El Swansea sumó su segundo punto como visitante en la Premier League con todo merecimiento, tras una actuación que provocó la ovación final de los hinchas locales.

 

De todos modos, los galeses se lo deben en parte a Michel Vorm, el portero suplente de Holanda, que realizó dos intervenciones notables en las postrimerías del partido. Sin embargo, el nivel futbolístico que exhibieron los galeses les hicieron acreedores a ese punto. Todo lo contrario se puede decir del Liverpool, que mostró poco fútbol y les aleja de la pelea por el cuarto lugar.

 

Ambos equipos sufrieron las bajas de jugadores importantes, Steven Gerrard por el Liverpool a causa de su tobillo, y Scott Sinclair por el Swansea, que fue relegado al banquillo por unas molestias, y no salió hasta el minuto 74.

 

El Liverpool tuvo una de las mejores ocasiones del partido nada más comenzar, en el minuto seis. Stewart Downing centró desde la izquierda (para eso le ficharon) y Andy Carroll remató a placer (para eso trajeron a Downing) pero el balón se estrelló contra el larguero (para eso más valía no haber traído a ninguno de los dos).

 

A pesar del dominio del Liverpool, el Swansea pudo adelantarse poco antes de la media hora de juego. Wayne Routledge se internó por la izquierda y realizó un centro excelente para Danny Graham, que remató tal como le vino y obligó a Pepe Reina a lucirse. En respuesta, Luis Suárez, el último héroe de Anfield, disparó raso y provocó la intervención de Vorm.

 

El Swansea respondió por medio de un disparo lejano del centrocampista Joe Allen que se fue cerca.

 

Para la segunda parte, Kenny Dalglish colocó a Dirk Kuyt en lugar de Jordan Henderson, que no está rindiendo a la altura de lo que se espera de un jugador que costó 18 millones de libras.

 

La afición local fue perdiendo la paciencia a medida que avanzaba el encuentro. No ayudó el hecho de que Nathan Dyer, un jugador tan perseverante como poco atinado de cara a puerta, obligara a Reina a intervenir por partida doble. Para rematarlo, el Swansea reclamó un penalti por una falta de Daniel Agger sobre Leon Britton.

 

Poco después se produjo el reencuentro entre el catalán Ángel Rangel y Craig Bellamy, que sustituyó a Andy Carroll, que sigue sin justificar los 35 millones de libras que costó hace poco menos de un año. Rangel y Bellamy mantuvieron el año pasado unos duelos apasionantes cuando el galés estaba cedido en las filas del Cardiff.

 

El Swansea siguió generando ocasiones. Dyer centró desde la derecha y Graham bajó el balón para Mark Gower, que envió el balón alto desde el punto de penalti.

 

Presionado por su afición, el Liverpool lanzó a la caballería en los minutos finales, pero Vorm pudo con todos. Excepto con Kuyt, que le batió con un cabezazo en plancha, pero el árbitro indicó fuera de juego. Luis Suárez y Glen Johnson estuvieron cerca pero Vorm impidió un gol que no habría hecho justicia a lo visto esta tarde en Anfield.