Todavía es pronto para afirmarlo con seguridad, pero parece que la transición post-Rodgers en el Swansea no será tan dura como se esperaba. De hecho, si el equipo galés continúa jugando como en el primero de la nueva era de Michael Laudrup al frente del equipo, el club puede superar el magnífico undécimo puesto logrado la temporada pasada.

 

Michael Laudrup, miembro del «Dream team» del Barcelona de los 90, ha transmitido su estilo preciosista a sus jugadores y, a tenor de lo visto en Loftus Road, ha acertado de pleno con los fichajes.

 

Esta es la primera victoria del Swansea en la primera jornada de liga en los últimos siete años. La contribución del recién llegado Michu resultó crucial. El elegante centrocampista español marcó dos goles, el segundo un fantástico disparo con rosca desde el borde del área. Resulta sorprendente que solo costara dos millones de libras considerando que la temporada pasada marcó 15 goles en la liga española, el récord para un centrocampista en la primera división española. Los otros fichajes procedentes de España, Chico y Jonathan de Guzmán, también rindieron a gran nivel.

 

El Swansea añadió a su juego combinativo una profundidad de la que carecieron por momentos la temporada pasada. «Ganar en mi debut, lejos de casa, por 0-5, nadie lo habría podido soñar», reconoció Laudrup. «Michu estuvo genial, cuando traes jugadores de fuera es importante mirar la calidad pero también la personalidad y asegurarse de que puede encajar en la forma de jugar y la cultura. Estos nuevos jugadores han jugado siempre con clubes modestos pero tienen personalidad para destacar».

 

Laudrup también elogió a sus extremos, Wayne Routledge, que participó en los tres primeros goles, y Nathan Dyer, que marcó dos. El sustituto Scott Sinclair, cerca de marcharse del club, selló la victoria.

 

¿El QPR? Poco que decir. A pesar de fichar ocho jugadores este verano, cinco de los cuales fueron titulares, comenzaron la temporada como lo hicieron la pasada, en que cayeron por 0-4 ante el Bolton.

 

La tarde fue especialmente dura para Rob Green, que cometió un grave error en el gol inicial, que remitió inmediatamente al gol que le costó la titularidad en la última Copa del Mundo. Hay que reconocer que el QPR mejoró tras el gol y creó ocasiones para dar la vuelta al marcador. El más destacado fue otro recién llegado, Junior Hoilett.

 

Los aficionados visitantes recibieron también con alegría las noticias de que el Liverpool, el nuevo club de Rodgers, había caído por 3-0 ante el West Brom. Una tarde redonda.