¡Llega la primavera a Inglaterra! Realmente es lo mismo que todo el año, solo que el agua de lluvia está más caliente que en invierno y más fría que en verano. Pero el sol se puede ver escondido entre los nubarrones grises, los pájaros cantan al mal tiempo todo lo que saben para que se vaya (con escasos resultados) y la enfermería del Arsenal empieza a florecer, apareciendo mágicamente una cantidad ingente de jugadores.
Este martes lunes el Arsenal certificó su pase a cuartos tras un encuentro contra el Hull que se saldó con un 0-4, dos dobletes (de Olivier Giroud y Theo Walcott, por si a alguien le importa) y un hat trick de lesionados. Cayeron Per Mertesacker, Gabriel Paulista y Aaron Ramsey.
Cuando un equipo tiene casi tantos lesionados por partido como tantos, o bien gana por 1-0, o mal asunto. Habrá quien podría pensar que el Arsenal sacrificó ayer jugadores para marcar goles, como si de algún extraño ritual se tratase. Por asociación de ideas se puede pensar que Emmanuel Adebayor jugó en su día allí. Lo mismo se dejó algo.
Independientemente de que el Arsenal ganase o perdiese el martes, disputaría partido este sábado, de liga contra el West Bromwich Albion, o de FA Cup, contra el Watford. Pues bien, en una semana los Gunners van a jugar encuentros en las tres competiciones en las que siguen vivos. Domingo, miércoles, sábado; FA Cup, Champions y Premier.
Las dudas se ciernen sobre la planificación de Arsène Wenger, ya que aunque la eliminatoria con el Barça esté prácticamente dado por perdido (tendrían que remontar dos goles en el Camp Nou), tampoco es muy factible que el Arsenal salga con el sub-17 ante los actuales campeones de Europa. Alineará a los sub-19, pero porque no tienen más jugadores en el primer equipo, puesto que la mitad está en la enfermería.
En Premier eran candidatos, pero podría decirse que han dejado de serlo. Ocho puntos les separan del liderato, y a estas alturas esa distancia es a considerar. Deberían tener cuidado de no perder más puntos, puesto que el Manchester City, con un partido menos y a dos puntos, no parece aflojar (si bien tampoco parece que vaya a acelerar), y el West Ham viene pisando fuerte y está solo un punto por detrás de los Citizens. Hasta el Manchester United del nuevo dios del parroquiano medio de Old Trafford, Marcus Rashford, anda . Sus próximos encuentros incluyen rivales que pueden dar algún problema, pero les quedan varios de los equipos más débiles de la tabla, como son Sunderland, Aston Villa o Norwich City.
Por otro lado, en FA Cup, el Watford, aunque un equipo rocoso, es accesible. Quique Sánchez Flores ha hecho de un recién ascendido un equipo regular, sólido y con cierta capacidad de dar problemas a los grandes, pero el Arsenal tiene en la copa la opción más factible de conseguir algún título esta temporada. No es el único, ya que varios equipos tienen en esta competición puesta sus miras. Principalmente equipos que no han rendido al nivel esperado y quieren salvar la temporada, como Manchester United, Chelsea o Everton, estando los dos primeros eliminados ya de Champions. No obstante el West Ham vuelve a estar en la lista, aunque por distintos motivos. Este año dejan Boleyn Ground y lo quieren hacer por todo lo alto. FA Cup y clasificación para Champions por 4ª plaza sería un final perfecto en Upton Park, y no parece tan remota dicha posibilidad.
Lo mejor que podría pasar al Arsenal es tener un poco de suerte, solventar el encuentro en 90 minutos con un 1-0 este domingo, sin que haya lesiones, con un juego aburrido que requiera poco esfuerzo físico. Emparejamiento benigno para semifinales, suerte en la final y levantar la tercera FA Cup consecutiva. Solo Bolton Wanderers y Blackburn Rovers lo han conseguido (y nos remontamos a 1887). En el resto de aspectos… con lograr el archiconocido cuarto puesto y no ser despedazados por el Barcelona la semana que viene, más que suficiente.
Está claro que ser terceros es mucho mejor que el eterno cuarto puesto al que se había resignado el público del Emirates estos últimos años, pero se dice, una y otra vez: «si el Arsenal no gana este año la Premier, no la gana nunca, lo tienen muy fácil». Y se dice con razón. A cada año que pasa, una situación más fácil para los Gunners se presenta y, de alguna manera, consiguen lesionarse, meterse goles en propia y clasificarse para Champions. Rocambolesco destino el de los Gunners.
Si esta temporada los de Highbury&Islington se quedan sin títulos (dado que han tenido esperanzas) la afición pedirá una vez más la cabeza de Wenger (y posiblemente también la del cuerpo médico o chamán encargado de la planificación médica) por desaprovechar buenas posiciones. Y tener sed es duro, pero ver el agua y que sea un espejismo es peor.