El Chelsea ha difundido dibujos de cómo iba a ser el estadio de Battersea, a pesar de no haber logrado comprar los terrenos.

El Chelsea ha publicado las imágenes, desarrolladas conjuntamente con su socio de desarrollo Almacantar y los arquitectos Kohn Pedersen Fox, en su página web, pero ha recordado que «no está negociando con los vendedores del lugar», aunque ha abierto la puerta a la esperanza afirmando que «no sabemos si las negociaciones actuales concluirán con éxito o no».
Roman Abramovich desea abandonar Stamford Bridge ya que su capacidad (42.000 espectadores) no le permite alcanzar los ingresos que obtienen clubes con estadios más grandes, como Arsenal o Manchester United.
El plan del Chelsea era transformar la central de Battersea (patrimonio histórico y, por tanto, imposible de derribar) en un estadio para 60.000 personas incrustado entre las cuatro chimeneas de la central, abandonada desde hace décadas.

Mientras, CPO, la empresa que compró el terreno de Stamford Bridge años atrás, integrada por aficionados del club, que se opone a cambiar de ubicación, afirma que Abramovich no ha estudiado a fondo la posibilidad de renovar y ampliar Stamford Bridge. El distrito de Hammersmith y Fulham también es partidario de que el club se quede en el barrio que le vio nacer.