Alvaro Oleart

El Manchester City ficha a Samir Nasri

«El Arsenal puede confirmar que ha acordado los términos para el traspaso de Samir Nasri al Manchester City». Así de escueto ha sido el comunicado escrito publicado por los «gunners» en su página web, despidiendo a su mejor jugador de la temporada pasada, y con él, cualquier aspiración de lograr un título.

 
Las constantes quejas de Roberto Mancini demandando a Samir Nasri, en las que infravaloraba a sus jugadores diciendo que necesitaba más jugadores para que el Manchester City aspirara a la Premier League han surtido efecto. Los «citizens» pagarán unos 24 millones de libras para hacerse con los servicios de un jugador al que solo le quedaba un año de contrato, sabedor de que sus vecinos del Manchester United podrían haberlo convencido para unirse a ellos la temporada que viene, cuando su contrato hubiera finalizado.
 
Samir Nasri se va del Arsenal triste, pues Arsène Wenger confió en él tres años atrás, cuando pagó unos 12 millones de libras al Olympique de Marsella para contratarle. Wenger lo siguió desde el el Europeo sub-17 de 2004, en el que Francia fue campeón batiendo a la España de Cesc Fábregas, que fue MVP del torneo, en la final.
 
Sin embargo, la falta de títulos ha sido el factor clave. Al igual que Fábregas, Nasri se ha cansado de no ganar títulos. Y, por si quedaba todavía alguna duda respecto a su decisión de abandonar el Emirates, las dos primeras jornadas de la Premier League y la pasividad de Wenger en el mercado de fichajes han bastado para que el jugador francés tomara una decisión definitiva. Los «gunners» han cosechado un triste punto de seis posibles jugando un fútbol rácano, mientras que los «citizens» han ganado los dos partidos con suficiencia y hasta han mostrado buen juego por momentos. Además, a diferencia de lo que sucede con sus actuales compañeros en el Arsenal, sus futuros compañeros en el City ya han dejado atrás la adolescencia. Esta política del Arsenal, la de fichar jugadores jóvenes todavía por emerger, parece haber sido el auténtico detonante de las marchas de Clichy, Fàbregas y Nasri.
 
Tras esta última salida, el Arsenal está destinado a sufrir una temporada más en blanco, y ya serían siete. De momento, mañana disputará un partido clave ante el Udinese, en el que tratará de defender el 1-0 logrado en la ida para jugar la fase de grupos de la Champions League. Y lo hará sin Nasri y sin Wilshere, después de que se confirmara que será baja por lesión. Wenger debe estar rezando porque llegue el 31 de agosto.
 

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