El Fulham abusó de un débil Sunderland que no pudo contar por lesión con el trío ofensivo Gyan, Welbeck y Campbell. Los «black cats» plantaron cara durante la primera media hora e incluso merecieron adelantarse en el marcador, pero pagaron cara la ausencia de sus tres mejores delanteros desperdiciando muchas ocasiones. Y hay una máxima en fútbol que suele cumplirse: quién perdona acaba pagando.
Fue el joven Kakuta el que hizo pagar su falta de pegada a los «black cats», y se estrenó como goleador en la Premier League. Ya en la segunda parte, fue Simon Davies el que sentenció el partido con un doblete.
No podemos pasar por alto la espectacular actuación de Bobby Zamora. Fue él el que dio las tres asistencias de gol para que sus compañeros marcaran. Ha sido sin duda el mejor del Fulham, mejor incluso que Davies, autor de un doblete.
Con esta victoria, el Fulham consigue solo su segunda victoria fuera de casa en toda la temporada (sí, la segunda). El equipo de Mark Hughes demuestra que es un equipo que debe pelear por las plazas europeas, pese al mal inicio liguero. Se sitúa a tan solo 3 puntos del Everton, 7º, que podría ser plaza de Europa League si el City se hace con la FA Cup.
Por su parte, el Sunderland se sitúa 6 puntos por encima del descenso, aunque muy mal tendrán que darse las cosas para acabar descendiendo. Con una victoria más, estará salvado.
Sunderland: Mignolet; Al Muhamadi, Turner, Onuoha, Bardsley; Cattermole, Colback, Henderson (Zenden, 76), Malbranque (Lynch, 76), Muntari (Ferdinand, 66); Sessegnon.
Fulham: Schwarzer; Baird, Hughes, Senderos, Salcido; Sidwell, Murphy (Etuhu, 79), Davies, Kakuta (Greening, 62); Zamora (A. Johnson, 79), Gudjohnsen.
Goles: 1-0: Kakuta (33) , 2-0: Davies (61), 3-0: Davies (73)
