Una vez más, y ya van muchas, Sir Alex Ferguson sorprendió a propios y extraños. Se antojaban numerosos cambios respecto al 0-5 ante el Bolton porque el domingo el United se enfrentará al Chelsea, pero pocos podían prever ochos cambios respecto al once del pasado sábado. Además, seis de ellos debutaron como titulares en la presente temporada. Un gesto que denota algo de soberbia a pesar de tener un partido importante este domingo, máxime teniendo en cuenta que el Manchester debutaba en la Champions League a domicilio y en un estadio nada sencillo como el del Benfica.

 

Pero vayamos con los cambios. Lindegaard sustituyó a De Gea en la portería, Evans a Phil Jones en el centro de la zaga, Fletcher y Carrick ocuparon el centro del campo en detrimento de Anderson y del lesionado Cleverley, Valencia ocupó el lugar de Nani, Park el de Ashley Young (que no fue ni convocado), y Giggs el de Javier «chicharito» Hernández, aunque el veterano jugó de media punta (lugar habitual de Rooney) para que Rooney se situara como delantero centro. Sorprendió el once titular, no tanto por el excelente rendimiento ofrecido hasta ahora por Young, Anderson, Nani y compañía, sino más bien por la falta de rodaje de Fletcher, Carrick o Giggs. Sin embargo, era una alineación que cuadraba perfectamente con los planteamientos de la temporada pasada cuando el United jugaba a domicilio en la Champions League. La idea de Ferguson era regalar el balón al Benfica para hacer daño al contraataque, pero la estrategia le salió regular y podría haberle salido fatal.

 

Los portugueses dominaron la primera parte a su antojo. La pasividad mostrada por los ingleses permitió que Gaitán ejecutara un envío kilométrico con el exterior que controló de espaldas Cardozo. Éste se revolvió velozmente dejando atrás a un Evans algo lento y disparó con la diestra de forma inapelable sin que Lindegaard pudiera hacer nada para evitar el 1-0.

 

El gol no cambió la dinámica del partido. El Benfica siguió dominando aunque sin crear ocasiones claras de gol. Olía a que el marcador no se iba a mover antes del descanso, pero entonces apareció Giggs, que cumplirá 38 años en noviembre. El galés recibió un pase de Valencia fuera del área y soltó un zurdazo que se coló por la escuadra derecha. El gol sitúa a Giggs como el jugador de más edad en anotar un gol en la Champions League. Además, fue su primer gol esta temporada y ya van 22 consecutivas marcando.

 

Así se llegó al descanso, con un empate que se antojó justo, ya que los portugueses, pese a dominar, no lograron profundidad con su juego ni ocasiones claras más allá del gol de Cardozo.

 

La segunda mitad empezó algo mejor para los «red devils» que, pese a no llevar a cabo ningún cambio, aplicaron más intensidad al juego. Sin embargo, no lograron tomar el control del partido en ningún momento, ni tan siquiera cuando Javier «chicharito» Hernández y Nani sustituyeron a Valencia y Fletcher a falta de veinte minutos. De hecho, las ocasiones más claras las tuvo el Benfica y, en concreto, Nolito. El español, exjugador del Barcelona B, entró al campo a falta de 35 minutos en detrimento de Rubén Amorim, el único jugador portugués sobre el campo por parte del Benfica, y solo una intervención espectacular de Lindegaard evitó que marcara tan solo diez minutos después haber saltado al terreno de juego. Tras la parada del portero danés del United, Giggs tuvo una excelente oportunidad, pero Artur, portero del Benfica, evitó el gol.

 

El partido estaba destinado a acabar en un empate que parecía satisfacer a ambos bandos, pero Nolito pudo evitarlo a falta de tres minutos, cuando, tras varios rebotes, se encontró en un mano a mano con Lindegaard, pero fue incapaz de superar al danés.

 

El Manchester United mostró esta noche más carencias que virtudes. Se notó que Carrick y Fletcher todavía no tienen ritmo de partidos, lo mismo que les sucede a Valencia y a Park, pudimos comprobar que con casi 40 años se puede jugar muy bien al fútbol y, sobre todo, que De Gea tiene en Lindegaard a un duro rival para la portería.

 

El próximo encuentro del Manchester United tendrá lugar el domingo en Old Trafford ante el Chelsea. Como siempre, es imposible adivinar la alineación que planteará el siempre imprevisible Ferguson, pero sí sabemos una cosa: Berbatov no será titular. El búlgaro estuvo hoy en el banquillo por enésima vez, sin tan siquiera jugar un minuto. Toda la prensa inglesa está esperando a que estalle el delantero. Se aceptan apuestas sobre cuánto tardará.