Sir Alex Ferguson ha declarado que el Manchester United tiene argumentos para batir al Barcelona en Wembley el 28 de mayo en la final de la Champions y ha añadido que no teme que se repita la historia de hace dos años en Roma cuando su equipo perdió ante los catalanes por 2-0.
Ferguson cree que el papel del United en 2009 fue mucho mejor de lo que se dijo y que el Barcelona debe tener cuidado con el ataque del equipo inglés. Sin embargo, el escocés reconoció que «ahora el Barcelona es el grande. Todos han reconocido que es un gran equipo pero el Manchester United está en la final y tenemos jugadores que pueden crear peligro a cualquier equipo. Esperemos que sea una final fantástica».
El escocés recordó que «en aquella final empezamos muy bien y encajamos un gol absurdo. Tras eso, el Barcelona mantuvo la posesión, como suelen hacer». Pero recordó que «la gente suele olvidar que fallamos muchas oportunidades en ese partido. Incluso antes del 2-0 fallamos tres ocasiones. Lo que tenemos que hacer es encontrar una solución para el triángulo Xavi-Messi-Iniesta.»
Ferguson se defendió de las críticas que han recibido este año: «Todo el mundo dice que no tenemos tan buen equipo, pero hemos marcado más goles que nadie. Nuestra racha en casa es impecable. Estamos imbatidos en Europa. Estamos en la final de la Champions League y estamos a un punto de la Premier».
El técnico del United volvió a mostrar su respaldo a Carlo Ancelotti, que está a punto de ser despedido después de que el Chelsea fuera superado por el United en la Champions y la Premier. «No solo me sorprendería, sería un choc», dijo.
«Este es un sector que me sorprende a veces. Es un hombre que ha ganado dos Copas de Europa y ha ganado varios Scudettos. El año pasado logró el doblete en Inglaterra. ¿Por qué se le cuestiona? No lo entiendo. Es triste que se vaya porque es una gran persona con una gran dignidad».
Ferguson también reveló que se sintió obligado a inclinarse ante la grada de Old Trafford después de la victoria ante el Chelsea «porque durante los últimos 15 minutos nuestros aficionados estuvieron fantásticos, cuando el equipo más lo necesitaba tras recibir el gol».