Tony Pulis no tiene ninguna duda de que la Premier League es más importante que la Europa League. Solo así se entiende el once titular que el técnico galés alineó en Turquía, donde se jugaba el liderato del grupo E. Un empate era suficiente para mantener la primera plaza y mantener su imbatibilidad en la Europa League.

 

Ninguno de los once jugadores que participaron de inicio en la victoria del pasado domingo ante el Tottenham viajaron a Estambul. Ninguno. De hecho, Pulis solo se llevó 15 jugadores, prácticamente regalando la primera plaza a un Besiktas que se jugaba su continuidad en la competición en el partido.

 

A pesar de la alineación, plagada de suplentes, la lesión de Wilkinson y los pobres primeros 25 minutos de los «potters», el Stoke se puso por delante a la media hora gracias a un disparo lejano de Ricardo Fuller que fue desviado por un defensa. Quizá no fuera el gol más bonito del jamaicano, pero sin duda será importante, pues la de hoy era su primera titularidad desde abril. Una lesión en el talón de Aquiles le había impedido, hasta ahora, recuperarse por completo.

 

El gol no cambió la dinámica del partido. Un Besiktas superior solo se vio frenado por las paradas de Begovic. Ya en la segunda parte, ocurrió lo inevitable. Cuando tan solo habían transcurrido quince minutos, una entrada de Matthew Upson sobre Hugo Almeida dentro del área acabó con el portugués en el suelo, penalti a favor de los turcos y Upson expulsado. Fernandes anotó el penalti, y el resto fue crónica de una muerte anunciada.

 

A pesar de otra impresionante intervención de Begovic, que parece decidido a recuperar la titularidad, el Besiktas logró la victoria, y con ella el primer puesto del grupo, gracias a dos goles en los últimos quince minutos. El primero fue obra de Pektemek, de cabeza tras un córner lanzado por Fernandes, y el segundo fue un auténtico golazo de Edu, que tan solo necesitó siete minutos para engatillar un trallazo imparable desde fuera del área.

 

Aunque la derrota ha supuesto para el Stoke perder la imbatibilidad en la Europa League y caer al segundo lugar del grupo, no importará mucho a Pulis. En los próximos siete días, el Stoke deberá afrontar dos jornadas de la Premier League, así que el descanso del que han gozado sus titulares tras no viajar a Turquía puede resultar decisivo para mantener la buena racha en el campeonato doméstico, donde han ganado a Everton y Tottenham sucesivamente. En febrero ya habrá tiempo de pensar en la Europa League.