Lo que cada club necesita (y lo que fichará)

 

 

Antes de la goleada ante el Reading, seis equipos de la Premier League sumaban más goles que los Gunners. El teórico sustituto de Robin van Persie, Olivier Giroud, solo suma cuatro goles en liga (una tercera parte que el holandés). Así que la lista de prioridades de Wenger la debería encabezar un delantero centro. Klaas-Jan Huntelaar y Fernando Llorente acaban contrato en verano. 

 

Un lateral adolescente de madre finlandesa y padre inglés procedente de la League One. Y vendiendo a Theo Walcott. 

 

  

Considerando que Paul Lambert dispone del equipo más joven de la Premier League, una máquina del tiempo que le permitiera trasladarse inmediatamente a la temporada 2015-16 sería lo idóneo. Mientras no se fabrique, un jugador con experiencia que ayude a progresar al prometedor pero joven grupo de Lambert podría ser una buena incorporación.

 

Nada. A menos que se marche Darren Bent, en cuyo caso Lambert deberá fichar un delantero. ¿Otro belga?

 

 

Lo mismo que hace seis meses: un medio centro y un delantero. Con Lampard en el ocaso y Oriol Romeu lesionado lo que resta de temporada, solo Ramires y Obi Mikel parecen en situación de ocupar el doble pivote. Y Fernando Torres, aunque la llegada de Benítez parece haberle reactivado, sigue generando dudas en punta. Máxime si Sturridge acaba marchándose.

 

Un delantero. Considerando la habilidad que mostró Benítez para fichar atacantes en su etapa en el Liverpool (Djibril Cissé por 14 millones de libras, Ryan Babel por 11 o Robbie Keane por 19), lo mejor que le podría pasar al Chelsea es repescar a Romelu Lukaku.

 

 

El Everton es el segundo equipo que más disparos a puerta realiza por partido (17). Y sin embargo, solo es el quinto con más goles a favor (28, los mismos que el Fulham). Nikica Jelavic, que tan buena impresión causó la segunda mitad de la temporada pasada, está sufriendo para marcar goles en esta. Otro delantero que le hiciera competencia podría resultar de utilidad para Moyes.

 

Nada. A menos que Moyes venda a Fellaini. En ese caso, invertirá el dinero recibido en fichar a tres jugadores semidesconocidos que la temporada que viene estarán entre los diez mejores jugadores de la Premier League.

 

 

En verano, el Fulham vendió a Moussa Dembélé y Clint Dempsey por más de 20 millones de libras. La aportación creativa y goleadora del estadounidense ha sido retomada por Dimitar Berbatov. Pero reemplazar al belga no ha resultado tan sencillo. Un medio organizador no le iría mal a Martin Jol.

 

Jol recurrirá a su labia y encanto personal para contratar a algún jugador con el que ya haya coincidido en el pasado como hizo con Berbatov. ¿Jermaine Jenas? ¿Darren Bent? ¿Tom Huddlestone? ¿Mido? ¿Edgar Davids? ¿Robbie Keane?

 

 

El propio Brendan Rodgers reconoció tras la derrota en casa por 1-3 ante el Aston Villa que algunos de sus jugadores comenzaban a acusar el cansancio, comenzando por Raheem Sterling. La principal prioridad de Rodgers en enero será fichar un delantero o un extremo de calidad. 

 

Un delantero o un extremo de calidad.

 

 

Un entrenador.

 

Un delantero eslavo por más de 30 millones de libras.

 

 

Considerando las recurrentes lesiones y la edad de Rio Ferdinand y Nemanja Vidic, a Ferguson no le caería mal un defensa central.

 

Nada, a menos que se ponga a tiro algún jugador de primer nivel a precio de ganga. ¿Hola? ¿Wesley?

 

 

La prioridad de Alan Pardew ahora mismo es frenar la ola de lesiones que está asolando a su equipo. Los jugadores del Newcastle están cayendo a la misma velocidad que los soldados nazis en Stalingrado.

 

Cualquier jugador. Lo único seguro es que hablará francés. Como Demba Ba, Hatem Ben Arfa, Romain Amalfitano, Gabriel Obertan, Sylvain Marveaux, Yohan Cabaye o Papiss Cissé. ¿Loïc Remy?

 

 

Chris Hughton ha dado con su once ideal. Lo único que le falta es algo de banquillo, en especial en la delantera. Steve Morison y Simeon Jackson no parecen capacitados para ocupar las botas de Grant Holt el día que el inglés no pueda estar sobre el césped.

 

Tras el excelente rendimiento de Jonny Howson y Robert Snodgrass, lo más probable es que Hughton se acabe llevando a la siguiente perla del Leeds. ¿Aidy White?

 

 

Vender a la mitad de los jugadores que trajo Mark Hughes.

 

Un jugador mayor de 30 años con sus mejores días a su espalda y un sueldo desorbitado. Sin ánimo de ofender, Anelka.

 

 

Un equipo nuevo. Y volver a agosto.

 

Nadie. O un par de jugadores cedidos por el Manchester United aprovechando la amistad de Ferguson con McDermott.

 

 

Un par de defensas con experiencia en la Premier League. Y dejar de fichar japoneses.

 

Un extremo creativo que se unirá a Rickie Lambert, Jay Rodríguez, Gastón Ramírez, Guly do Prado, Adam Lallana. U otro japonés.

 

 

Que Michael Owen demuestre a los que creen que le interesan más los caballos que el fútbol que se equivocan. Puesto que difícilmente sucederá, tal vez Pulis necesite otro delantero, aunque Kenwyne Jones ha estado a la altura cuando Crouch ha faltado. Otra opción sería un extremo con desborde que supla la marcha de Jermaine Pennant, y la mediocre actuación hasta ahora de Matt Etherington y Michael Kightly.

 

Un central anglosajón o alemán de casi dos metros que se sienta más cómodo pasando balones con la cabeza que con el pie.

 

 

Que Sessegnon descubra que ya ha comenzado la temporada. 

 

Un sustituto para Sessegnon.

 

 

Retener a Michu a toda costa. Danny Graham e Itay Shechter, los otros jugadores que han ocupado la punta de ataque esta temporada, suman un gol. Entre ambos.

 

Posiblemente nada. Como mucho, un lateral que contribuya a suplir la baja de Neil Taylor hasta final de temporada. Dwight Tiendalli no tiene el nivel para jugar en la Premier League y Ben Davies no está preparado para aguantar este ritmo de competición hasta el final.

 

 

Un recambio para la banda izquierda no le vendría mal a Villas-Boas. Ante la ausencia de Assou-Ekotto, es el central Vertonghen quién tiene que ocupar esa posición. Y cuando falta Gareth Bale, el técnico portugués suele recurrir a Clint Dempsey o Gylfi Sigurdsson, que no son precisamente hombres de banda.

 

Daniel Levy es más de vender que de comprar. Y conociendo sus dotes de negociador, es capaz de vender a Michael Dawson al Queens Park Rangers por 25 millones de libras. Y que le den a Junior Hoilett a cambio.

 

 

Que la liga se acabe ya. Antes de que el cansancio y las rotaciones obligadas de Steve Clarke acaben enviando a los Baggies a la zona media de la tabla.

 

No es imposible que Romelu Lukaku regrese en enero al Chelsea en caso de que los Blues no encuentren un delantero de garantías. En ese caso, la solución más rentable para el West Brom sería repescar a Chris Wood de su cesión en el Millwall.

 

 

Andy Carroll y Carlton Cole suman un gol en liga cada uno. Por no mencionar el hecho de que uno es el negativo del otro. Quizás un delantero con características diferentes podría aportar variantes ofensivas diferentes. Un atacante que pese menos de cien kilos y sea capaz de dar un pase a más de tres metros. Y si de paso es capaz de marcar algún gol, tanto mejor.

 

Un medio centro africano de corte defensivo con una presencia física imponente. Big Sam no tiene suficiente con Alou Diarra y Momo Diamé. Y acabará alineando a todos. Al mismo tiempo.

 

 

¿Por dónde empezar? Digamos que de todo menos un portero. Y eso que Ali Al-Habsi no está protagonizando su mejor año. Aunque considerando que solo Stoke, Villa y QPR han marcado menos goles en liga que el Wigan, posiblemente lo más urgente sea un atacante con gol. Que permita dar descanso a Franco Di Santo para que llegue más fresco a sus partidos internacionales con Argentina. En fin.

 

Un hondureño. Que juegue en la MLS. De hecho, eso es exactamente lo que ya ha hecho Roberto Martínez. Su nombre es Roger Spinoza y es un medio centro que procede de Sporting Kansas City.