Roberto Di Matteo aprovechó el partido de Champions League para darle minutos a John Terry, que está cumpliendo cuatro partidos de sanción en la Premier League. Pero el regreso del capitán no fue suficiente para evitar que los vigentes campeones de Europa sufrieran su primera derrota de la temporada (sin contar Community Shield y Supercopa de Europa, claro). Por cierto, Terry lució un brazalete contra el racismo en su brazo, una de esas paradojas que solo la UEFA es capaz de llevar a cabo sin ruborizarse.

 

El resultado final no reflejó la abismal distancia que exhibieron ambos equipos. El Shakhtar se hizo acreedor a la victoria, que debería haberse producido por un margen muy superior. La buena noticia para el Chelsea es que la Juve no pasó del empate ante el Nordsjaelland y los Blues siguen segundos del grupo E.

 

Todos los dedos señalan a Di Matteo, que antes del partido afirmó que este era un viaje hacia lo desconocido porque poco se conocía de la potencia de liga ucraniana, donde el Shakhtar lleva 12 victorias en otros tantos partidos.

 

Las cosas no pudieron empezar peor para Terry y el Chelsea. A los tres minutos, Terry entró a Luiz Adriano pero el balón le cayó a Teixeira, que marcó con un disparo ajustado al palo lejano.

 

El Shakhtar acumula su talento en la zona de media puntas, donde coinciden dos brasileños, Teixeira y Willian, y el armenio Henrik Mkhitaryan, la revelación de la temporada con 14 goles en 17 partidos (incluyendo el de hoy). A través de sus botas, los ucranianos controlaron la primera parte.

 

A pesar de la visita del Manchester United a Stamford Bridge del fin de semana, Di Matteo alineó a sus mejores hombres. A los 18 minutos, la lesión muscular de Lampard, que celebraba sus 100 partidos en Europa con el Chelsea, provocó la entrada de Hazard. Ni con la entrada del belga reaccionó el Chelsea.

 

El Shakhtar desperdició varias oportunidades para decidir el encuentro antes del descanso, pero Petr Cech detuvo todos los intentos de los ucranianos. Primero, un disparo de Mkhitaryan y luego un intento de Tomas Hubschman desde dentro del área, exhibiendo unos reflejos impropios de su edad.

 

La segunda parte siguió la misma tónica, con Fernandinho marcando el tempo del partido en la zona media. Él fue quien inicio y culminó la jugada del segundo gol. Robó el balón a Hazard en la medular y condujo la contra. Intercambió pases con Adriano y acabó cruzando raso ante Cech.

 

El Chelsea reaccionó y Ramires, Hazard y Mikel John Obi pudieron marcar. Pero siguió siendo el Shakhtar el que llegó con más peligro. Fernandinho y Mkhitaryan malgastaron ocasiones para sentenciar antes de que Oscar redujera distancias en el 88. Demasiado tarde.