Partidazo en White Hart Lane. Los dos equipos salieron sin esconder nada, pues sabían que los 3 puntos eran vitales para sus respectivos objetivos: el Arsenal para acercarse al United y el Tottenham para alcanzar al Manchester City en la cuarta plaza que da acceso a la Champions, una competición que le ha dado muchas alegrías a los «spurs» este año.
En el Tottenham sorprendió la titularidad de Pavlyuchenko, pues ante la calidad del centro del campo «gunner» parecía lógico poner un hombre más en el medio del campo, pero Redknapp se la jugó con dos delanteros. Van der Vaart jugó en la media punta, con libertad, y por detrás suyo se situó Modric junto a Huddlestone. Redknapp daba a entender con este once que iba a por todas desde el minuto 0. Por su lado, Wenger nos sorprendió con la suplencia de Wilshere en el centro del campo en beneficio de Diaby, probablemente para que estuviera más atento de las subidas de Luka «el Cruyff de los balcanes» Modric. Por lo demás, todo igual: Song en el mediocentro, Fabregas en la media punta con libertad, Walcott y Nasri por las bandas y Van Persie en punta. A destacar la vuelta al once del fundamental Sagna en el lateral derecho. Las alineaciones pronosticaban lo que acabó siendo el partido, un espectáculo.
Nada más comenzar, Fábregas regaló a Walcott y a los espectadores un pase en profundidad para el velocista Walcott, que éste aprovechó para batir a Gomes. Dos minutos más tarde, en el 7, empezó el recital de Van der Vaart con un control magistral y un gran disparo después de un maravilloso pase bombeado de Corluka. Cinco minutos más tarde, Nasri recibió un balón tierno en la frontal que, con un fuerte disparo y con algo de suerte tras rebotar en Dawson, acabó en el fondo de las mallas. En resumen, 1-2 después de 12 minutos. El que llegara tarde a White Hart Lane se quería morir.
El partido siguió con la misma intensidad, pero con menos acierto de cara a gol, pues era imposible. Hasta que en el minuto 40, cerca del descanso, Walcott recibía el balón después de un rebote, centraba perfecto para el remate de Van Persie, que salvaba Gomes en primera instancia, pero que dejaba el balón a un metro de la portería para que el propio Van Persie la empujara. Parecía que aquí iba a acabar la locura… pero no. A falta de un minuto para el descanso, Tom «a trallón» Huddlestone empaló, con la izquierda y desde fuera del área, un balón que salía rechazado del área, para acabar en la portería. Aquí acabaron probablemente los 45 minutos más intensos de las últimas semanas aunque se echó de menos que Bale contribuyera al concierto con alguno de los solos a los que nos tiene acostumbrados por la banda izquierda. El galés acabó lesionado la primera parte y tuvo que ser sustituido.
La segunda parte, por suerte para los aficionados, fue más de lo mismo. Una intensidad brutal, aunque sin el acierto que hubo en la primera mitad de cara a puerta. Wilshere entró por Diaby, Kaboul por Corluka y Lennon por Bale. Mucha lucha y poca precisión en esta segunda parte, en la que Van der Vaart dio un recital de calidad, de lucha y de sangre fría. En el minuto 70, Lennon fue derribado claramente por Szcesny dentro del área. Van der Vaart marcó sin problemas el penalti, engañando a Szczesny. Pero el recital de Van der Vaart no acabó con el penalti, pues en la jugada siguiente un taconazo increíble habilitó a Kaboul, que la puso perfectamente para Modric, que disparó centrado para que Szczesny se luciera. Fue la última ocasión clara del Tottenham, que acabó sufriendo las acometidas del Arsenal liderado por un Fabregas poco preciso de cara al gol.
Lo del Arsenal comienza a ser de diván. Parece que el equipo no aprendió nada del batacazo de Newcastle, cuando dominaba 0-4 y acabó empatando. En esta ocasión, con 1-3 a favor no fue capaz de dormir el partido, dejó jugar al Tottenham y la calidad de los «spurs» salió a flote. Es hora de que Wenger tome nota de algunas cosas: al ver a Sagna uno se da cuenta del daño que hace Eboue (no a las defensas rivales, ¡a su propio equipo!), Nasri no puede seguir jugando en la banda, el Arsenal lo necesita en el medio, con Fabregas y Wilshere, en la banda está muy limitado por su falta de velocidad.
En el Tottenham, satisfacción a medias. Tienen equipo y juego para estar con los grandes y van quintos. La diferencia de puntos está en la defensa, aunque la mejoría del lateral izquierdo, Assou-Ekotto, es notable, pero Gallas desentona, y Gomes da una constante sensación de inseguridad. Este Tottenham puede aspirar a todo si mantiene el grupo actual y consigue el fichaje de un central de garantías.
Por último, a destacar el buen hacer del árbitro, Martin Atkinson, que llevó el partido a la perfección. No hubo polémicas y apenas interrupciones en el partido, lo que favoreció el espectáculo.
Tottenham: Gomes; Corluka (Kaboul, 45), Gallas, Dawson, Assou-Ekotto; Huddlestone, Modric, Van der Vaart; Bale (Lennon, 45), Pavlyuchenko (Sandro, 78), Crouch.
Arsenal: Szczeny; Sagna, Djourou, Koscielny, Clichy; Song, Diaby (Wilshere, 52), Fabregas; Walcott (Arshavin), Van Persie, Nasri (Bendtner, 82).
Goles: 1-0 Walcott (5), 1-1 Van der Vaart (7), 1-2 Nasri (12), 1-3 Van Persie (40), 2-3 Huddlestone (44), 3-3 Van der Vaart (72).