El Manchester City tuvo que sufrir para llevarse hoy los tres puntos de Loftus Road ante un Queens Park Rangers que plantó cara pese a enfrentarse al líder del campeonato y se adelantó primero en el marcador.

 

Los goles del bosnio Edin Dzeko, el español Silva y el marfileño Touré Yaya sirvieron a los «citizens» para acabar llevándose la victoria pese a que los dos tantos del QPR pusieron en aprietos al conjunto del técnico italiano Roberto Mancini.

 

Con el argentino Agüero y el bosnio Dzeko en ataque, los visitantes trataron desde el inicio de imponer su dominio en el partido, pero Silva no lograba jugar entre líneas con su asidua facilidad. Eso, sumado a que Mancini dejó al francés Samir Nasri en el banquillo, provocó que el City no lograra conectar un último pase para inquietar la meta de Paddy Kenny.

 

Los locales tuvieron su primera oportunidad en el minuto 23, cuando un balón rematado de cabeza por el islandés Heidar Helguson rozó el palo derecho de la meta de Joe Hart.

 

Una de las imágenes del partido fue la de un Mancini muy irritado golpeando con rabia el banquillo de los visitantes ante la falta de ocasiones y la pasividad defensiva de su equipo, que provocó que el Rangers se acercara con peligro a la portería rival. El técnico italiano sabe que golear al United en Old Trafford está muy bien, pero las ligas se ganan y se pierden en campos como Loftus Road. Consciente de que el United había ganado su partido frente al Sunderland, el italiano no quería desperdiciar la renta de cinco puntos que ahora le separa de sus vecinos y rivales. Los temores de Mancini se hicieron realidad en el minuto 26, cuando Jay Bothroyd superó en el salto a toda la defensa vistitante para rematar a gol un centro a balón parado.

 

El gol del QPR no hizo reaccionar a los de Mancini, que pocos minutos después vieron como Hart tenía que sacar sobre la misma línea de gol un remate del escocés Jamie Mackie que el público casi cantó como gol.

 

Cuando parecia que los Rangers se irían al descanso con superioridad en el marcador, Dzeko logró equilibrar el encuentro. Después de deshacerse de tres defensas del QPR en el interior del área, el bosnio conectó un disparo raso por el lado izquierdo de la meta de Kenny que supuso la igualada.

 

Poco después de la reanudación, con la moral y el juego del City recuperados, Silva adelantó a su equipo con un disparo cruzado, tras recibir en el interior del área un centro raso de Dzeko, que sorprendió a Kenny por el lado izquierdo.

 

Con ese gol pareció que los de Mancini ya tenían el partido encauzado y que tras una mala primera parte acabarían ganando con relativa facilidad. Pero los Rangers son un conjunto que, además de poseer grandes dosis de calidad, también tiene una gran alma competitva, que se acrecenta más cuando juega en su estadio.

 

Los locales volvieron a empatar con un gol de Helguson, en una jugada trabada con varios rebotes en el área de Hart que acabó cayendo a los pies del delantero islandés. Los visitantes reclamaron fuera de juego, pero el colegiado Martin Atkinson, a instancias de su asistente decidió dar el gol.

 

A partir de ahí emergió el Manchester City «campeón» que estamos viendo esta temporda. Los «citizens» no le dieron la espalda al partido, no consideraron el empate como bueno, y sabiéndose mejores que sus rivales fueron a por el gol de la victoria, que lllegó en el minuto 74. Yaya Toure aprovechó un centro desde la izquierda de Kolarov al punto de penalti para conectar un testarazo a la escuadra izquierda de Kenny que supuso el tercer y definitvo gol de los visitantes.

 

El marcador no se movió ya y los «citizens» se fueron a dormir un fin de semana más con esos cinco puntos de ventaja que les hacen sentirse seguros al frente de la clasificación.