Ilie Oleart

Fábregas está en manos de Nasri

Arsène Wenger le abrirá las puertas del Emirates a Cesc Fábregas siempre y cuando Samir Nasri se quede en el Arsenal. Al francés le queda un año de contrato y sigue sin renovar. El Manchester United se ha interesado en el francés. Por otro lado, Phil Jagielka podría ser la respuesta a los problemas defensivos de los «gunners».

 
Cesc Fábregas tendrá las puertas abiertas para abandonar el Arsenal este verano pero solo si Arsène Wenger convence a Samir Nasri de permanecer en el club. El técnico estará más abierto a escuchar ofertas por su capitán si convence al centrocampista francés de firmar un nuevo contrato.
 
Wenger ha identificado a Phil Jagielka, el defensa del Everton, y no Gary Cahill, del Bolton, o Christopher Samba, del Blackburn Rovers, como el principal candidato para solventar sus recurrentes problemas en el centro de la defensa. Wenger ya intentó fichar a Jagielka en enero.
 
El Barcelona sigue sin presentar una oferta oficial por Fábregas, aunque los dirigentes del Arsenal son conscientes de que existe una oferta de 27 millones del Barcelona desde hace tiempo.
 
Aunque el club catalán volverá a la carga por Fábregas a lo largo del verano, la prioridad de Wenger es atar al centrocampista frances Samir Nasri, de 23 años, al que solo le queda un año de contrato, mientras que el de Fábregas llega hasta 2015. El técnico está preparando a conciencia ante una temporada que será crucial para el Arsenal, y para su propia carrera, y que podría ser la séptima consecutiva sin títulos.
 
Wenger es consciente de que Fábregas, que está de vacaciones en Bali antes de volver al hogar familiar en Barcelona la semana que viene, no se adapta fácilmente al 4-4-2 y el técnico está decidiendo todavía qué hacer con la estructura y miembros del equipo.
 
El técnico francés sabe que Fábregas, al que fichó con 16 años en 2003, está decidido a irse a su club de origen a pesar de que no ha presentado una petición formal de traspaso.
 
Tras la excelente temporada de Nasri, que solo decayó tras la decepción provocada por la derrota en la final de la Carling Cup ante el Birmingham City, Wenger está dispuesto a ofrecerle un contrato más lucrativo que podría alcanzar las 100.000 libras por semana, con el objetivo de impedir que se vaya al Manchester United, que encabeza la larga lista de clubes interesados en el francés.
 
Aunque Wenger no está tratando de deshacerse de Fábregas, no se opone totalmente a su marcha, aunque sabe que no sucederá hasta que se aclare el futuro de Nasri, debido a las señales negativas que transmitiría a los rivales y aficionados del Arsenal.
 
Si Nasri se va, Wenger tratará por todos los medios de retener a Fábregas. Pero si puede convencer a Nasri de quedarse, la fluida relación profesional que mantienen Ivan Gazidis, el director ejecutivo del Arsenal, y Sandro Rosell, el presidente del Barcelona, podría resultar decisiva.
 
Ambos trabajaron juntos en comités de la FIFA, la UEFA y la Asociación de Clubes Europeos y en alguna ocasión han comido juntos.
 
Peter Hill-Wood, presidente del Arsenal, confirmó la semana pasada que los ganadores de la Champions League han reiterado su interés por el jugador recientemente.
 
Por otro lado, Wenger sigue negociando con el Lille por Gervinho, el delantero marfileño que marcó 15 goles la pasado temporada con el club francés, que hizo el doblete en Francia. Si ficha por el Arsenal, el jugador, de 24 años, que disputó la pasada Copa del Mundo con su país, podría costar unos 12 millones de libras.
 
Finalmente, Cahill y Samba siguen en la órbita de Wenger al igual que el belga de 20 años Eden Hazard, compañero de Gervinho en el Lille. En el capítulo de salidas, Nicklas Bendtner, Tomas Rosicky, Denílson y Carlos Vela podrían abandonar el Emirates como parte del proceso de reestructuración.
 

Sobre el autor

Ilie Oleart