A todos nos ha sorprendido el fulgurante inicio de temporada del Southampton de Mauricio Pochettino. Si analizamos la evolución del año pasado (17º) hasta esta 6ª posición de este arranque liguero, solo tres jugadores se han incorporado al equipo: Dejan Lovren, Victor Wanyama y Pablo Daniel Osvaldo. ¿Tan rápida ha sido la adaptación? ¿Qué aportan al equipo los nuevos fichajes? ¿Es este el motivo de tan buen inicio? Todas estas incógnitas y más serán el objeto del presente artículo.
El equipo de la ciudad de dónde partió el Titanic está cuajando un inmejorable inicio de temporada. Cuatro victorias (West Bromwich, Liverpool, Crystal Palace y Swansea), tres empates (Sunderland, West Ham y Manchester United) y una única derrota (frente al Norwich) le sitúan en una inmejorable sexta posición a un punto de los puestos de Champions League, a dos de la segunda posición y a cuatro del liderato.
Los nuevos: pocos y caros
Extraña bastante que los Saints hayan sido el segundo equipo que menos incorporaciones a sumado a sus filas (solo por detrás del Newcastle), pero por el contrario haya sido el cuarto equipo con mayor inversión, es decir con un balance negativo más grande (solo por detrás de Manchester City, Chelsea y Cardiff). La estrategia de fichajes del club este verano ha sido clara: fichar poco pero bien. Ha reforzado todas las líneas con lo mejor de cada posición.
– Dejan Lovren: el internacional croata de 24 años ha llegado al conjunto inglés por 10 millones de euros. El jugador ha decidido dejar un equipo con larga trayectoria e importancia en Europa, como es el Olympique de Lyon, para recalar en un equipo de media tabla de una liga superior dónde podrá ganar visibilidad. Su arranque ha sido imperial, no solo se ha hecho con la manija de la defensa del equipo de Pochettino, sino que además en estas ocho primeras jornadas ya ha marcado algún gol importante como el que le dio la victoria frente al Liverpool, además del remate que propició el gol de Adam Lallana que desembocó en el meritorio empate del pasado domingo en Old Trafford. Es un seguro atrás, gracias a su rapidez y su excelente colocación. Su 1,88 de altura le hacen ser siempre un peligro a balón parado, como demuestran sus prestaciones ofensivas.
– Victor Wanyama: muy joven y prometedor es este centrocampista keniata, que ha dejado este año el Celtic de Glasgow, para incorporarse a las filas del conjunto inglés, dónde un fútbol físico le permite adecuarse a sus características personales de juego. Solo 22 años le contemplan, pero su excelente rendimiento en el equipo de Neil Lennon le convirtió en un pilar fundamental y en un jugador muy cotizado en toda Europa. Finalmente, tras rechazar al Cardiff City, llegó a las filas del Southampton. Se trata de un centrocampista muy físico, que permite darle más empaque al centro del campo y recuperar un gran cantidad de balones. 25 internacionalidades con Kenia pese a su juventud le avalan.
– Pablo Daniel Osvaldo: quizás sea el más conocido de los tres por su pasado en las liga española, dónde hizo las delicias de los aficionados del Espanyol, de donde salió dejando una buena cantidad de dinero rumbo a la Roma, donde no llegó a alcanzar el nivel exhibido en España, aunque sí tuvo un papel importante, y compartió equipo con uno de los mejores jugadores del fútbol europeo, como Francesco Totti. Este verano dejó la Roma (actualmente, líder indiscutible en Italia) por 15 millones de euros. Llega para ser un fijo y complementar a un Rickie Lambert, que ha sido recientemente convocado por la selección, lo que nos hace una idea de lo bien que está. De todos es conocido sus desmarques y su remate. Hará disfrutar a la parroquia de St. Mary’s.
El pastel ya estaba en el horno
Cuando hablamos de que estos tres jugadores son la guinda del pastel, debemos entender que este pastel se ha ido cociendo lentamente durante los últimos años, a lo largo de los cuales el equipo del sur de Inglaterra no ha dejado de invertir en nuevos jugadores y en reflotar al equipo.
Si bien este año la inversión arroja un saldo negativo de unos 38 millones aproximadamente, el año pasado, el conjunto inglés gastó 41 millones de euros en su vuelta a la Premier League. Nombres de la talla de Gastón Ramírez (15 millones), Jay Rodríguez (8,5 millones) u otros nombres como Emmanuel Mayuka (4 millones), llegaron al equipo.
Debemos destacar que el Southampton ha sido un club que ha producido grandes estrellas de la talla de Theo Walcott, por el que ingresó 17 millones de euros, Alex Oxlade-Chamberlain, por el que ingresó otros 13, o Gareth Bale. A ellos cabe añadir algunas de las promesas actuales del club, entre las que destacan Luke Shaw y James Ward-Prowse. Además, el club ha sabido invertir bien los beneficios para volver a convertir a la entidad en un grande del país, como demuestra el hecho de que haya sido capaz de llevarse a tres jugadores importantes de clubes que jugaban competiciones europeas (a excepción de la Roma) y pelean el título de liga. Por lo que el proyecto ha tenido que ser lo suficientemente atractivo.
Una evolución táctica
Si es verdad que el verdadero cambio que ha sufrido el equipo ha sido en defensa, pues en los ocho primeros partidos de liga del año pasado, el conjunto que por aquel entonces entrenaba Nigel Adkins, había encajado la friolera de 24 goles, mientras que este año solo ha encajado tres. 21 goles menos que le han convertido en el equipo menos goleado de la Premier League. Por el contrario, el año pasado a estas alturas de liga, rozaban el descenso con una defensa frágil.
Si analizamos los cambios en la defensa, hemos pasado de una línea formada por Nathaniel Clyne, José Fonte, Jos Hooiveld y Danny Fox a una evolución con Clyne, Fonte, Lovren y Shaw. ¿Qué cabe destacar de este cambio? Dos nombres, Dejan Lovren, al que hemos analizado antes, y el de Luke Shaw, que es un joven y prometedor lateral izquierdo inglés que aporta mucha solidez al conjunto. Pero, sin duda, otro de los factores importantes radica en la evolución de este equipo, que ha pasado de utilizar un único pivote como Morgan Scheneiderlin a tener un compañero en el doble pivote como Victor Wanyama. Esto produce una mayor solidez defensiva y un centro del campo más compacto, complicando al rival su labor.
Lo que queda claro es que los Saints han arrancado muy fuertes y tienen una enorme solidez para hacer un buen año. De momento se sitúa en la sexta posición liguera y ha conseguido ser un duro rival, ganando a equipos punteros como Liverpool o empatando con el Manchester United. En la Copa de la Liga se enfrentará en 4ª ronda contra el Sunderland. Si gana, estará en cuartos de final. La única duda que genera el equipo hace referencia a la profundidad de plantilla para participar en tres competiciones. Pero lo que es evidente es que el equipo de Pochettino se ha convertido en uno de los principales animadores de la Premier League.