El club anunció las cifras del último año de los estadounidenses George Gillett y Tom Hicks como propietarios. A pesar de las pérdidas, el nuevo propietario, la empresa estadounidense Fenway Sports Group insistió en que el club tenía una salud financiera mucho mejor de lo que sugieren los números.
Entre agosto de 2009 y julio de 2010, los ingresos del Liverpool ascendieron hasta 184 millones de libras pero la deuda también aumentó hasta los 123 millones. Se pagaron nada menos que 17 millones en concepto de intereses de la deuda.
Pero desde octubre, los nuevos propietarios han pagado 200 millones de deuda, reduciendo por tanto los intereses. Las cifras también incluyen el contrato de patrocinio del uniforme por 4 años y 80 millones con Standard Chartered, que da estabilidad y seguridad al club. Es el contrato de patrocinio de uniforme más suculento de la historia del club.
Así las cosas, los aficionados de los «reds» pueden estar seguros de que los casi 60 millones de libras invertidos en la compra de Luis Suárez y Andy Carroll en enero tendrán continuidad en verano.