Imitando a la absoluta, la selección inglesa sub-20 fue incapaz de cumplir con las expectativas puestas en ella. Conor Coady (jugador del Liverpool y capitán de la selección) de cabeza en el minuto 41 y Luke Williams (jugador del Middlesbrough) en el 52 pusieron el debut de Inglaterra sub-20 muy de cara.
Con 2-0 en el marcador, los ingleses no pudieron contener a la selección iraquí, que redujo distancias a través de Ali Faez en el minuto 75 desde el punto de penalti, y empató el encuentro en el 93 gracias a un gol de Ali Adnan.
Esto supone un traspiés muy importante para los ingleses, que ahora se enfrentarán a Chile, que ganó 2-1 a Egipto y es uno de los favoritos del torneo. De obtener un mal resultado contra los sudamericanos y los egipcios, la selección sub-20 dirigida por Peter Taylor seguiría la senda de la selección sub-21 de Stuart Pearce, que fracasó estrepitosamente en el reciente Europeo de la categoría, en el que Inglaterra quedó eliminada tras la fase de grupos. Aún así, Inglaterra cuenta con Ross Barkley y James Ward-Prowse, dos jugadores de los que se espera mucho.