Ilie Oleart

Los Royals están de vuelta

A pesar de haber disputado la final del play-off de ascenso la temporada pasada, pocos contaban con que el Reading volvería a ser un candidato al ascenso tras las ventas de Matt Mills y Shane Long. Sin embargo, Brian McDermott logró reunir un grupo competitivo que ha devuelto al club a la Premier League, donde competirá por tercera vez en su historia. 

 
Gracias a su victoria por 1-0 ante el Nottingham Forest y a una impresionante racha final (15 victorias, un empate y una derrota en sus últimos 17 encuentros de liga), el Reading regresará a la Premier League la próxima temporada.
 
El club, fundado en 1871, es uno de los más antiguos de Inglaterra, aunque no se unió a la Football League hasta 1920 y no jugó en la élite del fútbol inglés hasta la temporada 2006-07, tras ganar el Championship la temporada anterior bajo las órdenes de Steve Coppell, con un récord de 106 puntos, 99 goles a favor y solo dos derrotas.
 
En su primera temporada en la élite, los Royals acabaron en una magnífica octava posición. Pero la temporada siguiente acabaron descendiendo tras una pésima segunda vuelta. Ahora dispondrán de una segunda oportunidad.
 
Sir John Madejski, un hombre hecho a sí mismo que lleva más de dos décadas al frente del club
 
Sir John Robert Madejski es el dueño del club. Aunque hoy en día sus actividades abarcan múltiples sectores (bienes inmuebles, medios de comunicación, hoteles, restaurantes, edición), hizo fortuna gracias a la fundación de la revista Auto Trader, dedicada a la venta de coches usados.
 
Madejski nació como Robert John Hurst producto de una aventura romántica durante la Segunda Guerra Mundial. Fue internado en un orfanato en Reading, la ciudad natal de su madre, que le reclamaría posteriormente, después de casarse con un aviador polaco. Hurst se fue a vivir ambos y adoptó el apellido de su padrastro.
 
Compró el club en 1990, cuando vagaba por la tercera división. En 1998, el club abandonó Elm Park, que había sido su hogar durante más de un siglo, y se mudó al flamante Madejski Stadium, con capacidad para 24.200 espectadores. El coste de la instalación, que ascendió a unos 25 millones de libras, fue sufragado casi íntegramente por Madejski.
 
Esta temporada, la compañía Thames Sports Investment (TSI), fundada por el ruso Anton Zingarevich, llegó a un acuerdo inicial con Madejski para comprar una parte del club y así aportar una inyección económica a la entidad.
 
El arquitecto del ascenso
 
A pesar de sus 51 años, Brian McDermott, el técnico del Reading, es relativamente un recién llegado al mundo de la dirección.
 
Tras un breve paso por el Slough Town y el Woking, McDermott aterrizó en el Reading en 2000 como jefe de ojeadores del club. Tras hacerse cargo de la dirección de los equipos juvenil y reserva, en diciembre de 2009 asumió provisionalmente la dirección del primer equipo, cuando Brendan Rodgers fue despedido tras solo seis meses en el cargo.
 
Los Royals ocupaban en aquel momento la 20ª posición en la tabla pero bajo las órdenes de McDermott ascendieron hasta la novena.
 
La temporada pasada, el Reading finalizó en quinto lugar y disputó la final del play-off de ascenso ante el Swansea de Brendan Rodgers, donde cayó por 4-2.
 
McDermott reconoce haber aprendido mucho de aquella derrota. “Es una gran curva de aprendizaje. Me siento más fuerte gracias a aquello”. En el descanso de aquella final, su equipo perdía por 3-0. “Recuerdo entrar muy lentamente en el vestuario. Si vas a dejarte llevar por el pánico, hazlo lentamente”. Aquella lección le resultó útil al principio de esta temporada, cuando los Royals sufrieron cuatro derrotas consecutivas y cayeron al 23er lugar.
 
McDermott se formó como delantero en el Arsenal y fue elegido mejor jugador del año en Suecia en 1984 tras disputar 17 partidos con el IFK Norrkoping. Tras pasar por múltiples clubes, incluyendo una breve estancia en China, acabó su carrera en el club de su ciudad natal, Slough, a veinte millas de Reading.
 
Desde que llegó al club hace más de una década, McDermott ha tenido ocasión de analizar y aprender del trabajo de técnicos como Alan Pardew, Steve Coppell y Brendan Rodgers. Tal vez esa sea una de las claves del McDermott entrenador. Su equipo transmite el sentido de la organización de los equipos de Pardew y parece haber aprendido la lección de Coppell sobre cómo ascender a la Premier League. La influencia de Rodgers en el sistema de McDermott es menos perceptible pero resulta evidente en la presencia de interiores rápidos y habilidosos en las bandas.
 
Uno de los secretos de McDermott radica en su capacidad de motivación. “Tenemos un vestuario con un gran corazón. La calidad no es nuestra mejor virtud”, explica. “En ocasiones no somos excelentes con el balón sino por nuestra actitud y ganas”. El mejor ejemplo se produjo en el encuentro contra el Ipswich de final de año. En el minuto 80, el delantero Simon Church corrió 30 metros a través del área de penalti rival para bloquear el despeje del portero. “Eso demuestra nuestra voluntad de ganar. Hemos aprendido los detalles para ganar partidos”, dijo McDermott tras el encuentro.
 
El equipo: una exitosa mezcla de juventud y experiencia
 
En verano, el equipo perdió a sus dos mejores jugadores, el delantero Shane Long, que fichó por el West Brom, y el defensa Matt Mills, que se fue al Leicester. Estas bajas provocaron que el equipo tuviera un arranque titubeante de campeonato, al igual que había sucedido la temporada anterior, cuando el club perdió a Gylfi Sigurdsson, entre otros.
 
Sin embargo, a medida que ha avanzado la temporada, los recién llegados se han ido acoplando y las prestaciones del equipo han mejorado paulatinamente. Estos son los jugadores clave de los Royals.
 
Adam Federici (27 años, portero)
 
El internacional australiano ha sido un fijo en la portería esta temporada. Ha mantenido su portería a cero 19 veces y logró permanecer 490 minutos sin encajar un gol a principios de temporada. El penalti que detuvo en el AMEX ante el Brighton hace dos semanas permitió a los Royals llevarse tres puntos que han resultado vitales.
 
Alex Pearce (23 años, defensa central)
 
Internacional sub-21 con Escocia, este defensa central destaca por su juego posicional y su capacidad de liderazgo, que compensan su lentitud. Salvando las distancias, recuerda al joven John Terry, incluyendo su capacidad para marcar goles a balón parado.
 
Ian Hart (34 años, lateral izquierdo)
 
El exjugador de Leeds y Levante entre otros regresará a la Premier League 16 años después de debutar en la élite del fútbol inglés. El irlandés marcó de penalti decisivo ante el West Ham y su experiencia ha sido clave en el ascenso del equipo.
 
Kaspars Gorkss (30 años, defensa central)
 
Quizás el fichaje clave del verano, cuando llegó para sustituir al capitán Matt Mills con el equipo en zona de descenso. El capitán de Letonia se ha erigido en una roca en el centro de la zaga y su experiencia parece haber ayudado a su compañero Pearce a progresar. El año pasado, contribuyó al ascenso del QPR, un bagaje que definitivamente ha ayudado a los Royals esta temporada.
 
Jem Karacan (23 años, centrocampista)
 
Nació en Londres de madre inglesa pero ha representado a Turquía hasta la categoría sub-21. Karacan se formó en el Reading y ha desarrollado un papel clave en el centro del campo del equipo esta temporada.
 
Jason Roberts (34 años, delantero)
 
A pesar de contar con tres delanteros con mucho talento (Noel Hunt, Adam Le Fondre y Simon Church), la llegada de Roberts en enero ha resultado ser una jugada maestra. Su experiencia, fuerza e instinto goleador han resultado decisivos en el tramo final de temporada, en que ha logrado seis goles cruciales.
 
Adam Le Fondre (25 años, delantero)
 
Glenville Adam J. le Fondre llegó en verano al Reading procedente del Rotherham, donde había marcado 54 goles en dos temporadas. La competencia en la delantera, acrecentada con la llegada de Jason Roberts en enero, le condenó al banquillo en muchos partidos. Pero lejos de hundirse, Le Fondre se ha convertido en el Ole Gunnar Solskjaer del equipo, un jugador que disputa pocos minutos pero siempre marca. Ante el Southampton, marcó dos goles en 26 minutos. Una semana antes, le había marcado otros dos al Leeds en 21. Ante el Millwall, le bastaron 26 para dar la victoria a su equipo por 1-2. Y ante el Watford, tuvo suficiente con 7 minutos para marcar el gol decisivo en otro 1-2.
 

Sobre el autor

Ilie Oleart