estará en el bombo de mañana en Mónaco entre los 32 mejores equipos del continente. Pero su juego e intensidad deberán mejorar respecto a lo visto hasta ahora si quiere competir con garantías con los grandes de Europa. Tal vez para cuando comience la fase de grupos, Wenger haya recuperado a todos sus lesionados y haya incorporada a algunos nuevos jugadores. Los actuales han demostrado ser mejores que el Udinese. Pero poco más.
Udinese: Samir Handanovic, Mehdi Benatia (87′ Giovanni Pasquale), Danilo, Neuton, Joel Ekstrand, Emmanuel Agyemang-Badu, Giampiero Pinzi (63′ Diego Fabbrini), Mauricio Isla (83′ Germán Denis), Pablo Armero, Kwadwo Asamoah, Antonio Di Natale
Arsenal: Wojciech Szczesny, Carl Jenkinson, Bacary Sagna, Johan Djourou, Thomas Vermaelen, Theo Walcott (91′ Andrey Arshavin), Emmanuel Frimpong (45’Tomas Rosicky), Alexandre Song, Aaron Ramsey, Robin van Persie, Gervinho (86′ Armand Traore)
Goles: Di Natale (39′), Van Persie (55′), Walcott (66′)