Ni dos minutos tardó el Fulham en tomar ventaja en su enfrentamiento ante el Norwich, una posición de privilegio que sólo se vería amenazada en los últimos minutos. Y es que Clint Dempsey tardó exactamente 107 segundos en anotar su 19º gol de la temporada, una cifra impresionante para un jugador que no es delantero centro. El estadounidense está completando la mejor temporada de su carrera.

 

No contentos con el primer gol, los «cottagers» continuaron en busca del segundo. Y lo lograron. Solo diez minutos más tarde del gol de Dempsey, que dio la asistencia del gol que daría una cómoda ventaja a los locales. Esta vez, el tanto fue obra de Damien Duff, que definió con clase ante Ruddy.

 

Con 2-0 en el marcador, el Fulham se dedicó a vivir de rentas. Ni siquiera la lesión de Pavel Pogrebnyak a la media hora de juego logró descentrar a los londinenses. Tan sobrados iban, que Martin Jol se permitió el lujo de sustituir al lesionado jugador ruso por Alexander Kacaniklic, un joven extremo sueco de 20 años.

 

Ya en la segunda parte, el Norwich acortó distancias. Lo hizo a falta de un cuarto de hora gracias a un disparo de Wilbraham que fue desviado por Hughes. Pero el gol resultaría inútil. Los «canaries» acusaron la ausencia de Grant Holt, el máximo goleador inglés de la Premier League tras Wayne Rooney, que fue expulsado ante los Wolves la semana pasada.

 

Con este resultado, el Fulham empata en la tabla con el Norwich a 39 puntos. Ninguno de los dos equipos tiene más objetivo para lo que resta de temporada que alcanzar la posición más elevada posible en la tabla, tal vez dar minutos a los jugadores más jóvenes y comenzar a planificar la próxima temporada.