Bastan dos minutos con Gustavo Poyet para comprender por qué le apodan «la radio». En cuanto se sienta junto a nosotros, comienza a hablar sin parar, concatenando tema tras tema, hilvanando sus razonamientos de forma que al entrevistador le resulta difícil intercalar las preguntas. Con Gus Poyet uno no habla de lo que quiere, sino de lo que le dejan. Pero en todo caso, siempre tiene que ver con fútbol, una pasión que sigue corriendo por las venas del uruguayo en su nueva etapa como técnico.
Pocos aficionados al fútbol han olvidado su etapa como jugador. Tras una primera mala experiencia en Europa, en el Grenoble, donde solo permaneció un año, regresó a Uruguay. Solo unos meses después surgió la oportunidad de recalar en el Zaragoza, de la mano de Ildo Maniero. Allí, Poyet se convirtió en un ídolo, y conquistó una Copa del Rey y una Recopa de Europa. Tras siete años, hizo las maletas y se fue a Inglaterra. Recaló en el Chelsea y posteriormente en el Tottenham.
Tras colgar las botas, fue segundo entrenador de Swindon, Leeds y Tottenham, tras la llegada al club de Juande Ramos. En noviembre de 2009 emprendió su primera experiencia como técnico en el Brighton & Hove Albion y las cosas no le han podido ir mejor. Tomó las riendas del club cuando se encontraba en posiciones de descenso de la League One y enderezó el rumbo del equipo, que acabó en una más que digna 13ª plaza. La temporada siguiente, la 2010-11, se proclamó campeón de liga y logró el ascenso al Championship. En esa, su primera temporada completa como técnico, recibió el premio al técnico del año. Esta temporada se enfrenta al mayor reto de su corta carrera como entrenador: el ascenso a la Premier League.
Escucha la entrevista íntegra que le realizó La Media Inglesa.