La llegada de un entrenador tan joven como Villas-Boas, de 33 años, al Chelsea ha desatado la ilusión de muchos jóvenes entrenadores que suspiran por conseguir lo mismo. Uno de esos jóvenes aspirantes es John Terry.
The Guardian ha recogido unas palabras del capitán del Chelsea: «Designando a Villas-Boas no fue una decisión valiente, pero fue una muy buena decisión. Hemos hablado sobre la entrada y salida de los entrenadores, pero estoy seguro de que él se quedará mucho tiempo por aquí».
«Imagino a André en el cargo por mucho tiempo, pero todavía tengo tres años más en mi contrato y tendré 33. Evidentemente, ése es mi objetivo: convertirme en entrenador».
«El hecho de que Roberto Di Matteo haya vuelto, y viendo cómo jugadores que han pasado por el club y que lo conocen por dentro están recibiendo oportunidades es fantástico. Sea en el primer equipo o en los reservas, el club nos está apoyando a seguir en el club una vez finalizada la carrera como jugador, la cual cosa es buena».
Terry, de de 30 años, pese a iniciarse en la cantera del West Ham, con tan solo con 15 años decidió fichar por las categorías inferiores del Chelsea. Allí acabó de formarse y consiguió hacerse un hueco en el primer equipo desde sus 18 años, en 1998. Sus 13 temporadas consecutivas en el Chelsea solo se han visto interrumpidas por una cesión al Nottingham Forest de media temporada en el 2000, y ha sido primer capitán de los «blues» desde la llegada de Mourinho, en 2004.
Su palmarés con el Chelsea es cuanto menos espectacular: 3 Premier League (2004-05, 2005-06, 2009-10), 4 FA Cup (1999-2000, 2006-2007, 2008-2009, 2009-2010), 2 Carling Cup (2004-2005, 2006-07) y 2 FA Community Shield (2005, 2009).
Como internacional, no solo ha jugado ya 68 partidos con Inglaterra, sino que es capitán desde 2006, cuando Steve McClaren asó lo decidió. Pese a ello, tras el escándalo de su «affair» con la exnovia de su compañero en el Chelsea Wayne Bridge, Capello decidió quitarle la capitanía, que le fue devuelta un mes más tarde.
