El equitativo reparto de los derechos televisivos entre los veinte equipos que forman la Premier League es uno de los motivos por los cuales es la liga más seguida del mundo. Un total de 212 países disfrutan de ella a través de las 98 cadenas de televisión que la retransmiten. La negociación es colectiva, algo que ha permitido aumentar los ingresos exponencialmente, pasando de 625 millones de libras entre 2007 y 2010 a un total de 1.400 entre 2010 y 2013. Por si fuera poco, se espera que el siguiente contrato experimenten un aumento similar.
Pese al buen funcionamiento de este sistema, que ha permitido que equipos modestos como el Stoke, el Fulham o el Sunderland inviertieran sumas superiores a los 10 millones de libras este verano, no todos los clubes parecen estar de acuerdo.
Ian Ayre, el director general del Liverpool, se ha posicionado en contra de este sistema y propone que cada club negocie individualmente su contrato con las cadenas de televisión, como ocurre en la liga española.
Ayre apuesta por un sistema en el que Manchester United, Arsenal, Chelsea y, lógicamente, Liverpool, los cuatro clubes que más dinero reciben actualmente, aumenten sustancialmente sus ingresos a partir de 2013. «Lo que va a cambiar las cosas es salir al exterior y vender nuestra marca globalmente. Quizá el camino sea negociar los derechos televisivos individualmente, como hacen en España».
«Lo que está claro es que, respetando al resto de equipos de la Premier League, si uno es aficionado del Bolton en Bolton, uno se suscribe a Sky porque quiere ver al Bolton. Todo el mundo entiende eso. Del mismo modo, si uno es aficionado del Liverpool en Liverpool, uno se suscribe por el mismo motivo. Pero si uno vive en Kuala Lumpur, no hay nadie que se suscriba a Astro o ESPN para ver al Bolton o muy pocos lo hacen. La gran mayoría se suscribe porque quiere ver al Liverpool, Manchester United, Chelsea o Arsenal».
«Así las cosas, ¿es justo que los derechos internacionales se repartan equitativamente entre todos los clubes? Algunos argumentarán que todos tienen que estar de acuerdo para que eso ocurra. Pero no es de los clubes de donde proceden los ingresos, sino de las cadenas de televisión, ¿y no se trata de lo que la gente quiere ver en la televisión? Sabemos que somos nosotros y algunos otros. En algún punto sentimos que debe de haber una recompensa por ello, porque lo que hacemos ahora mismo es dar ventaja a otros grandes clubes europeos».
Pese a la contundencia del discurso del director general del Liverpool, parece poco probable que el sistema actual de reparto de los derechos televisivos en Inglaterra cambie. Para que eso suceda, 14 de los 20 equipos de la Premier League deben votar a favor de un cambio en el contrato comercial. Y lo cierto es que, excepto los grandes, la mayoría de clubes saldría perjudicada y, por tanto, votaría en contra. De hecho, incluso Sir Alex Ferguson, en representación del Manchester United, calificó en su momento el acuerdo de «justo».