Ilie Oleart

El Tottenham no levanta cabeza (1-1)

Al Tottenham solo le valía ganar esta noche para frenar la racha de tres derrotas consecutivas. Y sin embargo, los Spurs pueden estar satisfechos tras haber logrado el empate en el tiempo añadido gracias al gol de Rafael Van der Vaart. Cameron Jerome había adelantado al Stoke a quince minutos para el final.

 

Premier League

Tottenham 1
Stoke City 1
Ficha técnica
1 – Tottenham Hotspur: Brad Friedel, Benoit Assou-Ekotto, Kyle Walker, Ledley King (Ryan Nelsen, 84), Younes Kaboul, Luka Modric, Gareth Bale, Rafael van der Vaart, Scott Parker, Niko Kranjcar (Jermain Defoe, 45), Louis Saha (Giovani dos Santos, 73).
1 – Stoke City: Asmir Begovic, Ryan Shawcross, Marc Wilson, Robert Huth, Andy Wilkinson, Salif Diao (Glenn Whelan, 27), Wilson Palacios (Dean Whitehead, 57), Jermaine Pennant, Cameron Jerome (Rory Delap, 83), Jonathan Walters, Peter Crouch.
Goles: 0-1, m.75: Jerome. 1-1, m.90+3: Van der Vaart.
El Tottenham Hotspur debía comenzar su recuperación esta noche. No solo para olvidar la tragedia que vivió Fabrice Muamba el sábado pasado en este mismo escenario, sino para poner fin a la racha de tres derrotas seguidas de los locales. Nada más lejos de la realidad.
 
Rafael Van der Vaart marcó el tanto del empate en el tiempo añadido, tras cabecear un centro de Gareth Bale, pero las sensaciones que dejan los Spurs distan de ser buenas. Redknapp había recalcado la importancia de la victoria. Cualquier otra cosa no bastaba.
 
El Tottenham ha visto cómo su ventaja de 10 puntos sobre el Arsenal se esfumaba. Hace menos de un mes, parecían destinados a jugar la próxima Champions League. Esta noche han tenido suerte de la derrota del Chelsea, que se podría haber colocado a solo dos puntos. Y el fin de semana nos espera un choque directo entre ambos.
 
El Stoke trabajó duro y se marchará contento con el punto, a diferencia de su rival. Cameron Jerome envió al fondo de las mallas una falta lanzada por Jermaine Pennant después de que Robert Huth generara un pequeño barullo en el área.
 
Los jugadores lucieron el leman «Get Well Soon Fabrice» en las camisetas y hubo un minuto de aplausos antes del encuentro. Redknapp expresó su alivio por jugar tan pronto en su propio estadio y así poder pasar página rápidamente.
 
El Stoke ya no tiene objetivos en esta temporada, pero eso no significa que sea un rival fácil. Todo lo contrario. Una de sus especialidades es romper el ritmo del rival y la calidad del partido se resintió. El Tottenham estuvo impreciso en el pase, algo poco común.
 
El Tottenham se adueñó del partido pero no creó ocasiones. Modric tuvo la mejor ocasión de la primera parte pero su disparo salió desviado fuera.
 
El Stoke no sufrió en la primera parte y limitó las ocasiones rivales a disparos lejanos. Los aficionados locales corearon el nombre de Jermain Defoe a la media hora de juego, demostrando su frustración y provocando la reacción de Louis Saha, que inmediatamente obligó a Asmir Begovic a desviar un disparo del francés.
 
La presión visitante fue asfixiante, su defensa compacta. El Tottenham tuvo que luchar por cada metro de terreno y careció de la fluidez de principios de temporada.
 
Defoe entró en la segunda parte y se mostró activo. Con el paso de los minutos, el Tottenham aumentó la presión y el Stoke se encerró atrás, satisfecho con el punto. Y de repente, los «potters» se encontraron con el gol.
 
Pennant lanzó una falta y la defensa del Tottenham se mostró dubitativa. Jerome no podía creer su suerte. Sin embargo, el equipo de Redknapp no bajó los brazos y Van Der Vaart salvó un punto. El final fue apasionante. El Tottenham fue con todo arriba, pero ya no logró el segundo gol que necesitaban. El partido contra el Chelsea llega en el peor momento.
 

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Ilie Oleart