Cesc Fábregas ha admitido que se siente frustrado en el Arsenal, pero insiste en que no presionará para ser traspasado al Barcelona.
Este martes, su compañero Bacary Sagna afirmó que Fábregas había decidido volver al club catalán, en el que se formó antes de llegar a Londres en 2003. Sin embargo, Fábregas ha insistido en que no buscará el traspaso.
Fábregas dijo: «El Barcelona es el mejor equipo del mundo y estar allí garantiza títulos. Pero estoy en deuda con el Arsenal. Cualquier jugador que diga que no se siente frustrado por no ganar títulos miente. Soy ambicioso. [Pero] no he hablado con el entrenador. Es el jefe, toma las decisiones y no sé si quiere venderme o no».
«Tengo valores y después de todo lo que he hecho en ocho años aquí no diré una palabra que estropee todo. Siempre he actuado con discreción», ha añadido. «Cada uno ve las cosas de forma diferente pero en estas decisiones, no todo depende del jugador».
«Estoy muy feliz en el Arsenal. Pero no diré que no a nadie porque nunca se sabe lo que puede pasar en el futuro», ha rematado.
El Barça ha intentado fichar a su exjugador los dos últimos veranos pero ha fracasado. Según las noticias que llegan desde España, los campeones de Europa tendrían que pagar unos 40 millones de euros para fichar a Fábregas, que es el recambio natural de Xavi, que cumplió 31 años en enero.
A pesar de que Fábregas reconoció su frustración por la sequía de títulos del Arsenal, dijo que creía que el club tenía recursos para acabar con ella. «Existe un buen equipo y un buen entrenador, y una de las aficiones más fieles de Europa. Un día podemos ganar un trofeo importante». Quizás él ya no esté para presenciarlo.