Alvaro Oleart

Historia del Football (II): La profesionalización del fútbol

Tras el nacimiento de la FA en 1863, el fútbol comenzó a atraer a multitud de aficionados ya desde sus albores, lo que hizo inevitable que nacieran negocios alrededor del fútbol. En 1885, la FA legalizó el profesionalismo en el fútbol, y apenas unos años después, en 1888, nació la primera competición profesional, la Football League.

 
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El nacimiento del Football como negocio
 
Los clubes de fútbol y la FA nacieron del intrínseco deseo de jugar al deporte del fútbol, sin ningún tipo de ánimo de lucro. El fútbol no se consideraba como un negocio, sino como una diversión. De hecho, hasta las mujeres acudían a los estadios, a veces incluso en masa: el Preston North End se vio obligado a retirar el habitual «Ladies Free» («Damas gratis») en 1885, cuando 2.000 mujeres aparecieron en un partido. Otro ejemplo del éxito del fútbol fue que, tan pronto como en 1887, el Sheffield Wednesday tuvo que instalar largas vallas de hierro para evitar las habituales invasiones de campo, provocadas por el exceso de público en los estadios.
 
Sin embargo, las multitudes que atraía el juego provocó la aparición de personas que buscaban un rendimiento económico. En sus inicios, desde la creación de los primeros clubes hasta la fundación de la Football League en 1888, los partidos de fútbol eran promocionados por los dueños de los bares, que esperaban vender cervezas y snacks. Esas ventas y las apuestas eran los principales negocios que se llevaban a cabo en el mundo del fútbol.
 
Pese a la falta de profesionalización, ya desde los inicios del fútbol, los jugadores empezaron a cobrar, aunque ilegalmente. En algún momento entre 1857 (año en que se creó el primer club de fútbol) y 1885, nació la profesión de futbolista. En ese intervalo de tiempo se creó la primera competición oficial de fútbol de la historia, la FA Cup, creada en 1871 tras la propuesta del secretario de honor de la FA, Charles Alcock. Hoy en día, más de 700 equipos que participan en esta competición. En su primera edición, en la temporada 1871-72, participaron 15 equipos. El campeón de esa primera FA Cup fue el Wanderers, que batió al Royal Engineers por 1-0 en la final, que se celebró el 16 de marzo de 1872.
 

En 1885, se presentaron 2.000 mujeres para ver al Preston North End

En 1871 se creó la primera competición oficial de fútbol, la FA Cup

A pesar de su prestigio ya desde sus orígenes, la FA Cup no fue capaz de atraer a demasiados clubes a causa de la falta de dinero, pues el fútbol no estaba profesionalizado. Los clubes preferían organizar amistosos contra otros clubes, siendo para ellos más cómodo que competir desinteresadamente en una competición organizada por la FA en la que no podían elegir a sus rivales.
 
La postura de los clubes cambió el 20 de julio de 1885, cuando la FA legalizó el profesionalismo en el fútbol. Con la posibilidad de ganarse la vida jugando al fútbol, tanto jugadores como directivos estaban más predispuestos a organizar otra competición además de la FA Cup.
 
El 2 de marzo de 1888, William McGregor, un directivo del Aston Villa, propuso al resto de miembros de la junta de su club, así como a las directivas de Blackburn Rovers, Bolton, Preston North End, West Bromvich Albion y Stoke City, la creación de una competición de liga.
 
La idea fue vista con buenos ojos por parte de todos los clubes, que vieron en la creación de una liga la posibilidad de lograr unos ingresos periódicos, pues la asistencia al estadio dependería más de la competición en juego que del rival, al contrario de lo que sucedía hasta entonces. Los amistosos acabaron sabiendo a poco. Además, la posibilidad de enfrentarse cada semana a los mejores clubes de Inglaterra era más que atrayente.
 
Así, en 1888-89 los doce equipos integrados en la Football League, todos situados en la mitad norte de Inglaterra, disputaron la primera edición de la liga. Además de los seis equipos mencionados antes, se sumaron otros seis: Everton, Burnley, Accrington, Wolverhampton Wanderers, Notts County y Derby County. 
 
La primera temporada oficial de la historia del fútbol
 
Crear una competición de la nada no es algo sencillo, como quedó patente en la primera temporada de la Football League. Se estableció que cada equipo jugarían dos partidos contra cada club, uno como local y otro a domicilio. El ganador de la competición sería aquel equipo que lograra más victorias. Sin embargo, quedaron varios interrogantes en el tintero. En caso de empate, ¿habría prórroga, o simplemente equivaldría a una derrota? ¿Existiría la posibilidad de que algún equipo fuera eliminado de la liga? En tal caso, ¿cuántos? Y, ¿qué equipos los reemplazarían? Ante todas estas dudas, los dirigentes de la Football League echaron marcha atrás y, con la temporada ya iniciada, decidieron cambiar las reglas. Las victorias valdrían dos puntos, los empates uno, y las derrotas ninguno. Es decir, el campeón ya no sería aquel que más victorias cosechara, sino aquel que más puntos lograra. Respecto al descenso, no se abordó el tema hasta una vez finalizada la temporada.
 
Preston North End, 1888-89El resultado de aquella primera campaña fue muy positivo. La asistencia media por partido en aquella lejana primera temporada de la Football League fue de 4.600 espectadores, una cifra nada despreciable. El Preston North End se hizo con el título de forma apabullante, acabando la temporada invicto y logró también el título de la FA Cup en lo que suponía el primer doblete de la historia del fútbol. En lo concerniente al descenso, se decidió que los cuatro últimos clasificados no serían reelegidos para jugar en la liga la siguiente temporada, sistema utilizado durante las primeras cinco campañas. Los descendidos en aquella primera temporada fueron el Burnley, el Derby County, el Notts County y el Stoke City.
 
Tal fue el éxito de la primera edición de la Football League que la siguiente campaña, la 1889-90, apareció un rival: la Football Alliance. Esta liga la disputaron en su origen también doce equipos, situados también todos en la mitad norte de Inglaterra. Se trataba de un competidor directo para la Football League, que sin embargo englobaba a los mejores equipos. La más clara muestra de ello fue la victoria del Stoke City, el colista de la primera campaña de la Football League, en la temporada 1890-91 en la Football Alliance, en la que sería su única participación en esta liga. Ante la diferencia de nivel entre las dos ligas, ambas decidieron fusionarse y crear una única liga bajo el nombre original de Football League, con dos divisiones, la First y la Second Division. Esta fusión se produjo en la temporada 1892-93, cuando la mayoría de equipos de la Football Alliance se integraron en la Second Division, el segundo escalón de la Football League.
 
Éxito total de la Football League
 
Si en la primera temporada de la Football League, la 1888-89, la asistencia media en la First Division fue de 4.600 espectadores, en la campaña 1913-14 la media era ya de 23.000. En el Manchester City-Arsenal de 1935, fueron 77.582 los espectadores presentes, mientras que, aunque fuera de la Football League, pero también en tierras británicas, el Rangers-Celtic disputado el 2 de enero de 1939 congregó a 118.567 espectadores.
 
El fútbol no tardó en triunfar como negocio de masas. Todos se beneficiaron de este fenómeno. Los dueños de los clubes cosechaban beneficios (aunque la FA impedía que pudieran retirar más del 7’5% de beneficio sobre su inversión), los jugadores cobraban sueldos relativamente altos y los aficionados se divertían entre cervezas y amigos. 
 
David JackEl auge del fútbol se reflejó en los salarios de los jugadores y en las cantidades invertidas en los traspasos. Si los salarios de los futbolistas en 1888-89 eran poco más que un sobresueldo, en 1933 su salario medio rondaba las 4 libras por semana, mientras que el salario ordinario de un trabajador estaba sobre 2,50 o 3 libras por semana. Los jugadores de fútbol ya ganaban más dinero que los trabajadores ordinarios, una tendencia que se acrecentaría con el paso del tiempo.
 
En cuanto a los traspasos, las cifras incrementaron rápidamente. Si en 1893 el récord era de 100 libras y en 1904 de 700, en 1922 el récord ya estaba en 5.000 libras, cuando el Sunderland esa cantidad por el inglés Syd Puddefoot, procedente del West Ham. Tan solo unos años después, en 1928, el récord ascendió hasta las 10.890 libras que invirtió el Arsenal en David Jack, procedente del Bolton. 
 

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