El Newcastle, que se había convertido en una de las revelaciones de la temporada en la Premier League, ha sumado este sábado su tercera derrota en los últimos cuatro partidos, tras caer ante el Norwich por 4-2 en Carrow Road. Un revés provocado por un cúmulo de circunstancias adversas, que incluyen tres goles de cabeza encajados en la segunda parte, la expulsión de Dan Gosling y la improvisada defensa provocada por las múltiples lesiones que afectan a las «urracas».

 

La estrella del encuentro fue el delantero Grant Holt, que por fin gozó de la titularidad en punta y se reivindicó con dos goles. Paul Lambert, el técnico de los «canaries», ha apostado hasta ahora por Wes Hoolahan y Steve Morison en ataque, pero hoy optó por alinear a Morison y Golt en punta con Hoolahan por detrás. Y el cambio se notó en el marcador.

 

Los visitantes comenzaron mejor a pesar de sus múltiples ausencias. Los defensas centrales Steven Taylor, que se perderá toda la temporada, y Fabricio Coloccini fueron sustituidos por James Perch y Danny Simpson, que abandonó el lateral para ubicarse en el centro. Mientras, Cheick Tioté y Guthrie siguen de baja en el centro del campo.

 

El recién ascendido Norwich ha impresionado en casa hasta ahora y tampoco falló en esta ocasión. Incluso la fortuna estuvo de su lado. El asistente Peter Kirkup consideró como córner un balón que el portero de las «urracas» Tim Krul llegó a salvar después de que un defensa desviara el centro de Marc Tierney. Y el córner de Andrew Surman dio origen al gol de Wes Hoolahan, después de que Krul detuviera en primera instancia un remate de cabeza de Andrew Croft.

 

En el tiempo de descuento de la primera parte, un excelente pase de Yohan Cabaye permitió a Demba Ba burlar a la estática línea defensiva del Norwich y poner el tanto del empate justo antes del descanso.

 

Parecía que el encuentro podía cambiar de manos, pero la fragilidad defensiva del Newcastle y su falta de disciplina acabaron por decantar el partido.

 

Justo antes de la hora de juego, Grant Holt cabeceó por dos veces y logró el 2-1 con ayuda del larguero, tras un centro de Crofts, que dispuso de mucho espacio gracias al mal pase de Gosling.

 

Solo cuatro minutos después, Steve Morison marcó su quinto gol en seis partidos y el 3-1 que parecía definitivo. Sobre todo cuando inmediatamente después, Dan Gosling, que ya estaba amonestado, se vio superado por el ritmo frenético del encuentro y Martin Atkinson le mostró la roja directa por una entrada a destiempo.

 

Con dos goles de desventaja y un hombre menos, los más de 20 minutos restantes se antojaban como una agonía. Pero entonces apareció Demba Ba una vez más. Shola Ameobi robó un balón cerca del área y Ba marcó el 3-2, su 11º gol de la temporada.

 

Pero las esperanzas del Newcastle se esfumarían solo 10 minutos después con el segundo gol de Holt. El delantero remató de cabeza el centro de Bradley Johnson y sentenció el encuentro.