Ander Iturralde

Jackett y Ricketts liderarán a los Wolves

El nuevo entrenador Kenny Jackett y el versátil defensa Sam Ricketts, que ha sido nombrado nuevo capitán del equipo tras llegar del Bolton hace unas semanas, serán los encargados de guiar al Wolverhampton hacía el ascenso, después de un par de infernales años en Molineux, donde se han vivido dos descensos consecutivos, que han dejado al equipo en League One. Pero parece que al fin los Wolves van por buen camino.

 
La directiva de los Wolves ha tomado unas decisiones horribles en estos dos últimos años. Desde que ascendieron a la Premier League en el año 2009 se mantuvieron con recursos limitados pero un gran proyecto detrás y además con un excelente entrenador como Mick McCarthy. Sin embargo, todo se vino todo abajo. Ahora con Kenny Jackett, un hombre con las ideas muy claras, experiencia entrenando a jóvenes promesas y grandes dotes de liderazgo, y también con el nuevo capitán Sam Ricketts, contratado especialmente por el propio Jackett (que ya le había fichado en el pasado procedente del Telford United, para el Swansea City), el equipo espera volver a los más alto.
 
La debacle
 
Vamos a comenzar por el principio de toda esta historia. La debacle empezó el 12 de febrero de 2012 cuando los Wolves perdieron en su estadio por 1-5 ante el West Bromwich en el derbi local. Al día siguiente, Mick McCarthy, que había estado dirigiendo al equipo durante seis años, en los que consiguió ascender al club a la Premier League y mantenerlo ahí tres temporadas, fue despedido.
 
El problema fue que el director ejecutivo Jez Moxey y el presidente Steve Morgan cesaron a McCarthy sin tener una idea clara de quién sería su sustituto. El primer entrenador al que le propusieron dirigir al equipo fue al ex del West Ham, Alan Curbishley, que declinó la oferta. Después sonaron los nombres de Rafa Benítez, Gus Poyet, Brian McDermott y Walter Smith con los que no se llegó a nada concreto. Y finalmente fue el actual técnico del Hull City, Steve Bruce, quien aceptó la propuesta. Pero cuando ya lo tenían todo acordado, Moxey y Morgan se terminaron echando atrás y decidieron nombrar al asistente de McCarthy, Terry Connor, una decisión que les terminó de hundir.
 
En los días siguientes, Steve Bruce criticó duramente a la directiva, diciendo que no habían sido profesionales en su manera de manejar las cosas. Por su parte, Terry Connor se convirtió, tras Paul Ince, en el segundo entrenador de raza negra en dirigir en la Premier League. Connor realizó un paupérrimo papel manejando al equipo, sumando cuatro empates y nueve derrotas en trece partidos. Eso evidentemente desembocó en el descenso al Championship.
 
Aquel verano prescindieron de Connor como técnico, aunque siguió en el club de nuevo como asistente, aunque solo aguantaría hasta la cuarta jornada de liga. Como técnico contrataron al noruego Stale Solbakken, que tenía una gran reputación de su etapa al frente del Copenhague danés, pero que en su trabajo más reciente, dirigiendo al Colonia alemán, dejó mucho que desear. Su fichaje sorprendió a propios y a extraños.
 
El descenso al segundo escalón del fútbol inglés no impidió que fuese un verano entretenido en Molineux. Llegaron los fichajes nacionales de Jamie Tank y Frank Nouble, y luego los internacionales de Tongo Doumbia, Razak Boukari y Bakary Sako procedentes de Francia, Georg Margreitter de Austria, el islandés Bjorn Sigurdarsson de Noruega y el polaco Slawomir Peszko, al que Solbakken había entrenado la anterior temporada en el Colonia. En este grupo futbolistas se gastaron unos 13 millones y medio de libras, y con las salidas de jugadores, entre los que destacaron los nombres de Steven Fletcher o Matt Jarvis, recaudaron cerca de 27 millones.
 
La jornada inaugural fue un fiasco para Solbakken y compañía, tras perder por la mínima en Elland Road ante el Leeds United. En la segunda jornada, vencieron al Barnsley con un resultado convincente de 3-1. El primer tramo de temporada fue aceptable, pero tras una bonita tarde de 6 de octubre en la que ganaron por 0-1 al Blackburn Rovers, pocos se podían imaginar que los de la vestimenta naranja y negra no volverían a ganar un partido hasta el 1 de diciembre, cuando vapulearon al Bristol City por 1-4.
 
En el último mes del año resurgieron discretamente ganando tres partidos de seis disputados. Pero no fue suficiente debido a la pésima racha que experimentaron en la estación otoñal. Con el comienzo del nuevo año, las cosas volvieron a torcerse, empezando por una derrota el primer día del año en casa del Crystal Palace. Los malos resultados y la infame imagen del equipo le acabaron costando el puesto a Solbakken junto con todo su staff técnico que fueron oficialmente destituidos el 5 de enero tras caer eliminados aquel día en la FA Cup ante el Luton de la 5ª división.
 
Con la marcha del noruego, la incertidumbre se adueñó de nuevo de Molineux. Pero supieron reaccionar rápido y dos días más tarde contrataron al entrenador del Doncaster Rovers de League One, Dean Sounders, que estaba haciendo una magnifica labor con los Rovers. La decisión parecía acertada. Pese a ello, el galés no comenzó del todo bien empatando en su debut y haciendo lo propio en su segundo encuentro. Saunders no lograba enderezar el rumbo de los «lobos», aunque al menos el 12 de febrero llegaba una buena noticia, la cesión del defensa letón del Reading, Kaspars Gorkks, para intentar reparar los problemas de la zaga.
 
El 4 de marzo al fin llegó la primera victoria de Dean Sounders al frente del equipo cosechando un fantástico triunfo en The Den ante el Millwall. Por desgracia, una semana después regresaron a la senda de la derrota en Nottingham, algo que de nuevo echaba por tierra el deseo de salir del descenso. Otra semana más tarde, regresaban las esperanzas de salvarse con un fenomenal triunfo, con remontada incluida, contra el Bristol City. La jornada posterior volvieron a ganar, en esta ocasión a un Middlesbrough que llevaba una serie de jornadas en caída libre. Dos días después, el lunes de pascua, los Wolves visitaron al Birmingham en St Andrew’s para disputar uno de los derbis de las Midlands. Frente a los Blues comenzaron el partido de manera espectacular poniéndose 0-3 a la conclusión del primer tiempo. Pero en la segunda parte estuvieron a punto de echar por tierra la victorias después de que el Birmingham fuera capaz de marcar dos goles.
 
Las tres victorias les habían sacado del descenso, pero las cosas se volvieron a torcer con un derrota en Bolton, y acto seguido otra ante un rival directo como era el Huddersfield. Siete días más tarde, contra todo pronóstico ganaron a un Hull City que se estaba jugado el ascenso a la Premier League. Pese al triunfo, la salvación se antojaba cada vez más difícil. Los Wolves cayeron en The Valley frente al Charlton Athletic y aquello les dejaba tan solo un hilo de esperanza para poder lograr la salvación.
 
Esa esperanza pasaba por ganar al Burnley. Sin embargo, los Clarets se pusieron 0-2 a los 53 minutos de juego. En el 88, el futbolista cedido por el Wigan, Nouha Dicko anotaba un gol que hacía mantener la esperanza pero los Wolves no fueron capaces de marcar un segundo tanto y quedaron virtualmente descendidos.
 
En la jornada final, los «lobos» visitaban el feudo del Brighton, con la moral por los suelos y la convicción de que poco quedaba por hacer. Las «gaviotas», repletas de suplentes, ganaron cómodamente y sellaron el segundo descenso consecutivo de los Wolves.
 
Aunque Dean Saunders había hablado sobre su deseo de reconstruir el equipo en League One, fue despedido de su cargo tan solo tres días tras concluir la temporada. Steve Morgan y Jez Moxey tenían, una vez más, que intentar reconstruir el equipo, fichando a un entrenador capaz de lograr el ascenso. De momento, parece que han acertado de pleno.
 
Jackett y Ricketts
 
Kenny Jackett es un técnico con mucha experiencia en la Football League y está más que capacitado para llevar acabo el trabajo de resurgir al Wolverhampton. Sus trabajos con el Swansea y el Millwall le avalan. Jackett, nacido en Watford, comenzó su andadura como futbolista en el año 1980 con el club de su ciudad natal, con el que estuvo los diez años que duró su carrera. Seis años después empezó como entrenador en el mismo Watford, aunque solo dirigió a los Hornets durante una temporada.
 
No volvió a entrenar hasta pasados siete años (aunque fue asistente en el QPR durante tres de esos siete años años) cuando en el mes de abril tuvo la oportunidad de entrenar a un Swansea que se encontraba en la antigua Third Division (League Two) en una dramática 21ª posición. Los «cisnes» habían cesado al técnico galés Brian Flynn, pese a que salvó al equipo la temporada anterior del descenso y de desaparecer como club. Jackett realizó un fantástico trabajo esa campaña en la que además de evitar el descenso dejó al equipo en una espectacular 10ª posición.
 
La siguiente campaña se superó a si mismo ascendiendo al equipo a League One. La temporada posterior al ascenso, en el día de año nuevo se colocaron como líderes de la competición. Sin embargo, en la segunda mitad se vinieron abajo y terminaron la campaña en sexto lugar que daba acceso a los play-offs de ascenso. Llegaron a la final, donde finalmente cayeron derrotados en los penaltis frente al Barnsley. Tras la conclusión del curso, Jackett completó la licencia UEFA Pro.
 
Su temporada final en Swansea no fue muy exitosa. No empezaron con muy buen pie y no conseguían tener regularidad. Finalmente el 15 de febrero de 2007 dimitió de su cargo de entrenador declarando que «ya no sentía el cien por cien de apoyo de toda la gente conectada al club, desde los aficionados, los medios locales, los jugadores y la junta directiva». Ni siquiera había pasado un mes y fue contratado por el Manchester City para hacerse cargo del equipo reserva. En noviembre de aquel año dejó su cargo con los Citizens y firmó por el Millwall que buscaba sustituto al ex técnico Willie Donachie.
 
Terminó su primer año en Londres en el décimoseptimo puesto de la clasificación. Al año siguiente guió a los Lions a la final de los play-offs donde volvió perder, en esta ocasión ante el Scunthorpe United. La campaña posterior se quedaron a un solo punto del ascenso directo, algo que les mandaba por segundo año consecutivo al play-off si querían alcanzar el segundo escalafón del fútbol inglés. Esta vez consiguieron alzarse con el triunfo en Wembley venciendo al Swindon Town por la mínima.
 
La primera temporada en Championship fue extraordinaria, con una plantilla modesta pero muy bien organizada y gestionada lograron un magnífico noveno puesto. La segunda fue algo más complicada ya que sufrieron algunas bajas y lesiones graves de un par de jugadores. El equipo dio muestras de irregularidad y coqueteó con el descenso pero en el tramo final de la campaña reaccionaron y lograron salvarse con comodidad. Jackett mostró una vez más que es un técnico completamente capacitado para afrontar situaciones adversas y lograr el objetivo final.
 
En su última temporada en The Den, el Millwall comenzó de manera discreta, sin embargo a partir de finales del mes septiembre el equipo encadenó una espectacular racha de partidos sin perder que duró hasta el mes de diciembre y que les dejó en puestos de play-off. En noviembre, Jackett cumplió cinco años al frente del club. En la segunda mitad, el ritmo frenético que habían mantenido decayó de manera notable. Se acercaron peligrosamente al descenso. Finalmente se salvaron y Jackett decidió que era el momento de un proyecto nuevo, de un cambio de aires y se marchó del equipo tras finalización de su contrato.
 
A sus 31 años, Sam Ricketts también es alguien que, desde su labor de capitán y con la plena confianza del entrenador, puede ser clave esta temporada para los Wolves. Ricketts empezó su carrera en 2000 con el Oxford United. Tras tres años en la ciudad universitaria que incluye una cesión al Nuneaton, se fue al Telford United. Después de una temporada con el Telford, Kenny Jackett le fichó para el Swansea.
 
Con los Swans estuvo hasta el 2006. Sus buenas actuaciones con la elastica de los «cisnes», le valieron para que el Hull City, de Championship por aquel entonces, lo fichara. Dos temporadas más tarde, en 2008, vivió con los Tigers el ascenso a la Premier League, con los que tuvo un papel muy importante. Una temporada después, en 2009, fichó por el Bolton. Allí realizó dos buenos años. Pero en febrero de 2011 sufrió una gravísima lesión en el tendón de aquiles que casi acabó con su carrera y que le llevó a ser operado en Estados Unidos. Esa lesión también le obligó a tener que aprender a andar de nuevo. El 31 de diciembre de ese mismo año regresó por todo lo alto, ya que en el partido de su regreso marcó un auténtico golazo en un partido que medía al Bolton precisamente con el Wolverhampton y que acabó en empate a uno.
 
Su contrato acababa al final de la temporada, pero aunque el Bolton descendió fue renovado por otras dos temporadas. Ya en Championship perdió algo de protagonismo en el equipo ante el lateral zurdo español Marcos Alonso. Pese a ello seguía teniendo bastantes minutos con el nuevo entrenador Dougie Freedman, sobre todo en el lateral derecho. A principios del pasado mes de junio, con Jackett recién nombrado entrenador, recibió una oferta suya para dejar el Bolton y liderar al Wolverhampton en la League One. Ricketts es sin duda un ejemplo de superación y liderazgo, algo que ha hecho no solo Kenny Jackett lo fiche, sino que nada más llegar lo nombrase capitán.
 
Los transferibles, las bajas y algunos posibles fichajes
 
Kenny Jackett en su plan de renovar un poco el equipo y el aire de pesimismo que han dejado los dos descensos, declaró como transferibles a jugadores que han tenido bastante peso en el equipo estos últimos años como al capitán Karl Henry, al antiguo segundo capitán Roger Johnson, al ex del Tottenham, Jamie O’Hara y al internacional irlandés Stephen Ward. Sus elevados sueldos también han influido en la decisión. Marian Kello, Christoph Berra, Eggert Jónsson, Stephen Hunt y Sylvan Ebanks-Blake, que acaban contrato han dejado ya el club de manera oficial.
 
Karl Henry parecía destinado a marcharse pero semanas más tarde expresó su deseo de seguir en club. Sin embargo, el nuevo técnico ya había tomado la decisión de traspasarle. Finalmente, ha sido el QPR quién ha fichado al jugador por una módica cantidad de algo más de un millón de libras.
 
Roger Johnson llegó a un precio desorbitado de siete millones de libras procedente de Birmingham. No jugó mal el año del primer descenso. Disputó aquella campaña casi por completo pero no dejó buenas sensaciones como defensor. El año siguiente las cosas fueron a peor para él, no solo en lo deportivo. Sus salidas nocturnas y sus problemas con el alcohol quedaron al descubierto cuando llegó una mañana borracho al campo de entrenamiento. Todo esto ha desembocado en su más que inminente salida del equipo.
 
El centrocampista ofensivo Jamie O’Hara dispone de una gran calidad como futbolista, pero es un jugador irregular venido a menos, debido entre otras cosas a diversas lesiones. Su último momento brillante sobre el terreno de juego fue en la temporada 2010-2011. O’Hara fue fundamental en la salvación del equipo en la última jornada. Desde entonces, su carrera ha caído como el equipo en sí. Al final su alto sueldo, su ya mencionada irregularidad y el declive de su carrera futbolística le ha terminado costando un sitio en la plantilla.
 
El caso del lateral izquierdo irlandés Stephen Ward es quizás el más sorprendente. A nivel individual es el que más éxito ha tenido recientemente, cuando disputó los tres partidos de la fase de grupos con la selección de Irlanda en la Eurocopa 2012. Pero se supone que al igual que Henry, Johnson y O’Hara su marcha se debe a sus elevados ingresos.
 
Henry es de momento el único de los cuatro que ha encontrado un nuevo club. Jackett ha declarado que si no encuentran equipo, es probable que les rescindan sus contratos.
 
Se han marchado traspasados el holandés Dorus de Vries (Nottingham Forest), Sam Winnall (Scunthorpe United) y Adam Hammill (Huddersfield Town). Y también se ha marchado, en este caso retirado, una leyenda del club como es el defensa Jody Craddock, a sus 39 años de edad. Sus problemas con las lesiones han hecho que, por desgracia, se perdiese los dos últimos años de su carrera profesional.
 
En lo referente a posibles fichajes, el único jugador que ha sonado en estas semanas ha sido el delantero galés del Bolton, Craig Davies. Pero el técnico de los Trotters ya ha dicho que no piensan venderle.
 
El once ideal
 
Empecemos por la portería. Los Wolves tienen esa posición muy bien cubierta, con el galés Wayne Hennessey, que en principio sería el titular. El nigeriano Carl Ikeme, por su parte se espera que sea la segunda opción, aunque en los partidos de pretemporada ha sido titular. Ahora bien, Hennessey a sus 26 años de edad ha sufrido dos lesiones consecutivas en la misma rodilla en el pasado año, lo que le llevó a perderse toda la temporada 2012-2013. El galés estaba destinado a ser indiscutible con su selección nacional y también, a ser uno de los mejores porteros de la Premier League, pero las lesiones y los descensos se han convertido en duros obstáculos para su carrera.
 
En el lateral derecho es de esperar que el irlandés Kevin Foley sea el titular, aunque su compatriota, el joven Matt Doherty, no se lo pondrá fácil, puesto que viene teniendo muchos minutos en la pretemporada. Para la pareja de centrales hay varias opciones, el más experimentado es sin lugar a dudas Richard Stearman (que continuará en el club pese a que la pasada campaña estuvo cedido en el Ipswich Town de Mick McCarthy) y apunta a titular. Jackett de momento lo ha puesto en el arranque de todos los partidos preparatorios.
 
En el flanco izquierdo del centro de la zaga es donde más competencia se puede esperar. Danny Batth, George Elokobi y Georg Margreitter serán los que se disputen el puesto. Danny Batth es un producto de la cantera, ha tenido algunas cesiones fructíferas a otros equipos, sin embargo por el momento no ha conseguido triunfar en Molineux, aunque puede que este sea su año.
 
El camerunés George Elokobi logró hace unos tres años tener un buen cartel como defensa de gran potencia física. Pese a ello fue perdiendo protagonismo en el equipo, hasta el punto de que apenas contaba y fue cedido al Nottingham Forest y después al Bristol City, donde solamente disputó un partido debido a una lesión. Difícil que sea titular pero gozará de bastantes minutos.
 
Georg Margreitter debería ser el titular. Fue fichado por cerca de dos millones y medio de libras procedente del Austria de Viena, donde demostró su calidad como defensor. La temporada pasada tan solo jugó un partido pero parece que Jackett le reserva un papel importante este año.
 
Para el lateral izquierdo, el capitán Sam Ricketts será indiscutible, excepto si juega algunos partido en el lateral opuesto. En ese caso Elokobi o el joven Jamie Reckord podrían solventar la papeleta.
 
El medio campo es la línea más floja ahora mismo y no sería descartable que hiciesen algún fichaje para reforzar esta zona. Uno de los indiscutibles en el centro de la medular será el polivalente David Edwards, que también puede jugar en banda, ya sea en el lateral o de extremo. Su continuidad puede ser muy importante para el equipo, debido a su experiencia y calidad.
 
El otro medio centro sería el futbolista de malí Tongo Doumbia. La pasada temporada ya tuvo un papel significativo en la medular, jugando un total de 33 partidos. Su buena planta y el despliegue físico que suele realizar puede venirle muy bien al equipo en League One, puesto que es una competición con un juego bastante físico.
 
Una banda la debería ocupar el islandés Björn Sigurdarsson, una apuesta personal de Solbakken que se quedó algo por debajo de las expectativas la pasada campaña. En parte debido a que ocupó principalmente el puesto de delantero, cuando él siempre ha demostrado que rinde mejor como segundo punta o escorado en banda, preferentemente la derecha.
 
En la otra banda está claro que el titular será el jugador más cotizado, habilidoso y destacado del equipo, el francés Bakary Sako. La temporada anterior fue probablemente el mejor del equipo. En los 36 partidos que jugó marcó 9 goles, siendo el segundo máximo goleador del equipo. Su extraordinaria campaña llamó la atención de varios equipos de la Premier League, incluyendo West Brom y Fulham. Los londinenses han sido los que más han insistido para hacerse con sus servicios, pero Jackett dice que no lo venderán por menos de tres millones de libras, un precio que de momento no están dispuestos a pagar.
 
La delantera, desde que hace un año se marchase Steven Fletcher, no ha sido el punto más fuerte del equipo. Sylvan Ebanks-Blake, sin brillar demasiado, marcó 14 goles en Championship, pero con su marcha tras la finalización de su contrato, la cosa se antoja algo más complicada. Sin embargo, todavía disponen de algunas piezas para componer la línea atacante, a la espera también de que llegue algún fichaje.
 
El experimentado Kevin Doyle (que ha sonado para el Celtic Glasgow) debería ser titular, aunque haya decepcionado un poco en las últimas temporadas. Su compañero debería ser el joven escocés de 22 años de edad, Leigh Griffiths. Este delantero fue fichado hace dos años, pero ha estado cedido en el Hibernian de su Escocia natal durante estas dos temporadas. En la primera anotó 8 tantos en 30 encuentros. Sin embargo, esta última ha marcado nada menos que 23 goles en 36 partidos, unas cifras magnificas que le han valido un sitio en la plantilla de los Wolves. Y con el dorsal 9 a la espalda.
 

Sobre el autor

Ander Iturralde