Alvaro Oleart

«El fútbol base inglés necesita actualizarse»

El nuevo contrato televisivo de la Premier League para el trienio 2016-19 ha despertado ciertas reticencias en la federación inglesa, que teme que afecte negativamente a la producción de futbolistas ingleses. Pero quizás el problema se encuentra en otra etapa del proceso de formación.

 
La Premier League ha vuelto a romper récords con el nuevo contrato televisivo para el trienio 2016-19. Sky Sports y BT Sport abonarán 5.000 millones de libras por los derechos de la liga de fútbol más valiosa del mundo y la segunda deportiva, solo por detrás de la NFL estadounidense.
 
La lluvia de millones que se avecina ha generado cierta reticencia entre los dirigentes de la federación inglesa, en especial por la posible repercusión sobre los futbolistas y los combinados ingleses. A pesar de la inversión millonaria de los últimos años en fútbol base, siguen sin verse los resultados al máximo nivel. La selección de Roy Hodgson sigue fracasando en las grandes citas internacionales y el número de minutos disputados por los jugadores ingleses en la máxima división del país sigue decayendo año tras año.
 
Desde el nombramiento de Greg Dyke como presidente de la federación en 2013, su organismo se ha centrado en averiguar las causas del continuo fracaso del combinado inglés. Las principales conclusiones apuntan al periodo formativo que abarca entre los 18 y los 21 años, cuando los futbolistas pasan de los equipos juveniles al fútbol profesional.
 
Sin embargo, algunos profesionales apuntan en otra dirección. Carles Mur, cofundador de On-Side Barcelona, una empresa catalana que asesora a clubes profesionales en la formación de futbolistas, tiene una opinión diferente. “Hasta edades muy avanzadas, 14 o 15 años, los clubes ingleses están centrados en la enseñanza de la técnica. A esas edades, en España ya hace cuatro o cinco años que están formando a los niños en cuestiones tácticas relacionadas con la interrelación con el resto de jugadores”, afirma.
 
On-Side ha desarrollado un método para evaluar a los jóvenes en cinco habilidades relacionadas con el cerebro, no con la habilidad técnica o la capacidad física, que era la prioridad en la formación hasta hace no tanto. Estas cinco habilidades son: decisión/percepción, creatividad, emoción, motivación y comunicación. Durante el proceso de desarrollo de su metodología, han consultado con expertos como Imma Puig, psicóloga del FC Barcelona o Horst Wein, uno de los grandes pioneros en este tipo de enfoque metodológico.
 
“Cuando trabajamos con los sub-10 del Fulham nos dimos cuenta enseguida de sus carencias. A nivel comunicativo eran muy fuertes pero tenían lagunas sorprendentes en cuanto a la percepción del espacio y de los compañeros”, comenta Mur. “Nosotros formamos individuos, no equipos”, le dijeron en el club inglés.
 
“Eso explica que los futbolistas ingleses sean técnicamente de los mejores del mundo pero en cambio les cueste mucho alcanzar niveles de rendimiento colectivo que en España ya tienen”, continúa Mur. “En todos los ejercicios que hacemos en campo colocamos cámaras GoPro en las cabezas de los niños para analizar luego lo que ven durante el juego. Salvo contadas excepciones, su mirada está centrada en el balón y en los espacios de juego cercanos”.
 
Esta empresa catalana utiliza la última tecnología para analizar a los niños, como Drones para medir la ocupación del espacio desde el aire o herramientas creadas específicamente por ellos. “Una de las herramientas que nos resulta más útiles son una especie de semáforos que marcan si la portería está abierta o cerrada, según la luz se ponga en verde o en rojo”, explica Mur. “Al colocar cuatro miniporterías, obligamos a los niños a estar pendientes de todo lo que sucede a su alrededor. Es sorprendente la información que se puede extraer”.
 
A pesar de la inversión de la federación en el fútbol base, no se perciben grandes cambios en los resultados. “La mayor parte del dinero ha ido destinado a instalaciones. El complejo de la federación en St. George’s Park, donde presentamos nuestro proyecto, es impresionante. Lo mismo sucede con el nuevo complejo de entrenamiento del Manchester City. Por si sola, la inversión en infraestructuras no produce resultados. Unas instalaciones magníficas sin capital humano cualificado ni una metodología moderna no sirven para nada. Y en eso, los ingleses todavía tienen camino por recorrer”, sentencia Mur.
 
La próxima gran cita de la selección inglesa será la Eurocopa de 2016. Según Harry Redknapp, “si no ganamos, quizás deberíamos pensar en dejarlo”. Desde luego, una eliminación en la fase de grupos del Mundial es un pobrísimo retorno de la millonaria inversión de la federación. Y, considerando el trabajo actual en el fútbol base, no parece que los resultados vayan a mejorar radicalmente a corto plazo.
 

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