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En ocasiones, uno toma decisiones en la vida que, tras mucho meditar, le parecen acertadas. Pero la vida es impredecible. Como el fútbol. Y a veces es complicado acertar. Jonathan Kodjia se encontraba este pasado verano en el mejor momento de su carrera: había ascendido con el Angers a la élite después de ser el máximo goleador en Ligue 2. Tenía la opción de seguir de seguir en Angers o marcharse al Bristol City, equipo en el que se supone que tendría un sueldo mayor y en el que sería parte de un equipo con, probablemente, un mayor potencial, sobre todo, a nivel económico. A nivel personal, le está yendo como la seda. Pero no tanto a nivel colectivo.
Nacido en Saint-Denis, junto a París, allá por el 22 de octubre de 1989, tiene todavía la opción de representar a Francia o Costa de Marfil, el país del que proviene su familia. Empezó su carrera como futbolista en el Stade de Reims donde, en 2008, con 19 años, se incorporó al primer equipo. Sin embargo, jamás fue capaz de hacerse un hueco. En 2012 salió cedido por primera vez con destino al Cherbourg. Después al Amiens, donde empezó forjar su capacidad goleadora. Tras ello, recaló, también cedido, en el SM Caen. Ahí tuvo un papel más o menos importante y consiguió ascender con ellos a Ligue 1. Él, no obstante, no continuó en Caen. Su contrato con el Reims había finalizado pero el Caen no se decidió a hacerse definitivamente con sus servicios y fue a parar de nuevo a la segunda división, en este caso al Angers. Fue ahí donde al fin le dieron un rol capital como estandarte de la ofensiva. Y respondió, nada menos que con 15 goles en 28 partidos. Estas cifras tuvieron una importancia fundamental en la consecución del ascenso.
Encaraba ya la nueva temporada con el Angers antes de que el Bristol City decidiese ficharle. El club del suroeste de Inglaterra abonó 2,1 millones de libras al Angers para oficializar el traspaso. Kodjia desembarcaba así en el Bristol City, un equipo que podía aprovechar la inercia positiva que les había supuesto ascender de League One con una contundencia abrumadora. Sin embargo, el club tuvo una enorme, a la que par que sorprendente, dificultad para fichar jugadores. Pese a efectuar ofertas de 8 millones por Dwight Gayle del Crystal Palace primero, y por Andre Gray del Brentford después, no lograron cerrar ninguno de los dos fichajes.
Esta dificultad para incorporar efectivos ha repercutido en un flojo arranque de los Robins. El Angers, en cambio, vive un momento totalmente distinto, situado en el segundo puesto del máximo escalafón del fútbol francés. Está siendo la gran sorpresa y revelación esta temporada en Francia. Con una plantilla bastante modesta, están jugando a un nivel sensacional y gracias a ello se encuentran situados en puestos de Champions League. El Bristol City, en cambio, se sitúa en el extremo opuesto de la tabla en Championship, en el 20º puesto con 11 puntos, tan sólo uno por encima del descenso. Pese al salto de categoría ha resultado hasta cierto punto sorprendente su mal comienzo. Solamente dos victorias en los primeros 13 partidos de liga y siendo la peor defensa (empatado con el QPR) con 20 goles recibidos. No obstante, Kodjia está siendo la noticia positiva para ellos.
Un delantero ágil, veloz, físicamente portentoso y con gran sentido del oportunismo, que la verdad es que ha encajado desde el principio y está a un fantástico nivel habiendo marcado ya seis goles. Puede que si hubiese presionado en verano al Angers podría haber permanecido en el club francés y ser parte del gran momento que están viviendo en lugar de estar en la parte baja de Championship con el Bristol City. Pero también es cierto que sólo han pasado un par de meses y medio de competición y que es pronto para extraer conclusiones. Porque también cabe la posibilidad de que el Angers termine descendiendo (o sufra por no hacerlo) y de que el Bristol City se salve e incluso (aunque esto ya es más complicado) alcance los puestos de play-off. Lo único seguro es el gran momento que Kodjia está viviendo a nivel individual, siendo una de las principales sensaciones de la temporada.
