Venk Mani

El rol de las subculturas en el fútbol británico

Históricamente, ha existido un estrecho vínculo entre el fútbol y la moda en el Reino Unido. A partir de los años 40 en el Reino Unido algunos aficionados al fútbol adaptaron la manera de vestirse debido a los cambios en la cultura británica. En otras palabras, la economía, el fútbol europeo, la música y la política han cambiado la identidad de los aficionados al fútbol en el Reino Unido.

 
Históricamente, ha existido un vínculo entre el fútbol y la moda en el Reino Unido. La moda constituye una auténtica subcultura del fútbol. Nadie puede negar que la forma en que se viste un ser humano tiene connotaciones profundas sobre su persona ya que es una manera de expresar su identidad. Es importante subrayar que no todos los aficionados al fútbol se visten del mismo modo que lo hacían los miembros de las diferentes subculturas.
 
A partir de los años 40 en el Reino Unido algunos aficionados al fútbol adaptaron la manera de vestirse debido a los cambios en la cultura británica. En otras palabras, la economía, el fútbol europeo, la música y la política han cambiado la identidad de los aficionados al fútbol en el Reino Unido.
 
En Gran Bretaña, la moda y el fútbol emprendieron su estrecha relación durante los años 50 con el crecimiento de la subcultura Teddy Boy. El rock and roll, con sus estrellas, inspiraron a los teddy boys, específicamente en la forma de vestirse. Solían llevar traje, camisa blanca y corbata. Además, muchos se parecían a Elvis Presley con sus peinados. Llevaban cuchillos en los bolsillos y las peleas entre grupos de teddy boys eran comunes. Se unían en grupos (crews) y representaron el inicio de la cultura hooligan. La violencia entre diferentes crews era común durante los partidos de fútbol de esta época.
 
Este vínculo entre los aficionados y la moda continuó después con los mods de los años 60, los skinheads de los últimos años de la década de los 60 y los primeros de la de los 70, y entonces con el renacimiento de los mods en los últimos años de los 70. Los mods lucían ropa de marcas como Fred Perry, Ben Sherman o Levi’s, y conducían scooters para imitar a jóvenes italianos. Típicamente, un mod conducía una Lambretta o una Vespa. La música mod cosechó un enorme éxito, también. Grupos famosísimos como The Jam, The Kinks, The Rolling Stones y The Who estuvieron asociados en sus orígenes al movimiento mod. Hoy en día, la cultura mod sigue desempeñando un rol trascendental debido posiblemente a que ha sido la subcultura más significativa desde el punto de vista de sus principios.
 
Los mods constituyeron una reacción frente a la naturaleza conservadora de la sociedad británica de los años 60. Rechazaban los valores de la familia y la patria porque querían establecer un estilo de vida más dinámico. Los mods frecuentaban clubes como el ‘Twisted Wheel Club’ en Manchester, donde podían escuchar su música, lucir su indumentaria y mostrar nuevos pasos de baile ante otros mods. Con el tiempo, los jóvenes aficionados al fútbol comenzaron a copiar la estética mod.
 
El paro creció durante los años 70 en el Reino Unido y ha seguido afectando a las generaciones posteriores. Esto ha provocado que se asociara a los mods con la tendencia política de extrema derecha, aunque eran más bien los skinheads los que estaban asociados con grupos racistas. Muchos siguen vinculando a los mods con los skinheads pero es necesario destacar que eran (y son) dos subculturas distintas. Los mods influyeron a los skinheads pero ni son lo mismo ni comparten la misma visión.
 
El paro y la inmigración contribuyeron a agravar los problemas sociales que experimentó el Reino Unido durante aquellos años. El movimiento de los casuals se originó en esta época. Los casuals asistían a todos los partidos que jugaban sus clubes porque no solían tener empleo, ya que las administraciones públicas cerraron las industrias tradicionales como las industrias de la minería y del carbón, de la construcción naval y de la siderurgia. Los casuals solían viajar en el tren ‘Inter City’ (es por eso que el grupo de hooligans del West Ham United recibe el nombre de ‘Inter City Firm’).
 
El estilo de los casuals tiene raíces italianas, una característica que comparte con los mods, que consideraban la moda italiana como su principal influencia. El movimiento casual nació en Inglaterra en 1978. Los aficionados comenzaron a vestir marcas francesas e italianas para que la policía no reconociera a los aficionados al fútbol que pertenecían a los ‘mobs’. Los aficionados de Liverpool fueron los que introdujeron el estilo casual en el Reino Unido. Después de jugar en Francia contra el Saint Etienne, los aficionados de los Reds regresaron a Inglaterra con la última moda francesa que habían absorbido. Empezaron a vestir marcas de prestigio procedentes de Francia e Italia. Esto provocó que la policía fijara su objetivo en los hardmods y los skinheads con botas, y no prestara tanta atención a aquellos muchachos que vestían ropa cara. Este último hecho hizo que antiguos skinheads y hardmods amantes del fútbol viesen en esta tribu urbana de reciente aparición un modo de vida más tranquilo para disfrutar del mundo de las gradas. Por tanto, no vestir como ninguna cultura juvenil existente ni llevar distintivos del equipo al que se pertenecía les permitía dividirse en pequeños grupos y organizar incidentes con las hinchadas rivales.
 
A principios de la década de los años 80, la estética del movimiento ya estaba bien definida, mezclando el culto a la ropa, las marcas, el fútbol y la violencia. Por primera vez, un movimiento juvenil empezaba en las gradas y luego pasaba a la calle y no al contrario, como había sucedido con los skinheads, los mods o los punks. Las marcas más empleadas por esta cultura eran Lacoste, Burberry, Fila, Sergio Tacchini, Kappa, Diadora, Lois, Levi’s, Slazenger, Benetton, Umbro, Adidas y Puma y más tarde empezaron a vestir otras marcas como Stone Island, Henri Lloyd, Barbour, Polo Ralph Lauren, Paul Smith, Lonsdale, Prada, Armani, Fred Perry o Kangol.
 
El interés por el estilo casual renació en los años 2000. Grupos de música como The Streets promovieron la cultura casual ya que se vistían como tal. Igualmente, algunas películas de la década promovieron esta cultura, como por ejemplo ‘Green Street Hooligans’.
 
La cultura casual sigue viva hoy en día y miembros de crews, que visten de manera casual, siguen acudiendo a los partidos de fútbol. Los esfuerzos de la policía británica ha erradicado la mayoría de la violencia que estas personas provocan. No obstante, los que asistían al fútbol procedían en su mayoría de la clase obrera aunque después de la crisis económica de 2008, el fútbol se ha convertido en un deporte más próximo a la clase media. Ese es el motivo por el cual el vínculo especial entre fútbol y moda en Gran Britaña corre un grave riesgo de desaparición.
 
Bibliografía:
www.football-hooligans.com/footballcasuals.html
Ash, Juliet y Wright, Lee (eds.), Assemblage and subculture: the casuals and their clothing (London: Routledge, 1988).
 

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Venk Mani